¿Como describirte?
Eras la jodida cosa más perfecta que había conocido alguna vez.
Me hacías arder y gritar al mismo tiempo, pero no era de dolor, era de placer, de deseo, de ansiedad, de espera, de amor.
Eras la ceniza de un fuego que nunca encendió, pero seguía quemando.
Eras mi luna en un cielo minado de estrellas.
Eras simplemente tú, y para mi, eso era más que suficiente.
Y a pesar de que no estás, de que te has ido, para nunca más volver, quiero que sepas...
Que toqué el cielo contigo, mientras estábamos pecando.
Y a eso le llamé: Amor.