Capítulo 01 - Despertando en calma

En la oscuridad, se encuentra una calma total, el joven se despertó y comenzó a secarse el sudor del cuerpo, buscando algo para beber y refrescarse. Luego miró hacia el cachorro, que le estaba lamiendo.
 

— Mini, ¿Pasó algo? — Dijo en voz baja al despertar nuevamente, mientras mini, miraba con confusión a su amo pendejo, qué se lanzó a rescatar a un payaso de pelo divertido.

"¿Dónde estoy? Además, ¿qué sucedió?". Se preguntó, mirando un cuarto, con paredes blanca, pero el mismo colchón de la basura con mal olor.

"¿No hay alguien riéndose de mí, llamándome... desganado? ". Con ese pensamiento, recuperé la conciencia.

Mi nombre es Daniel Paolo. Edad de trece años, y un buen chico sin nada de recuerdos.

Mientras impedía, que apuñalaran al Doctor Mario entre los escombros, fui apuñalado en su lugar, esquivando el arma pero lanzado hacia los escombros.

"Excelente, ya recuerdo". Estoy bien. No debo tener miedo.

— Voy a poder pedir mucha comida por un día, ¡Mentira comida por una semana! Haha — riéndose, por toda la comida que va a recibir, "soy un héroe" Pensó.

"¿En serio, es posible que un hombre tan genial como yo, sea un súper héroe? " . ¡Ah! Eso es tan improbable, como que un niño despierte solo en una montaña de basura sin fin.

Cuando traté de mirar a mi alrededor, finalmente me di cuenta. No puedo oír nada y estoy en un cuarto con buen aroma.

Ignorando el sentimiento de frescura, cuando intenté tocar mi cabeza... me di cuenta de un corte por el pecho, "parece bastante profundo". Y aún más sorprendente, es el hecho de que no tengo nada de apetito.

Muy bien, es hora de entrar en pánico.

Despertando, había una tierra sin Ley.

...

Las nubes oscuras se acumulaban sin descanso en el cielo. Una gota de lluvia ácida, finalmente cayó desde arriba. Fue arrastrado por los fuertes vientos que vienen del noroeste como si buscaran venganza y finalmente, pasó por todo el valle de Residuos.

Mario Andrade estaba analizando datos, con una pulsera insertada en su piel en el lado derecho del brazo, frunció el ceño recordando el día anterior, sin creer los acontecimientos que ocurrieron, pero con las pruebas presentadas es imposible ignorarlo.

— Oye, oye, dame un respiro — Dijo cansado el doctor, caminando y revisando la pulsera, confirmando los acontecimientos.

"1, 2, 3, ¡¡aahh!!"

"¡Error!, eso no está bien. Uno no es un número primo, ¿cierto?"

"No, no, quien se preocuparía por eso ahora"

"No hay tiempo para estas tonterías. ¿no estoy en problemas?".  Pensó el Doctor sin entender nada.

— Yo también quiero descansar y salir de la zona de residuos — Hizo un puchero Roria, recordando al niño que dejó atrás, con solo comida por una semana y una carta de disculpas.

"Quizás... quiero decir, ¿no es ya demasiado tarde para recogerlo?"

Alguien mencionó, que se debe tener cuidado en la zona residuos y jamás recoger un habitante. Pero Mario, claramente encontró un hueco a esa ley, aun así lo dejó atrás, con una herida apenas tratada.

— No pienses mucho Roria, también me preocupa el niño, me salvó la vida. Pero recuerda el motivo que vinimos por aquí —rascándose la cabeza, mientras mira fijamente — Fue porque nuestro IA detectó una anomalía de un prodigio sin descubrir —añadió, acerca de su principal razón del viaje.

— ¿Dices que el muchacho era ese prodigio? — preguntó con felicidad —. Puede estar bien en esas tierras peligrosas.

— Si, aunque me parece imposible, la pulsera no lo detectó a menos de un metro de distancia y tampoco, cuando se vinculó directamente con el sistema para curar sus heridas. —afirmó después de revisar nuevamente los datos.

"Todavía hay una opción de conocer ese mundo, pero es imposible, aunque tenga 200 IQ, entrar directamente sin un puente es imposible, moriría inmediatamente"  Pensaba acerca de varias teorías.

Sin saber que por un segundo en realidad, perdió el aliento. Daniel modificó su cuerpo a Desganado otorgándole la capacidad de vivir con solo energía.

Recordando qué IQ es una medida (El cociente intelectual ​​, un estimador de la inteligencia general).

— Olvídalo. Es hora de regresar para reportar a la academia — moviendo la cabeza hacia el frente, mirando una zona de muchas grietas —. Y al gobierno sobre la zona residuos, tenemos dos días viajando desde que conocimos al niño —adelantando sus pasos sobre los escombros a gran velocidad.

— De acuerdo, con suerte si tienes razón, veremos al niño en cuatro años, al nuevo concurso de selección para la universidad — Con una sonrisa Roria tiene confianza en ese adorable niño; "parece bastante prometedor".

— Tienes razón, le dejé una carta explicando sobre nosotros —sonriendo, sin perder el ritmo —. También una tarjeta micro SD con conocimientos básicos para aprender a leer, un mapa detallado de la tierra que vivimos y la biblioteca más grande de nuestro continente Kuro — orgulloso de ayudar a un habitante de la zona residuos, sin romper las reglas.

— Nada de eso serviría, si no arreglaba el hogar del niño — desviando los ojos hacia un lado y exhalando  —. Su pequeño fuerte lo reconstruí mejor, cuando nombró su último deseo - recordando Roria, las últimas palabras del niño dirigidas al cachorro.

Una sola frase, de ir a cuidar una simple laptop de vieja generación, en un hogar todo destruido.

Cuando, el cachorro los llevo a su fuerte, mientras el Doctor atendía al niño, para curar sus heridas.

Roria reconstruyo su casa para que puedan vivir.

Ignorando completamente que Daniel, le tiene un profundo miedo a Roria, todo el tiempo que estuvo dormido tenía pesadillas.

— Aparte de asustar niños hambrientos, un perro. Asustas a un niño prodigio, con solo la mirada — vuelve hablar el doctor sin pensar.

Apenas iba a retractarse, ya se encontraba volando por encima de dos montañas de basura llegando a la ciudad Paraíso.