Siete

Y si, pasó dos veces, ¡¡en un día!!,esto era record en mis días de torpeza, ¿por que tenia que ser tan torpe?, ¿que los astros no se alinean para mi bien?, no quería levantar la mirada, de seguro estaba muy enfadado, mucho, eso me hizo recordar al incidente de esta mañana, pobre chico aun me sentía culpable, por lo sucedido.
Por suerte ahora no tenía nada en manos solo el móvil que cayó.

—Fíjate por donde caminas. —levante la mirada, y no, no estaba enfadado—los moviles a la hora de caminar no son recomendables—mencionó en un tono de burla.

—lo siento, no era mi intención —me disculpe al ver su móvil también en el pavimento.

—no, no es tu culpa, disculpame a mi, por que estaba distraído con ese pinche móvil—eleve las comisuras de mis labios para mostrar una sonrisa.

Este chico con toda la postura intimidante, con la mirada tan tranquila y serena en esos ojos color miel, de piel no muy clara, y algunos cabellos rizado con rayos castaños que le caían en su rostro, lo hacían ver sumamente bien, "¿ en que estoy pensando?, ¿que es lindo?, no no es solo un chico mas que de seguro no volveré a ver, si, si eso es.

—Mi nombre es John, paso clases de Box aquí—¡o no! eso dice que lo veré algunas veces aquí—¿ cual es tu nombre? — pregunto poniendo de lado su rostro.

—Sa...Sa... Sara—hay no otra vez los tartamudeos, producto del nerviosismo

—mucho gusta Sa Sa Sara —extendió la mano, soltando una carcajada .

—Mucho gusto John—le correspondí el saludo.

Me puse en cuclillas para poder levantar mi móvil, y por lo visto él también hizo lo mismo, un papelito que siempre guardaba en el interior del móvil se alejó de donde estaban el resto de partes esparcidas, me recorrí en su dirección y John hizo lo mismo, nuestras manos se encontraron, en aquel sitio del papelito, duró unos segundos así, con su mano tocando la mía, aleje rápidamente mi mano de de allí, así apartando el momento incomodo. Dejándolo alzar por mi ese fragmento de papel importante para mi.

—"Siempre sonríe, a pesar de todo" —lo leyó en voz alta.

—Es mi recordatorio, muy importante—me excusé.

—magnifico recordatorio —mencionó dándome la laminillas en sus manos.

—Gracias —encendí mi móvil cuando vi que ya era hora

Me iba a despedir, cuando nuevamente mi celular cayó en el pavimento, esta vez no fui yo, alguien empujó intencionalmente .

—¿¿¡ que no pueden hablar en otra parte !?? ¡¡o se creen dueños de la entrada !!—levante rápidamente el móvil, esa voz me era familiar, levanté la vista y era Beck, por como iba vestido, creo que entrenará Box, en el interior de este lugar deportivo. John y yo nos adentramos en él, para dirigirnos a nuestros destinos, el en la sala que queda más al fondo.

—Bien adiós—me despedí, entrando a la habitación que se a adecuado para darse las clases de ballet.

—Adiós—oí que respondió

Me dirigí rápidamente hacia los vestidores. Después de muchas sesiones de calentamiento y para concluir los pasos que decia  el maestro. Nos dio una pausa para descansar, saque mi tomatodo y dispuse del líquido que mi  cuerpo necesitaba, era lo que mi mente quería relajarse un poco, por esos momentos ya no pensaba en como disculparme después de los  hechos de esta mañana, hicimos unos cuantos métodos mas y salimos del ballet, fui a los vestidores para quitarme el leotardo y ponerme el jogging una blusa y las zapatillas con las que iba puesta , me despedí del profesor muy amablemente y salí muy apresurada pues tenia que recoger a mi enano. 
—Hola ¿donde vas tan rápido?—oí una voz detrás de mi. Me dí media vuelta para saber de quien se trataba.
—¡ah! Hola John—miraba muy sonriente —voy a recoger a mi hermanito.  
—¡wou! super te acompaño—propuso
—no hace falta—agregué mientras caminaba.
—seria un gusto—mencionó siguiendo mis pasos
—pero no te conozco — realmente no lo conocía, quizá era un secuestrador de menores, o no se, bueno hace un momento lo conocí pero solo sé su nombre, tenia derecho a desconfiar.
—Ni que te vaya a secuestrar—agregó en tono de burla. 
—Ya no te burles, no soy tan confiada si
—y que dices ¿te puedo acompañar?
— ya esta bien, pero si te veo sospechoso, empiezo a gritar — solté una suave carcajada después de lo dicho.
—ya ya esta bien. 
Asi nos dirigimos hacia el club de taekwondo hablando de muchas cosas sin importancia, no parecia  mala persona.
Llegamos a la estación del bus para tomarlo, y allí nos despedimos por que no vivíamos por el mismo lugar, llegue a mi casa, cuando llegaron mis padres propusimos a cenar lo que había cocinado, terminando esta limpie la cocina para luego ir a mi habitacion. Estaba muy cansada, solo quería dormir en mi no muy blanda cama, y soñar que mi torpeza no existe, había sido un día muy largo...