—El dia inicia y todo vuelve a empezar; la escuela, las clases, el existir... mis padres dicen que debo hacerlo para tener un mejor futuro que ellos, que nacieron desde lo mas bajo y están en clase media trabajando muy duro para vivir cómodamente aunque hayamos vivido en muchas partes del mundo—piensa James al levantarse de la cama, mide 1.70, tiene el cabello negro, su rostro muestra que tuvo un dia muy largo para llegar a la cama, se acerca a la ventana mirando observando como todas personas van a trabajar estudiar o lo que sea que hagan; a lo lejos se escucha una mujer gritando—James despierta debes ir a la escuela—.
James con una cara larga comienza alistarse para el colegio, desayuna y camina hacia lo desconocido como las instalaciones, el idioma, las personas, la cultura del lugar.
James esta acostumbrado pues su padre no tenía un trabajo seguro y siempre era despedido. Sus padres decidieron mudarse pues ya no encontraban oportunidades excepto en México su próximo hogar. Todo cambia otra vez, su entorno y todo su estilo de vida, todo lo que tenía en su antigua casa como sus recuerdos y pensamientos... Todo.
Al caminar James escucha música para distraerse pone sus manos de su sudadera completamente gris, el tiempo frío inunda todo el municipio haciendo ver poco movimiento en las calles, las escuelas estarán poco tiempo abiertas, las familias estarán en sus casas para las festividades, James lleva un uniforme del colegio "Santiago" cerca de su casa, en la entrada un señor lo detiene —su credencial por favor— James le entrega una hoja y el señor entiende rápidamente mostrando al lugar a donde debe caminar.
—sigame por aquí—. pasa por algunos salones donde los alumnos están afuera, algunos ven curiosos a James diciéndose que nunca lo habían visto antes en ese momento en timbre suena y comienzan las clases, James se mantiene neutro en todo momento al caminar entra en una oficina donde ve a dos mujeres de 40 años mas o menos, en las paredes cuelgan distintos diplomas, fotos, entre otros. El señor de la entrada le entrega la hoja que James tenía al señor que estaba frente —muy bien— busca en la computadora y mira por un segundo a James analizándolo, escribe y se imprime un horario que James recibe, el hombre se levanta y le entrega los libros a un lado de el —esperemos que se sienta a gusto aquí— al caminar a la salida guarda los libros en su mochila.
El hombre sale primero de la oficina y James sigue saliendo de la dirrecion escolar dirigiendo a la primera aula a lado contrario de donde estaba —comienza la aventura en esta prisión—pensó.
—profesor me permite un momento—dice el encargado del portón al asomar la cabeza dentro del salón—chicos les presento a su nuevo compañero —.
Todos miran James y el les devuelve la mirada sorprendidos de otro alumno pues era un pasado que no se conocía y su aspecto inquietaba al grupo —entra, toma asiento—.
Todos murmuran acerca de James entra y se sienta al lado de la ventana mirando a la carretera; la clase termina y sale el maestro de matemáticas del salón con todas sus cosas despidiéndose, rápidamente los alumnos miran a James y comienzan a preguntarle muchas cosas de las cuales ninguna responde; todos comienzan a burlarse de él diciendo cosas sin sentido —Ya mamón responde—.
—parece que todo es como suponía—pensó.
James solo alza su vista a ellos y de forma suave dice —es un insulto al maestro no prestarle atención cuando habla— Al decir eso el maestro ve a todos los alumnos alrededor de James y les ordena sentarse comenzando así la siguiente clase hasta el receso donde parte de ellos salen corriendo a la cooperativa lejos del salón, algunos se quedan dentro jugando con sus teléfonos, otros conversan y murmuran acerca de James y rápidamente lo etiquetan como un bicho raro que nunca habla diciendo "mamón" a James.
Se levanta y camina tranquilamente a la cooperativa observando su alrededor unos corriendo otros conversando y riendo entre muchas cosas mas, al llegar cerca de la entrada percibe las miradas de los demás a el, todos a su alrededor mira de la misma forma que al entrar al salón, al llegar cerca de la cooperativa decide esperar a que este vació para comprar, para distraerse saca un libro de su sudadera y comienza a leer.
Pasan 20 minutos hasta que la tienda esta casi vacía, compra y regresa a su salón leyendo el libro muy concentrado pero antes de seguir choca con un chico apresurado por llegar a comprar y comer un poco, ambos caen al suelo lastimándose levemente, ambos se levantan —perdón perdón no fue mi intención, soy Alejandro—.
James aturdido del golpe en la cabeza ve al chico frente a el —no te preocupes, me llamo James—.
El chico sorprendido ayuda a levantarlo mostrando timidez—gracias, disculpa por tirarte eres el nuevo ¿no?—.
James lo mira confundido —no te preocupes, si— levanta el libro que leía limpiándolo de la tierra del suelo.
—¿quieres algo de comer? yo invito—.
—no gracias ya compre—.
—oh bueno nos vemos— Alejandro camina rápido a la cooperativa mientras James camina como si nada y continua su camino al salón percibiendo todavía las miradas de todo la escuela, al ser pequeña todos sabían que había llegado un extranjero de 3er semestre mostrándose misterioso de quien era, James se molesta un poco al ser el centro de atención y regresa la mirada a todos lo que puede al caminar mostrando parte de el.
Al entrar al salón todos lo miran haciendo silencio durante unos segundos murmurando entre grupos lejos uno de otro, la tensión se siente en el ambiente por un momento hasta que se escucha la campana del colegio rápidamente los alumnos entran a sus salones de forma tranquila, otros inquietos y unos pocos de forma precipitada, James solo mira a todos ponerse en su lugar limpiando su espacio.
Ve hacia la puerta considerando salir de ahí de ese ruido y mira a Alejandro entrar salón comiendo rápido para ponerse al otro lado del salón, Alejandro mira a James y se acerca a el —hola—.