Marianne
No puedo creer lo que estuve a punto de hacer.
-Marianne, debes madurar y hacer madurar a Lea -dijo con aquella mirada acusadora.
-Yo lo sé, pero es que.. Su acento, su físico, por el amor de Dios, ni tú te podrías resistir.
-No, porque yo no tengo novio.
-Lizzy...
-No me vengas con "Lizzy" ahora -reprochó la chica-. Soy tu mejor amiga y mi deber como tal es decirte cuando la estás cagando, no tengo nada en contra de que tengas encuentros con extraños -la miré irónica-. Bien, me molesta porque no sabes en lo que te metes, pero, por lo menos termina tu relación con Russell.
-Lo he intentado pero, tengo miedo.
-¿Miedo? ¿A qué? Si ustedes funcionan mejor como amigos él lo entenderá y te tratará igual.
-Yo lo amo.
-Como amigo.
-Lo deseo.
-No, es sólo un capricho tuyo, abre los ojos, no estás enamorada, tienes una obsesión con acostarte con él, te lo digo antes de que arruines tan bella amistad.
-Pero no puedo.
-No es justo para ninguno de los dos, por favor, casi besas al nuevo.
-No es cierto.
Mentira. Era muy cierto.
-¿Por qué estás con Russell?
-Nunca lo entenderías.
No entendía como llegamos a este punto, él arrinconandome en un árbol del jardín, y yo mirando sus labios. Él sólo preguntó por qué falté y por qué los preocupe tanto, ahora estaba rosando mis labios al hablarme.
-Podría besarte ahora mismo.
-Hazlo -mencioné lamiéndome los labios.
"¡No!"
-Russell no me lo perdonaría, ya me odia.
-Russell no lo sabrá.
-Marianne, no debo.
-Ambos queremos.
"No, yo no quiero, no con alguien que conoce a Russell".
Estábamos a escasos milimetros para besarnos.
-Marianne...
Esa voz y ese tono de reproche los conocía perfectamente. Unos ojos amielados me miraban de forma desaprobatoria.
Nos alejamos en ese instante.
-Lo siento Marianne -dijo David antes de irse.
-Tú y yo debemos hablar.
La miré y asentí mientras me guiaba a un lugar más aislado.
-Marianne, te estoy hablando.
-Perdón.
Tras aquel sermón muchas cosas invadían mi mente, debía dejar de hacer esto.
-No soy yo quien te tiene que perdonar.
Sin decir más se marchó. Aun tenia dos clases, sí mi horario parecía eterno.
Miré mi celular para ver la hora, tenía un mensaje.
Tentación:Hola nena ;)
Vaya que cuando me lo proponía era original para los nombres.
Lea: Hola sexy ;)
Tentación: Qué haces justo ahora?
Lea: Estoy en clases. :(
Tentación: Suena aburrido :p
Lea: Como no tienes idea :'(
Tentación: No te gustaría estar justo ahora conmigo? ;)
Lea: Por supuesto que sí guapura ;)
Tentación: Me encantaría repetir lo de ayer, ven ahora mismo mi pequeña zorrita, tengo algo muy bueno para ti ;)
Lea: Uff no me tientes, me encantó pero esta clase es importante :$
En realidad no lo era, pero no podía permitirme faltar a clases por una calentura.
Tentación: Vamos mi zorrita, soy tu amo, y esto es una orden, ven ahora mismo conmigo, ayer me dejaste en claro en nuestra conversación que no tenías clases importantes hoy
Lea: Está bien bebé, llego en unos minutos
Tentación: Te espero ;)