CAPITULO 35

Alex

  Después de esa pelea y que yo le dijera lo hermosa que estaba a Claire, los chicos salieron y nos fuimos.. lo raro de todo es que nadie pregunto nada, al parecer nadie se dio cuenta y eso me alegra ya que no soy de las personas que les gusta estar dando explicaciones a nadie mas que a mis tíos o a mi equipo, nada mas, pero fuera de eso no me gusta que me reclamen, creo que debería advertirle eso a Claire.

    Estábamos divirtiéndonos en el club de la otra hermana de mi novia, todos nos estábamos divirtiendo, yo me divertía hasta que una maldita rubia teñida se me acerca y arruina mi momento tranquilo, mala mía el haberme quedado en la maldita barra, no quiero tener que hablar con nadie mas que con mi novia, no quiero zorras que solo buscan hombres que les paguen el maldito trago.

   -¿Por que tan solito?- detesto cuando esto pasa y mas cuando sacan mas sus pechos falsos- Yo te puedo hacer compañía, guapo.

    -No necesito tu compañía, yo ya tengo a alguien conmigo- le dije frio, pero la tipa esa no se iba.

    -Vaya, esa persona debe ser especial... pero no la veo aqui, asi que... ¿por que no me invitas una copa?- me estoy hartando.

    -Porque no se me da la gana, mi novia es celosa y la verdad es que tu no eres mi tipo de mujer, asi que aléjate de mi- prefiero que todos me odien por directo.

    -No seas malito, es solo una copa, eso no...

    -¿Que maldita parte de no me interesas no has entendido?- esta vez no pude aguantar ser un poco mas rudo, pero es que me estaba irritando.

    -¿Algún problema?- pregunto la hermana de Claire con uno de los guardias del club a sus espaldas.

    -Este sujeto me estaba acosando, quería invitarme una copa, pero yo me negué- que maldita mentirosa, encima de todo dice que yo fui quien se lo ofreció.

    -Si quiere yo lo saco de aqui, usted solo diga, jefa- dijo el imbécil... como si yo fuera a dejarlo tocarme.

    -¿Que pasa?- y la cereza del pastel, Claire viene también, no quiero que este a mi lado con mi enojo.

    -La señorita dice que el señor le invito una copa y la estaba acosando- ese maldito guardia no sabe tener la boca cerrada.

    Claire lo miro incrédula y para luego mirarme a mi, pero yo solo quería matar al maldito guardia que estaba frente a mi, ese maldito ya esta en mi lista negra, y créanme, no es bueno estar ahi porque una vez que entras es muy difícil que salgas, siempre los tengo en la mira y casi todos los que estaban en mi lista están muertos o en la cárcel... o quedaron traumatizados.

    Mire a Claire ya que su mirada me estaba quemando y se que si le digo lo que paso ella me creerá mas a mi que a ese maldito guardia y mas que a la rubia maldita, quien también entro en mi lista negra, yo no la quería cerca de mi y no quiero que esa maldita vaya a decir alguna otra mentira porque la mato, sin importarme que yo la puedo matar por solo abrir su maldita boca.

    -Te juro que lo que este tipo y esta zorra dicen es mentira- le dije serio, ella sabe cuando hablo con la verdad, yo no tengo ojos mas que para ella, también sabe cuando digo una mentira- esta mujer se acerco a mi con la maldita excusa de que yo estaba solo y me pidió que le invitara un trago, pero le pedí que se retirara y como no se iba... le dije que no estaba interesado en ella.

    -Dice la verdad- dijo ella haciendo que el guardia la mirara sorprendido, su hermana sabia que ella decía la verdad ya que ella también se entrena con nosotros en ocasiones- esta mujer es la que miente, hermana, por favor, créeme a mi antes de a otra persona.

    -Tu nunca has mentido, Claire, por supuesto que te creo- le agradezco a todos los dioses que son hermanas y Claire esta aqui- Ademas de que es el mejor amigo de nuestra hermana Rosa.

     -Pero este hombre...

     -Saca a esta mujer de aqui, no la quiero en mi club nunca mas- dijo fría, ¿acaso estas mujeres fueron hijas de Rosalie en otra vida?

      Después de ese incidente todo volvió a la normalidad, a acepción de que Claire no se alejaba de mi para que ninguna chica se me acercara, después de eso todo estaba bien, nos pasamos toda la noche bailando y tomando, al final lleve a Claire medio ebria a casa y la dije que tendríamos nuestra cena en otro momento, cosa que ella acepto gustosa.

     Entrenaba como todos los días a la misma hora en el gimnasio de la agencia de Rosalie, todos se habían ido y solo quedaba yo, le prometí que apagaría las luces y supervisaría que los internos estuvieran descansando ya que tienen que levantarse temprano para que ella los entrene, este entrenamiento sera mas pesado que cualquier otro y todo porque es ella quien los entrenara, una mujer embarazada con carácter del diablo... no me imagino lo que sufrió su esposo en su primer embarazo.

    -Sabia que estarías aqui- esta chica no se cansa de mi.

    -Y yo sabia que era irresistible, pero no para tanto- le sonreí divertido.

    -Alex, sabes que soy una mujer muy insistente y mas con mi hombre... ¿Cuándo quieres que tengamos esa cena?- pregunto ansiosa, no se por que quiere saber ahora cuando pudo haberme preguntado la otra noche.