Las carcajadas ensordecedoras se metían en mi cabeza como pequeñas dagas. Cerré los ojos tratando de contenerme.
—Vamos, dejen de burlarse de la chica que va a matar a 12—Alardeó 22 fomentando las burlas.
—¿Qué te hace creer que lo vas a matar?—Preguntó el hombre de largos cabellos negros que tenía un cigarrillo en sus dedos.
—Es mi misión, voy a cumplirla sin importar cuánto me tarde—Contesté con determinación.
—Por lo que veo estás segura de lograrlo. Es mi deber decirte que vas a morir, si 12 no te mata, te mataran tus compañeros.
—¿Qué?—Pregunté.
—Así es, aquí el asesino que fracasa en su primera misión es asesinado por sus compañeros. Buena suerte novata—Concluye llevándose a la multitud con él.
Entré en el pequeño dormitorio que me fue asignado, me preparé para salir al aeropuerto a primera hora.
La llanura se mece con el viento, el Sol está por ocultarse. La mujer pelirroja me mira con una sonrisa en su rostro abriendo sus brazos. Entonces unos hombres me sujetan, la mujer empieza a gritar desesperada.
Desperté de un sobresalto, voy rápidamente al lavabo, me tiro agua fria en el rostro durante unos minutos. De nuevo este sueño ¿será que esa mujer es alguien importante?... dejando esos pensamientos de lado voy por la maleta y salgo hacia el estacionamiento, entonces veo un auto listo para llevarme al aeropuerto.
Una vez dentro del avión reviso el móvil por unos minutos antes de despegar. Veo un mensaje corto de Dafne.
* Estaremos en contacto *
Luego de unas horas el avión aterrizó en Londres. Era momento de empezar con la segunda fase. Después de tomar la maleta me dirigí hacia la calle. Unos minutos más tarde encontré un auto disponible, le doy la dirección de dicha panadería donde quedó registrado el rostro del objetivo.
El conductor del vehículo me dejó donde pedí, observé a detalle el lugar por un rato. Al cruzar la calle había una plaza donde las familias se reunían, también alrededor había todo tipo de tiendas. Vi también un hotel que estaba ubicado enfrente de la panadería, me dirigí hacia allí.
Pedí una habitación con vista hacia la plaza, dejé la maleta sobre la cama y tomé la computadora para escanear la foto de 12 otra vez. Unos minutos más tarde me muestra la misma grabación que habia visto antes. Cerré la computadora un tanto molesta. Unas horas más tarde Dafne me hizo llegar una pequeña maleta con una czp10c, una verdadera belleza.
Al día siguiente el mismo sueño me despertó, sólo que esta vez era más alegre. Me di un baño, me vestí. Salí del hotel yendo hacia las bancas de la plaza, me enfoque en vigilar a cada varón con la misma complexión que 12. El día transcurrió en vano, no vi señales del sujeto. Al día siguiente fue más u menos lo mismo, con la diferencia de que caminé por todas las calles alrededor de la plaza. Por algún motivo creo que 12 vive cerca de la plaza.
Otro amanecer más en Londres, esta vez haría las cosas diferentes. Desayuné en la habitación para después ir directo a la panadería, llegué en cinco minutos. Me decidí a pasar, recorrí todos los pasillos con la mirada para después acercarme al dueño del establecimiento.
—Buenos días, dígame ¿Conoce a éste hombre?—Pregunté mostrándole la fotografía.
—Buen día señorita, Sí claro, ¿lo estás buscándolo por la habitación que alquila?—Me pregunta con amabilidad.
—Exacto señor—Contesté tratando de sonar amable.
—Muy bien jovencita, está es la dirección—Informó mientras me da un papel con la dirección.
—Le agradezco—Manifesté antes de salir del lugar.
Mi boca se ensancha tratando de mal formar una sonrisa. Vuelvo al hotel para descansar un rato, me tiré sobre la cama imaginando que podría pasar al encontrarlo. Unas horas más tarde vuelvo a las calles siguiendo la dirección que estaba anotada en el papel. El ocaso llegó mientras caminaba. Los gritos alarmantes de una mujer resonaron en las calles, no sé con exactitud de dónde provenían, pero corrí con premura hasta encontrar la persona que los emitía.
Los gritos me guiaron hasta un callejón con poca iluminación, al fondo estaba una mujer tirada en el suelo llorando, dos metros a la derecha se hallaba el tipo ebrio que la golpeaba, el cobarde tiraba de su cabellera con violencia. Me acerqué con sigilo a la escena, empecé a sentir ese cosquilleo antes de quitar una vida, pero la repentina intromisión de un hombre con bastón me hizo cambiar mis planes. El rostro del entrometido permaneció oculto por la oscuridad.
—¡Hey!... ¿qué no te enseñaron que a las mujeres no se les toca?—Cuestionó el hombre señalándolo con el bastón.
—¡Tú no te metas en esto marica!—Contestó el tipo energúmeno.
—Como yo lo veo tienes dos opciones: la primera te disculpas con la señorita o te pateo el trasero—Contestó con voz tranquila.
—¡Te mataré... maldito marica!—Le gritó irritado andando hacia él con una navaja en la mano.
El hombre del bastón se quedó impávido en el mismo lugar. El ebrio no tenía buen equilibrio, pero avanzó hacia hombre decidido a matarlo.
Aquí con el final del capítulo, bueno espero no se hayan aburrido, bueno los espero en el capítulo siguiente.
Gracias....👋👋👋👋
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Editado: 15.01.2024