Ella era la chica que nunca ponía su cuerpo en exhibición. Su cabello siempre estaba recogido en un moño suelto. Sus labios estaban sellados.
Él era el chico que reía ruidosamente al frente de toda la clase. Su pelo caía perfectamente en su cara esculpida. Su humor era grosero y sarcástico.
Pero no cariño, esta no es una historia de amor.
Esperabas que fueran polos opuestos, pero sus cortes frescos en sus muñecas me prohiben asumirlo.