¿Vendrás?

Vendrás  
Vendrás? Me pregunto, 
Nunca he sido bueno para adivinar,  
Prefiero que todo tome su rumbo y se resuelva por su cuenta. 
Jamás me había costado tanto hacer algo nuevo, 
Lanzarme a ti o al vacío, me da igual cualquiera,  
De todas maneras moriré de frío. 
Perdí la habilidad de escribirte bonito, al oído. 
Ahora mis letras me raspan las manos, me rasgan las hojas, 
Tomaré prestado uno de tus besos, no prometo devolverlo,  
No prometo serle sincero o llevarlo al cielo. 
Necesito más que saber,  
Tener la certeza de que en algún lunes de mi vida, 
Estarás con tus miradas de despedida colocadas en la despensa,  
Con tus maletas de quedarte enfrente de la puerta,  
No llames a ella, para ti siempre estará entreabierta. 
Y ahora en esta espiral de decepciones me pregunto, vendrás? 
Nunca he sido bueno para adivinar, para leerte entre líneas,  
Para sentirte despierta, solo tú respiración me decía que aún no dejas nuestro mundo,  
Me mirabas y me decías, espérame, llegaré pronto, espera.