Evander McNeil
Releo la carta por quinta vez.
-Por mucho que la leas no vas a cambiar su contenido - dice mi mano derecha y mejor amigo Damián .
-Me niego a casarme con una McQueen - grito golpeando con furia la mesa del comedor haciendo que mi pobre sobrina sentada a mi izquierda se sobresalte , mientras que Damián permanece impasible a mi derecha.
-Es una orden del rey nuestros clanes llevan demasiado tiempo en guerra , mirarlo como una forma de firmar por fin la paz entre los clanes - intenta razonar mi amigo, pero estoy demasiado enfadado como para entender su razonamiento.
-Paz dices , la paz la firmaré con mi espada manchada de la sangre de todos los miembros de ese maldito clan.
-Tío ,¿porque seguimos con esta guerra?, la empezaron nuestros ancestros y no sabemos el porqué, ¿no hemos perdido ya suficientes vidas? - Lorna se pasa un mechón de su negra cabellera tras la oreja nerviosamente, es algo que suele hacer cuando sabe que va ha decir algo que va a molestar a otra persona.
-Se mejor que tú las vidas que se han perdido y por esas vidas la guerra debe continuar - le agarro la barbilla para que me mire directamente a los ojos - Lorna, los McQueen son traicioneras, son serpientes, cuando mi padre, tu abuelo, quiso firmar la paz le tendieron una emboscada y le mataron yo no cometeré el mismo error , no meteré en mi casa y mucho menos en mi cama a una serpiente, antes prefiero contarme el miembro a yacer con la hija del Laird McQueen - estas últimas palabras hacen que mi sobrina se sonroje y baje su azul mirada a la mesa, me tengo que recordar cuidar mis palabras delante de ella, después de todo es una joven que no suele escuchar ese tipo de comentarios.
-Sino cumples la orden el rey no solo pedirá tu cabeza , sino la de todo el clan, en la misma carta esta escrito.
-Se leer Damián , pero algo me dice que esto no ha salido de nuestro rey - el arruga las cejas sin entender - esto seguro que esta idea a salido de la rata de su consejero, el bastardo de Bairon, me la tiene jurada desde hace años, es una rata celosa que quiere mi territorio, sabe tan bien como nosotros que jamás compartiré el resto de mis días con una McQueen y aprovechará eso para pedirle al rey nuestras cabezas y quedarse con mi tierra.
-Más razón para que te cases tío , no le des la satisfacción a ese hombre de que salga bien su plan, casarte con ella y protege a tu clan , antes de la venganza esta tu responsabilidad como Laird de estas tierras.
Estoy apunto de responderla cuando Damián me quita la carta y la vuelve a leer, mi sobrina y yo esperamos expectantes a que hable.
-Puede que haya una forma de eludir la orden , pero cumplir su orden-una sonrisa se dibuja en mis labios, pues, enseguida comprendo a que se refiere , se refiere a la tradición ancestral que une a dos personas durante un año y un día.
-Un Handfasting - dice Lorna exteriorizando nuestros pensamientos, Damián y yo asentimos.