Henry se encontraba saliendo de la academia, su hijo lo sigue detrás de él.
— ¿Dónde vas todas las noches papá? Te eh visto salir con ese traje y capa negra desgastados. — Dice Ethan preguntando a su padre.
— Desde que sucedió el ataque a nuestro hogar, eh estado buscando al responsable de esto desde ese entonces, cada vez estoy más cerca. —
— Y... ¿Estás seguro de que no te están persiguiendo por estar cazando humanos? Talvez alguien poderoso ya te tiene en la mira. — Dice Ethan preocupado por su padre, él sabe que él es uno de los elfos más poderosos pero aun así, algo lo tenía preocupado.
— Sabes que nadie me puede matar tan fácilmente hijo, tengo la habilidad más poderosa de los elfos, la cual combina magia de engaño y magia destructiva, así que no te preocupes por cosas que no van a pasar hijo.
Henry ya saliendo de la academia se despide de su hijo y va en busca del responsable.
Ethan. Uno de los mejores de los novatos recién egresados en la academia, los profesores lo adoraban ya que el era uno de los mejores estudiantes, inteligente, fuerte y sobre todo con un gran poder. Y sus compañeros igual, pero había una chica que al parecer lo odiaba, lo miraba mucho en clases pero nunca le dirigía la palabra, una chica de un pelo corto y un rubio pálido, sus ojos de color amarillos que relucían a simple vista, su nombre. Brii, una semi-humano que tiene orejas y cola de gato.
Ethan sentía la mirada de Brii desde su asiento en la clase, la clase se trataba sobre el arte espadachín
— El arte espadachín es en sí, es uno de los método para enfrentar cara a cara a un elfo de poder abismal. También es conocido el arte espadachín por su gran dominio al momento de utilizar un arma, en su mayoría espadas, algunos espadachines tienen la habilidad de crear armas con su mana, y controlarlos con su mente. — Dice el maestro lo cual deja asombrado a Ethan, esto no lo sabía, solo había escuchado que los espadachines tenían mucho poder. Pero no sabía de qué eran capaces...
Ethan se encontraba perdido en sus pensamientos cuando siente una fuerte mirada encima de él. Era Brii, ella seguía mirando a Ethan con intensidad como si lo estuviera analizando, Ethan sin saber que hacer solo le hace un saludo con la mano. Al momento en el que Ethan saluda a Brii esta se gira molesta.
—No entiendo nada... Ni siquiera conozco a esta chica. —
Van pasando los días y Ethan ya se está acostumbrando a estar en la academia, pero este sigue preocupado por su padre ya que no ha llegado desde hace algunas semanas. Kisam, el gato de Ethan, lo acompaña a donde sea, siempre está a su lado y eso le ha causado algunos problemas ya que literalmente lo acompaña a donde sea, hasta a sus clases prácticas, donde está prohibido tener animales ahí, ya que puede ser peligroso.
Ethan se encontraba caminando por el jardín de la academia, no le quedaban tantas clases para terminar el día, su gata lo acompañaba.
—Estoy pensando en dejarte en la habitación el resto de las clases Kisam, Puede que alguno de los maestros me llame la atención por tenerte en clases...— Dice Ethan exhausto, ya que las clases ya lo tenían cansado.
La gata se comporta de forma extraña, un ruido se escucha a lo lejos, y el animal sale corriendo siguiendo el ruido. Ethan corre persiguiendo al gato.
Ethan — Eh- ¡¿Eh?! ¡Vuelve aquí!—
El gato se dirige hacia un jardín donde había un árbol gigantesco
— ¡Kisam! Donde esta- — Ethan antes de acercarse al árbol escucha una voz femenina proviniendo de este.
— ¿Y Tú? Pequeño gato, que haces por aquí eh— Dice la voz femenina
Ethan cuidadosamente asoma la cabeza por un lado del árbol, y ahí estaba la chica que odiaba a Ethan, Brii. Esta se encontraba jugando con el gato de Ethan, ya que, como ella es una semi-humano, mitad gato mitad humana. Pues se lleva bien con los gatos.
—H-Hola...— Dice Ethan, asustando a Brii.
— ¡Ah! Eh... ¿Qué? ¡¿Me estabas espiando quizás?!—
— ¡¿Qué clase de impresión tienes de mí?! N-No nada de eso, tranquila, solo que mi gata vino en esta dirección así que tuve que perseguirla...—
—Ah... Tu eres el chico que invoco este gato en clase ¿Verdad?—
—El mismo, mi nombre es Ethan. Un gusto. —Dice Ethan haciendo una reverencia.
—Ah... Eh. Soy Brii. — Dice Brii levantándose del suelo y haciendo una reverencia sutil.
—Eh... Si no te molesta, ¿te puedo preguntar algo?— Dice Ethan rascándose la cabeza nervioso.
— ¿Claro? ¿Que necesitas? —
— ¿P-Porque cada que estamos en clase, me ves con unos ojos intimidantes?—
— ¡¿Intimidantes?! Que grosero... — Dice Brii, como si no supiera que cada vez que mira a Ethan, sus ojos son intimidantes y siempre parece molesta.
— ¡¿Grosero yo?! ¡Si tú eres la que me mira con odio, y siempre que intento saludarte me ignoras!— Ofendido, Ethan está claramente ofendido...
— ¿E-Eso es lo que hago? Pero si tú eres el que me ignoras... — Dice Brii jugando con sus dedos y su cabello, nerviosa, claramente.
— ¡¿Eh!?—
Ethan se aclara la garganta, recupera la compostura y mira a Brii a los ojos.
—Qué tal si empezamos desde cero, ¿te parece?— Dice Ethan extendiendo su mano y le da una cálida sonrisa a Brii.
—Me parece bien. — Dice Brii devolviéndole la sonrisa a Ethan y acepta dándole un apretón de manos, sus orejas y cola se movían energéticamente, lo cual llama la atención de Ethan y este los mira fijamente.
—Sabias que ver directamente a las orejas y cola de una semi-humano es inmoral ¿no?—
—L-Lo siento, es que nunca eh visto a una semi-humano de cerca...—
Un rubor recorre la cara de Ethan, y Brii solo se ríe. Esta es el inicio de una linda amistad, ¿o algo más?
La noche cae y Ethan hace su recorrido nocturno como todas las noches, viendo las estrellas y con su gata acompañándolo.
—Me pregunto dónde estará mi padre...— Ethan claramente intrigado, no ha visto a su padre ya casi un mes completo. Esta claramente preocupado.