𝓐𝓲𝓫𝔂 𝓐𝓱𝓶𝓮𝓭
Siempre quise, soñe y idealizaba con la idea de algún momento volverme a encontrar con la persona que hizo mi infancia amenamente, con quien disfrute los mejores años de mi vida entera, con las personas con quien me sentí agusto sin ningún tipo de esfuerzo, solo que jamás pensé encontrarmelo en el momento menos esperado y en las condiciones erróneas. Con solo su presencia mi corazón se desbocada, no necesite de nombre , lo reconocí inmediatamente, y mi corazón también. Era sencillamente muy poco probable que después de tantos años sin verlo el destino decidiera reencontrarnos, quería recuperar a mi mejor amigo, y moría por decirle lince soy yo tu Grettel, pero sencillamente no fue su caso, el parecía haberme olvidado por completo, no es el mismo de niño, casí ni sonríe, puedo decir que desde que lo he visto estos meses no lo he visto sonreír, ya no es ese niño travieso y risueño, al contrario se había convertido en un hombre frío, poco demostrativo, y serio, un hombre totalmente diferente al que yo recuerdo en mi memoria.
Ese día casi abrí hueco frente a la puerta de su habitación pero no pude volver a verlo, luego me lo encontré en las sesiones de terapia de Agatha, y fue otra sorpresa. Mi corazón se aceleró de la misma manera que cuando lo vi por primera vez en el hospital, y de la misma manera que los hacia cuando niña, ha crecido, madurado, su cuerpo ha cambiado, todo él ha cambiado, lo único que no cambio fue su pasión al atletismo, ahora es mucho más que cuando pequeño, su visitas con Agatha me tomaron por sorpresa, se de su condición pero, leí en los expedientes de Psicología que es un intento de suicidio, me asuste muchísimo, saber que había intentado atentar contra su vida por su condición médica, y no era para menos después de haber sido fichado por una Universidad rusa y obtener una beca deportiva, sin embargo no lo justificó, tiene mucho por delante, mucho por lo que luchar a comparación de mí.
Se dice que coincidir con alguien o reencontrarte con alguien del pasado quien fue bastante importante para tí es obra del destinó, pero coincidir tres veces en situaciones diferentes, es una señal, es la persona que es Tu alma gemela, tu media naranja, o la otra punta de Tu Hilo Rojo, quizás era así? , sencillamente no lo se, solo quedaba dejar pasar el tiempo y ver que tenía destinado para nosotros, pero actualmente en mi vida yo no era su mejor opción, me debatía en el hecho de aferrarme esa promesa de niños, o alejarme por completo, yo no quería ser su otra mitad no quería ser la otra punta de su hilo rojo. Aunque muy adentro moría por recuperar a mi amigo, y seguir sintiendo esto dentro de mí . Esto que resurgió de las cenizas cuando lo vi por primera vez en ese hospital. Solo dejaré todo en manos del cielo, Me había trazado una meta, lade ayudarlo en lo más que pudiese para recuperar su confianza y que no desmarllara aunque su situación fuese tan de probable. Queria y sentía la necesidad de ayudarlo a salir de ese agujero negro, y estaba dispuesta a hacer lo que fuese por lograrlo.
Días después nos reencontramos en la tienda donde trabajaba. Y con cada acercamiento sentía como creía en mi interior ese sentimiento de que No se, pero se sentía sencillamente bien.
---------------------------------------------
Mi mente, mi corazón, y mi cuerpo me traicionaron al verme frente a la Casa De Aleek después de la Gran golpiza que recibí, tenía meses sin sentir o saber lo que era este tipo de dolor, porque dentro de mí vive un dolor desgarrador, un dolor intermitente que jamás desaparecerá, un dolor que esta marcado dentro de mi para toda la vida, desde aquella noche oscura, decierta, fría y vacía, aquella noche dejó de existir en mi aquella niña que solía verle el lado positivo a las cosas, pero como podía verle el lado positivo a aquella noche que me marco para toda mi existencia, sencillamente no le hallaba nada lo positivo.
Saque por inercia mi teléfono, y marque su número sin titubear, duro en responder algunos segundos, hasta que escuche su voz, y fue el detonante de todo aquello que tenía retenido, sentía como me venía en picada, como aquella coraza que había construido en años se derrumbó con solo oír su voz, lo necesitaba, sencillamente siempre lo necesité, solo que jamás supe donde carajos se había metido, él siempre fue él, quien sabía cómo calmar mis miedos, mis angustias, en ese tiempo solo era cosas de niña que perturbaban mi mente, y a pesar de que el era un niño igual que yo sabía cómo manejarme. Junto con Lukee. Y que ahora después de tantos años jamás han perdido su toqué, o sencillamente yo me acostumbre a ello. Lo extrañe cada jodido día de mi vida, cerraba mis ojos e imaginaba sus fracciones del rostro sus ojos su risa, era un jodido ritual cada día, será por ello que jamás lo olvides y pude reconocerlo de inmediato. Verlo asomarse por la ventana y a los segundos salir de la puerta de su casa juntos a un paraguas, hacen que mis barreras terminen de caer, lloro sin contemplación, lloro desconsoladamente de solo recordar cuanta falta me hizo y que hoy lo tenga frente a mi es un jodido sueño, aunque el siga sin reconocerle. Pero jamás pierdo la esperanza de que lo haga. Ni quiero perturbar lo, por eso le doy el tiempo necesario, de todos modos aquí estaré cuando lo haga. Mi fuerza de voluntad por mantenerme firme termina de caer al sentir su sola presencia cerca de mi, al sentir su tacto en mi piel, bajo mi rostro para no enfrentarlo aunque tarde o temprano lo notará, por la simple razón de que muero de vergüenza que me vea en este Estado, Estado al que yo ya me acostumbre, y ahora me arrepiento de estar aquí, pero cuando me di cuenta ya era demasiado tarde. Cada célula en mi interior me traicionó, lo necesitaban necesitaban de su paz.