Obsesión

“No lo hagas”

Capítulo 3

-Plática entre Mason y Logan-

––Si no podemos tocarla ni hablarle... ¿al menos podemos verla?–– preguntó Logan, esperanzado. En serio quería ver a aquella chica, no porque le importaba o algo por estilo, sino por su cuerpo; en el tiempo que estuvo observándola mientras investigaba sobre ella, tuvo la oportunidad de verla desnuda, y vaya que Scarlett era hermosa.

––Esta bien–– accedió al fin Mason irritado. Sabía a que se refería con “verla”. Él era el único que había tenido la oportunidad de tenerla ante su poder. Logan sonrió victorioso, sabiendo lo que obtendría ––. Me las arreglare para que puedan verla.

Después de decir eso, Mason salió de la habitación dejando al otro completamente solo.

–Mason–

Me dirigí a la habitación de Scarlett, tenía que prepararla para que mis hombres pudiesen verla. Al llegar al cuarto pude verla acostada en la cama, despierta, mirando hacia el techo. La desate y ella me miro con los ojos brillantes.

––Párate–– ordene al dejarla libre de las cuerdas. Ella obedeció y sonó sus brazos, lo cuales se encontraban levemente lastimados a causa de las cuerdas. Me acerque al closet y de esté saque una toalla y ropa limpia. Se los entregue ––. Ten, duchate y ponte eso; te doy media hora.

Me miró y sin protestar se metió al baño.

Espere los treinta minutos acordados y ella aún no salía, me fastidie y sin tocar o pedir permiso entre al baño. Scarlett estaba secándose su cuerpo completamente desnudo, y yo no pude evitar mirarla. Ella intentó taparse con la toalla, pero yo me acerque y se la arrebate de las manos.

––No escondas tu bello cuerpo, Sky–– susurré tocando su brazo, ella no hizo nada para impedirlo, pero pude notar como se tensó. Empecé a besar su cuello, mordiéndolo levemente ––. Oh, Dios. Cuanto extrañaba esto, Scarlett.

Ella sollozo, sabía que no quería que la volviera a tocar, pero me importaba una mierda, ella era perfecta y era mía, así que podía hacer con ella lo que se me diera la gana.

La cargue en mi brazos y la lleve hasta la cama oyendo como lloraba en mi hombro, la acosté en la cama admirando su precioso cuerpo desnudo. Me despoje de mi camiseta y me acerque a ella, volví a besar su cuello; intentó empujarme varias veces, pero yo era más fuerte, así que ella no logró nada.

––No lo hagas–– sollozó–– No otra vez.

La mire fijamente a los ojos, en ellos sólo se reflejaba miedo, lo tenía y yo lo sabía, pero no podía soltarla ya que la tenía en mis manos. Yo ya no era dueño de mis actos.

––Scarlett, no te resistas. Sabes que será más difícil si lo haces–– le pedí ignorando sus suplicas.

Ella sólo asintió acabada.

No le iba a hacer nada, no iba a violarla de nuevo, no aún, sólo quería tocarla y recordar cada parte de su cuerpo.

Empecé a besar su abdomen y a tocar sus senos, después, hice un camino de besos hasta llegar a su punto débil, la mire y ella tenía los ojos llorosos, sólo volteó la cara sin querer mirar lo que estaba a punto de hacer. Toque con mi mano su intimidad, y la acaricie suavemente, recordando cada instante que había pasado a su lado. Me acerque a su cara y la bese dulcemente, sin que ella me devolviera el beso. No importaba, volver a tocar su boca era suficiente.

Deje sus labios, me levante de la cama, y me coloque mi camisa.

––Vístete, te quiero lista para las ocho–– ordene y me marche de la habitación.



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En el texto hay: obsesion, secuestro

Editado: 13.12.2019

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