El viento hacía crujir las ramas
En la pirámide sonaba un eco
Junto a la entrada resonaban pisadas
Una piedra cayó produciendo un ruido seco
Un faraón de hace siglos
Su tumba fue hallada
Rodeado de jeroglíficos
Y una maldición encantada
Cinco arqueólogos que se adentraron
La tapa de aquella tumba se abrió
Una oscuridad liberaron
El faraon del sacógrafo salió
Sus ojos se volvieron brillantes
Con furia su mirada les dirigió
No dejaría marchar a esos maleantes
Como una estatua dejó quieto a los hombres
Se les acercó lentamente
El silencio es lo único que resonaba
Con su pensamiento en mente
Su aura mucho les aterraba
La maldición había empezado
En piedra se volvieron
Volvió a ocurrir como en el pasado
La maldición castigo a los que perturbaron