si no hay gato, los ratones hacen fiestas

Zaida

-Llamadas van y vienen, yo lo que quiero es verte- le digo a Eliam haciéndole pucheros -te extraño mucho-

- tengo un imperio que mantener de pie, además si no trabajo no puedo darte todo lo que quieras-

-yo solo te quiero a ti, arreglaré bocas mal olientes y te mantendré, solo para que me des besitos-

Suelta una carcajada achinando los ojos dejándome eclipsada, me siento como en el capítulo de Betty la fea mientras habla con la foto de Don Armando ¡tan divino!

-te advierto que me gusta comer cosas caras y tengo obsesiones con los vehículos costosos-

-retiro lo dicho- vuelve a reír con ganas

-también te extraño mi negra, es una lástima que a días de que seamos pareja tengamos que estar separados, me haces falta como no tienes ideas-

-tu a mí – bostezo -debo dormir mañana tengo clase – veo la hora 3 de la mañana -chanfles-

-¿Qué viste?-

-nada, solo que son las 3 y a las 5 debo estar en pie-

-pasa buenas horas mi negra- me tira un beso, yo le tiro otro y la llamada se corta, quedando rendida casi al mismo tiempo

***

 Ya pasaron 2 semanas desde el altercado con las chicas en mi casa, nos pedimos perdón (excepto Marcela, ella dice que lo hará cuando lo sienta); pero las cosas no son iguales, fui con ellas a Mixer y ciertamente me sentía incomoda, pasé más tiempo en el parqueo privado hablando por el celular con Eliam que dentro de la discoteca, por lo que decidí no volver a ir, mi vida ultimamente se reduce a llamadas y chat con Eliam.

Estamos en horario de receso en la uni y todas estamos sentadas en la cafetería planificando el cumple de Laura que se acerca

-¿Qué opinas?- me pregunta Lau

-E?- pregunto como una idiota -lo siento, no escuché nada estaba hablando- señalo el celular con la boca

-con Eliam, lo sabemos- dice Carolina un poco disgustada

-chicas- se mete Lisbeth

-ella tiene razón- digo -sorry, es que...-

-estas enamorada- sonríe Carolina, yo asiento

-muy, nunca me había pasado y es reciproco, eso me tiene muy feliz-

Y como mis amigas que son, mi felicidad las contagia, produciendo un abrazo grupal

-lo siento- dice Marcela y sé que es verdad, sé que se está disculpando de corazón y se me aguan los ojos

-ay no, sin lloradera, que nadie se ha muerto-

Las cosas empiezan a sentirse mejor, hablo con Eliam brevemente para decirle que le escribiré al llegar a casa y me dedico terminada las clases a mis amigas.

ELIAM

El zapato casi lo tengo desgastado con el tic nervioso de frotarlo en el piso por la ansiedad que me invade al no saber de Zaida, me dijo que me escribiría al llegar a casa, pero ya pasan de las 9 de la noche en RD y ella no llama.

Le he escrito y me responde con un emoji de besos o con una foto grupal con sus amigas, así que volvió a las andanzas con ellas; se nota que cuando el gato no está en casa, los ratones hacen fiestas; disfruten pequeños, disfruten, pero aléjense del queso, puede que le provoque indigestión; sonrío para mí mismo y apago el celular hay cosas que se resuelven mejor estando presentes que a la distancia.