Por Siempre

Capítulo 30|"No soy pedófilo"

Abby 

Tratar con Chris fue como enfrentarme a un león hambriento y salvaje. Matt tampoco se quedaba atrás, era notorio lo enojado que estaba con mi hermano, y bueno yo... ¡Yo estaba como loca! Pero claro, sólo de manera interna, ya que en ese momento no me permití dejar llevar por mis emociones. Mi tarea entonces era controlar a las dos bestias. No había tiempo para pensar en otras cosas, luego debería tratar esos temas. Hablar con Matthew sobre todo.

Obligué a que ambos tomaran asiento en el pequeño comedor. Matt a mi derecha y Chris a mi izquierda, yo era el centro de ese torbellino de furia.

—Aquí todos somos amigos, ¿verdad?—, partí diciendo. El clima era de sobremanera incómodo. Todo muy tenso.—Y los amigos se escuchan y resuelven de buen modo sus problemas. Así que, vamos a hablar, ¿Ok? Cada uno tendrá su tiempo. Chris comienza.

Sabiendo lo crío que era Christian supe que lo mejor era dejarle hablar a él primero. Lo más probable era que dijera cosas de las que luego se arrepentiría, pero por suerte Matt era de los que sabían escuchar y perdonar. Así trataban su amistad desde siempre: Chris siendo el irracional y Matthew sentando cabeza.

—Perfecto—, Christian llevaba una mirada gélida, tenía también las manos hechas puño apoyadas sobre la mesa, consiguiendo lucir como todo un malote. Uno muy ridículo, por cierto—. La verdad es que no puedo enojarme porque te guste mi hermana—¡Cielos! En realidad yo no podía con eso. ¿En verdad yo le gusta a Matti? ¿En verdad?—, de hecho no es una mala idea. Tú eres mi mejor amigo, te conozco y sé que no intentarías algo con ella con el fin de lastimarla. Lo que me molestó fue la manera en que lo trataste, las fotos que guardabas de ella. Eso es algo muy raro y que debes explicar. También... ¿Dormir con ella? ¿Para eso la trajiste acá? Ahora dudo de cuales sean tus intenciones. Todo este tema me confunde muchísimo, y me enojé también porque hasta la semana pasada sabía que estabas en algo con una tipa y ahora... ahora resulta que casi sacas bebé con mi hermanita. Si ella te gusta, está con ella, pero no andes con otras cosas además.

—Puedo explicar todo eso—, soltó Matt. Ya no parecía estar enojado, lucía de un modo muy distinto, parecía vulnerable en exceso.

—Pero antes quiero aclarar una cosa—interrumpí. Los dos fijaron sus ojos en mí, tenía su atención—. Matt y yo no hemos dormido juntos. Sí pensé que estaba embarazada, pero no tiene nada que ver con él... Además, yo tampoco sabía que él gustaba de mí.

—Entonces yo la cagué—, murmuró Chris mientras unas risas para nada alegres escapaban de sus labios.

—Al menos algo correcto que digas—, dijo Matt. Estaba mirando atento a Christian hasta que pasó su mirada hacia mí. Parecía la mirada de un cachorrito triste, de uno que había hecho algo mal y que ahora esperaba recibir su lección. Por suerte, a los segundos regresó la mirada a mi hermano. La verdad era que me dolía verle vulnerable—.Sí me gusta Abby, es verdad, pero no es del modo en que crees. No soy un pedófilo, me di cuenta hasta hace poco de lo que sentía, y hasta el momento no tenía pensado decirlo—, era obvio que todo eso se lo estaba diciendo a Christian. Comencé a reflexionar sus palabras. Yo nunca me di cuenta de sus sentimientos porque estaba acostumbrada a que él tuviera siempre una actitud cariñosa conmigo. Si alguna vez insinuó algo, jamás lo noté—.Si intenté estar con alguien más fue para desviar mi atención de ella, pero lo dejé, porque sabía que era ridículo. Las fotos las obtuve por accidente hace unos dos años, Abby tenía 15. Fue cuando hiciste tu mudanza, había una caja con cosas que no eran tuyas y que te deba pereza revisar. Me pediste que las botara y que si había algo ahí que me gustara me lo quedara. Me quedé con las fotos, mi plan era dárselas a ella, pero en un impulso me las quedé.

—"No soy pedófilo" Tenía 15, ¿me estás jodiendo?—Di una mirada asesina a Chris por ser un completo desubicado. Vale, sí, a mí también me impactaba todo lo que oía decir a Matt, pero lo justo era escuchar toda la historia primero. Después habría tiempo de juzgar.

—En ese entonces no me gustaba. Tenía una novia incluso, de una relación de cinco años... El por qué me quedé con las fotos fue un interrogante para mí por mucho tiempo, hasta hace poco, en que Abby las descubrió—, recordaba aquella vez. Matt había cambiado la bolsa que contenía las fotos, por otra con restos de tierra, al menos esa conclusión había sacado yo—. Cuando las descubrió... me hice el tonto. Ella iba a pensar muy mal de mí si le decía la verdad. Yo honestamente había olvidado que tenía esas fotos y de descuidado ella las encontró. Iba a dejar que se las llevara, pero por error te llevaste otra bolsa. No quise advertirte. Había sido un momento muy incómodo para mí y me pareció que lo mejor era olvidarlo... Al tiempo me pasó una cosa parecida, pero con Christian. Descubriste las fotos y explotaste.



#81 en Joven Adulto
#411 en Fantasía
#277 en Personajes sobrenaturales

En el texto hay: vampiros

Editado: 12.04.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.