Alice y Kaizen intercambiaron miradas, esa gran coincidencia a Kaizen le pareció irreal, en cambio a Alice, le resultó de gran agrado haber encontrado a la única persona que podría saber dónde estaba Marie, él no dudo ni un momento, al ver a Alice con aquella gran espada, sabía que él no podría tener algún dialogo con ella, así que se giró y corrió a otra puerta que estaba un poco más lejos de donde salió, Alice empezó a perseguirlo, corrió tras él lo más rápido que pudo, cuando ella observó como Kaizen entraba por una puerta sin necesidad de ninguna llave, él pudo lograr escapar de Alice, ella llegó a la puerta por donde él había entrado pero al abrirla, no se podía abrir, Alice movía bruscamente la manija de la puerta, cuando la puerta logro abrirse.
Alice entró a ese lugar buscando a Kaizen, pero solo encontró una habitación que tenía tres puertas al fondo, en el centró había tres cuadros de pintura, extrañamente había muchas antorchas de fuego en el lugar, lo más probable era que la luz del fuego hiciera notar más los detalles de esas pinturas, Alice sabía que no podía escoger una puerta al alzar, su perspicacia le hacía sentir que dos de esas puertas podrían ser una trampa. Ella estaba concentrada intentado recolectar información sobre ese lugar, pero su concentración fue interrumpida por el sonido de una puerta abriéndose; puerta por donde había entrado Alice a ese lugar.
— ¡Ah! Llo siento no sabía que había alguien en este lugar –Decía la persona al entrar a la habitación y observar a Alice con la espada.
— ¿Por qué lo sientes? –Preguntaba Alice, confusa por la reacción de aquella mujer.
— ¿No me vas a matar verdad? –Decía aquella mujer con sus ojos sollozados.
— ¿Por qué debería? –Alice se acercó a ella–, ¿Por qué estas tan asustada? –Preguntaba al ver el rostro de aquella mujer joven, con sus ojos hinchados por llorar.
En el momento que Alice se acercó a esta mujer, pudo observarla mejor, era una joven muchacha de piel blanca con unos hermosos ojos color amarillos, su largo pelo color castaño, con una vestimenta desgastada y rasgada. Los bordes de sus ojos estaban rojizos, había pasado por mucho sufrimiento, también mostraba algunos moretones en su cuello.
— Tengo miedo, en los cuadros no decía que habría un payaso loco que nos cazaría –Contestaba aquella mujer con miedo–, Además la voz que se escuchó antes de iniciar la prueba, no menciono nada de eso tampoco.
— ¿Prueba? ¿Estamos en una prueba? –Decía Alice intentado buscar respuesta para su situación.
— Acaso no has venido tú, ¿A completar esta prueba? –Dijo aquella mujer, confusa por las preguntas de Alice.
— No, yo… lo siento no sabría como explicártelo, solo se dio la coincidencia que buscaba a alguien y lo encontré en este lugar, pero no tenía idea que fuese una prueba.
— ¿A quién buscas? Tal vez yo pude verlo visto antes de iniciar la prueba. –Decía aquella mujer intentado ser algo útil para Alice–, Por cierto, me llamó Aleny –Intentaba sonreír, pero estaba asustada por la espada de Alice.
— “Aleny” –pensó Alice recordando haber escuchado este nombre en alguna parte.
— ¿Está todo bien? –Decía Aleny.
— Lo siento, el tipo que ando buscado ya lo encontré, pero puedes ayudarme diciéndome que era lo que decía los cuadros antes de empezar la prueba.
Esta mujer llamada Aleny, empezó a describirle a Alice el lugar donde empezó la prueba, que parecía una gran habitación circular, que tenía cuadro pasillos, Aleny decía que había dos cuadros que solo contenían una escritura, la primera decía:
“Solo los colores perfectos, pueden colorear la vida de la muerte,
como el pincel que se humedece al sentir el color ardiente
para así entonar el color de los celos”
El segundo decía:
“Los fragmentos de la realidad, harán que veas el verdadero camino,
el camino a la verdadera esencia del color de la vida, pero que también la envidia
quiere tomar”
Aleny seguía diciendo que detrás de esos cuadros, había uno más, pero este no tenía nada escrito, pero si un cuadro de pintura, en el plasmaba a una mujer de cabello negro rizado, con un vestido negro, esa mujer estaba en una torre de un castillo, la mujer sostenía un pincel, también se podía ver a un hombre que tenía similitud a un príncipe que escalaba aquella torre y debajo de él, plasmaba lo que parecía muchos cuerpos con vestimentas blancas ensangrentadas.
Aleny continúo diciendo que luego de que todos vieran aquella pintura se escuchó la voz de una mujer que decía “Quienes encuentren mi color, les ayudare con el matiz de la vida” luego dice que después de aquellas palabras, se escuchó los sonidos de barrotes descendiendo para abrir pasó a aquello pasillos largos, que contenían puertas, ella decía que se juntó con un grupo compuesto por cuatro personas, una era una pareja y dos hombres, explicaba que ellos entraron a una habitación y se encontraron con tres cuadros de pintura, decía que uno de los hombres intento pasar por una de las puertas, pero que luego de que ese hombre había entrado, la puerta se cerró detrás de él, y pocos momentos después se vio como la sangre pasaba por debajo de la puerta.
#3020 en Terror
#23284 en Fantasía
misterio y terror, historia oscura y muertes, fantasia oscura y gore
Editado: 24.09.2018