33- ¿final Feliz?

Fin del Flashback…

-Gracias por salvarme aquella vez, Hobi- susurré en su oído, se alejó rápidamente y se puso a detallar cada facción de mi rostro, intentando hallar alguna similitud con la yo del pasado -¿luciérnaga?- me preguntó con una enorme sonrisa en sus labios, asentí repetidas veces –gracias nuevamente, por haberme ayudado aquella vez, te busqué tantas veces para hacerlo pero no pude encontrarte- su sonrisa era bastante grande y cada vez lo era más, de manera que yo pensaba de que no era posible que creciera –tuve que viajar esa misma noche de regreso a Corea, Estuve esperando poder encontrarte, cuando te vi aquí, sentía que lo había hecho en otra ocasión, pero algo en mi mente no me lo permitía- escuché el quejido de alguien detrás de mí, Jungkook se estaba despertando, es hora de que me vaya- susurró para desaparecer de la habitación, -¿había alguien aquí?- yo asentí y le dije que había sido Hoseok, ambos volvimos a dormir hasta que un pequeño llorido nos despertó y uniéndose después el segundo –bienvenido a la vida de padres- dije sonriendo al igual que él.

Al día siguiente ya estábamos en casa, nuestras madres habían decidido estar aquí con nosotros mientras mis días de recuperación terminan, se los agradezco porque siento que me hubiesen dado una paliza demasiado grande. –T/N, querida- se acercó a mí la madre de Kookie, me senté en la cama -¿cómo te sientes?- acarició mi cabeza, en ella había encontrado una segunda madre, ha estado apoyándonos en cada momento, a pesar de eso, nunca se enteró del secuestro ni el juicio, no queríamos preocuparlos, los padres de Jungkook ni los míos se han enterado y queremos mantenerlo en secreto por un largo tiempo –He estado bien, fue una enorme sorpresa para todos, pero es una gran noticia, esta familia creció más de lo que habíamos pensado- ella sonrió ante mi respuesta –te haré una confesión, yo ya esperaba que fueran gemelos- rió ante el gesto de sorpresa en mi rostro y continuó hablando- Tu madre tiene una hermana gemela- ¡¿qué?! Una hermana, es imposible –ella no me había dicho nada de eso- dije en un tono bajo -¿qué pasó con ella?- pregunté, dudando un poco en si querría escuchar la respuesta –Nadie lo sabe, ella se fue de casa y ninguno supo nada más de ella. Era bastante extraña, es un tema que a tu madre no le gusta tocar con nadie, así que no le vayas a decir que te lo dije, es un… secreto de la generación anterior- me giñó un ojo, es algo extraño, pensé que ella no me guardaría secretos, pero en fin, es su decisión.

Dos semanas después…

Pov. Rosé…

-Estoy nerviosa- dije para mí misma dando vueltas en mi oficina, es hora de hablar con T/n, debo disculparme por todas las cosas horribles que hice, fui realmente mala e injusta con ella, actúa como si nada hubiese pasado, pero sé que no es así, ni siquiera me ha mirado a los ojos cuando hemos estado juntas, la conozco desde pequeña sé que hay algo que la está molestando –Rosé- dijo Taehyung entrando y asomando su cabeza por la puerta –no te olvides de la reunión de hoy, has estado en las nubes últimamente, ¿has estado bien? Incluso parece que no has dormido- dijo acercándose para observarme mejor ¿por qué me pone tan nerviosa? – e-eh y-yo… estoy pensando en T/N, es sólo eso- me alejé de él.

-¿Es sólo eso? Siento que me has estado evitando desde hace días, si algo te molesta de mí, solamente dímelo, no quiero estar mal contigo Rosé- se acercó nuevamente a mí, estaba notablemente preocupado, he dejado que esto me afecte más de lo que pensé- lo siento- susurré –No has hecho nada mal, de hecho, creo que es al contrario, has sido de un apoyo enorme para mí, tengo miedo de hacerte daño, eres muy bueno Kim Taehyung, pero yo he llegado a hacer cosas horribles con las personas que más amaba ¿quién querría tener a su lado a alguien como yo? –Reí y lloré al mismo tiempo- Yo… yo te quiero así como eres, nadie puede cambiar de la noche a la mañana, pero estoy dispuesto a luchar contigo, te recordaré siempre que eres mejor que tu pasado, no dejes que las cosas que hiciste antes te definan si es que quieres cambiar tu destino- estaba cada vez más cerca de mí, lagrimas caían de mi rostro, pero puedo asegurar que  justo en este momento soy feliz, más que antes, más que las veces que llegué a pensar que tendría a Jungkook junto a mí, esta sensación es más sincera que la que he tenido con Jungkook.

-Chicos no se olviden de la reunión- dijo Jungkook abriendo la puerta, una sonrisa pícara se formó en sus labios –pueden llegar más tarde si gustan- cerró lentamente la puerta pero pude escuchar su risa alejarse del lugar -¡Jeon Jungkook!- gritó Taehyung para salir de la sala detrás de él, yo estaba totalmente ruborizada por lo que había acabado de suceder.

Pov. T/N…

-Estaba regresando a la habitación después de un pequeño viaje al baño y posteriormente a la cocina, ya me conocen, pude escuchar la dulce risa de mis bebés, Jungkook estaba cantando para ellos esa misma melodía que nuestros corazones ya conocían perfectamente… estaba parada en el marco de la puerta, mis brazos estaban cruzados, una leve sonrisa en mi rostro. Realmente puedo sentir como si este ciclo se estuviera cerrando y sólo nos estuviera esperando mucha felicidad.

-T/N, mira- me dijo Kookie con una bella sonrisa, parecía un pequeño conejito al lado de nuestros niños, me acerqué y pude ver a ambos sonriendo y tomándose de la mano –Son tan parecidos a ti- dije dándole un beso a cada uno de los pequeños -¿para mí no hay uno?- preguntó Kookie con una sonrisa algo picarona, yo moví mi cabeza de un lado a otro mientras reía –sólo uno- suplicaba mi esposo, ¿quién puede negarse cuando pone esa carita de conejito? ¿Aún más cuando hace esos tiernos pucheritos? –Ven aquí- dije para tomarlo del cuello de su camisa, nuestros labios estaban tan cerca, pero desvié el beso y deposité uno en su mejilla –si eres tramposa- dijo aparentando un poco de resentimiento –no lo soy, no te dije en dónde- lancé un cojín a su dirección, él logró esquivarlo, tomó mi mano y jalando en su dirección me hizo chocar con su pecho –Ven aquí, señora Jeon- una sonrisa hizo su aparición antes de que atacara mis labios. Nuestro momento se vio interrumpido cuando mi celular comenzó a sonar, era Rosé: