Capítulo 32

—Eso fue todo, jefe —digo y pongo la bandeja sobre la mesa, me quito la cabeza de conejo y acomodo mi flequillo en la frente que se mueve por la estática, es mas un estorbo, pero lo necesito.

—Anwen, recuerda llevarte un paraguas, puede que caiga la primera nevada de la temporada, no quiero que enfermes y contagies a los clientes.

—¡Si, jefe! —grito contenta.

La campana de la puerta suena, agacho la mirada inmediatamente y pongo mi flequillo más al frente, no quiero que me reconozcan.

—¿No volverás al instituto?, e pasado una semana esperando a que entres por la puerta y no lo has hecho.

Levanto la mirada, con solo escuchar su voz mi cuerpo se emociona y mi corazón da un vuelco.

—No puedes estar aquí —le digo, miro a todos lados, esperando que nadie nos vea.

—No puedo seguir esperando a que decidas volver, necesito que vuelvas —se acerca.

—Anwen, con quien… Alteza —mi jefe se inclina avergonzado—, no sabía que estaba aquí.

—Me da gusto conocer a alguien que no le a dado la espalda a Anwen —sonrie Holder y le extiende la mano a mi jefe.

—Alteza —mi jefe le estrecha la mano— Anwen es una chica tra…

—Mañana iré al instituto —no quiero que hablen de mi—. Pedí permiso a mi benefactora para poder faltar y poder alejarme de los periodistas y de la corona. Te escribí un mensaje para que estes tranquilo

—Un mensaje no basta para asegurarme que estes bien.

Me pongo la cabeza de conejo.

—Fue un gusto verte —rio y le doy palmadas en la espalada—. Adiós, tengo que seguir trabajando, ¿no es así jefe?

—Quería hab…

—Mira los clientes ya vendrán, ya casi es la hora punta ¿no jefe?

—Si, si. Disculpe Alteza, ya casi es la hora punta.

—Adiós Holder le tomo del brazo y le hago salir del establecimiento, le cierro la puerta—. Adiós, nos vemos mañana —digo animada, me giro hacia mi jefe y trato de calmarme.

—Parece rudo en la televisión, en cambio de cerca no parece tan malo.

—Jefe, le ayudare una hora más.

—No te pagare extra.

—No importa. Aun no quiero salir de aquí.

Veo a Holder esperando en el auto junto a el señor Baan, esperare a que se vayan.

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El plan va bien, llegue tarde y nadie tuvo oportunidad de hablarme, almorcé en mi habitación y nadie puede entrar a la fuerza, ahora debo ir a comprar algo para cenar y de nuevo encerrarme en mi habitación hasta mañana y volver a llegar tarde y todo se repetiría, esa será mi rutina.

—Recuerden que el próximo semestre las universidades de la Liga Ivy vendrán al instituto a intentar reclutarlos, este trabajo hará que se conozcan más y podrán decir decirse entre ustedes cuáles son sus puntos fuertes o cuáles no. Entonces les doy los diez minutos que faltan para que me den sus grupos, dos por grupo por favor, solo dos —dice el maestro y se va a su escritorio.

Todos a mi alrededor se mueven rápido para formar sus grupos.

Busco a Suki, ella no me ve, se acerca a Lane y se abrazan, supongo que con ella no podre hacer grupo.

—Quedamos los dos, conejo.

Veo a Holder observándome de pie junto a mi escritorio.

—Debes de hacerlo con Evangeline —digo, y sigo buscando a mi alrededor. Los demás nos están viendo. Si Andrew estaría aquí lo haría con él, pero está en uno de esos actos protocolares de la corona.

—Vamos solo estamos tú y yo —me extiende la mano, oigo murmullos, el timbre suena, pero nadie sale.

—Chicos ¿ustedes harán el trabajo juntos? —pregunta el maestro.

—No.

—Si —dice Hoder con seguridad sin quitarme la vista de encima.

—Si, solo quedan los dos, háganlo, ya los anoto yo —dice el maestro y se va.

Holder sigue con su mano extendida.

Dudo unos segundos y la tomo, él la aprieta con delicadeza y me saca del salón.

Me suelto de él una vez que llegamos a mi habitación.

—No hagas esto.

—Hacer que.

—Actuar como si fuésemos más que amigos, como si yo te importara como algo más.

—Eres mi amiga, me puedo preocupar por ti —toma entre sus manos una foto mía de bebe, ríe.

—No quiero que la toques —intento quitársela pero él la levanta, es tan alto que intento saltar para alcanzarlo, Holder se ríe, intento con todas mis fuerzas saltar, pierdo el equilibrio y caigo sobre él, Holder cae sobre la cama.

Puedo sentir mi corazón sobre su cuerpo y su mirada sobre mí, los segundos que pasamos así me parecen eternos.

Me levanto veloz y el ríe.