Circo.

Los roces iban cada vez mas subidos de tono, ninguno de los dos podía ni quería controlarse ya que se sentían bien o al menos Yuuri ya que Víktor estaba sufriendo por controlarse y no terminar follado al menor sobre la alfombra.

- Creo que deberíamos detenernos antes de que esto empeore.- dijo Víktor agitado y con un dolor punzante en el bajo vientre.

- Tienes miedo de penetrarme...- ladeo la cabeza sonriendo- ¿Tan grande estas?- Víktor no sabia si alegrarse o asustarse.

Yuuri estaba hablando sin ningún tipo de tapujo en esos momentos, eso lo preocupaba pero le aumentaba el morbo, el menor se sentía muy valiente al estarlo provocando de esa manera a sabiendas que él se estaba reprimiendo lo mas que podía.

- No digas cosas de las que después te puedas arrepentir.- comento besándole el cuello.

- Nunca he visto otro aparte del mío y tengo curiosidad... aah.- gimió ante una pequeña mordida en el lóbulo de su oreja.

- ¿Quieres ver el mío?- levanto una de las piernas de Yuuri dejándola a la altura de su cadera.

- ¿Puedo?- quería asustarlo y le salió el tiro por la culata.

- Mocoso pervertido ve a cambiarte para dormir.- gruño levantándose.

Escucho una carcajada por parte de Yuuri quien rodó un poco en la alfombra gozando de su maldad, Víktor se sentó en el sillón mientras lo veía tirado en el suelo con una sonrisa juguetona en sus labios, dio un suspiro largo pensando en como podía darle un buen susto y que dejara esos jueguitos, lo vio ponerse de pie y actuó rápidamente tomándolo del brazo y sentándolo en sus piernas.

- Quieres divertirte como los adultos ¿Verdad?- Viktor llevo sus manos al bajo vientre del pelinegro.

- Solo estaba jugando contigo, quería distraerte un poco de lo tenso que te veías...- comento dándole un beso tierno en la mejilla.

- Pero yo no voy a jugar contigo, ahora vamos a ir muy enserio.- bajo su mano hasta el pequeño bulto entre las piernas del menor.

- ¡Víktor!- exclamo sintiendo las caricias en su miembro- V-van a venir tus amigos...- comento intentando zafarse del agarre.

- Aun faltan unos minutos para que eso pase.- el mayor se acostó llevándose al chico con el.

Por mas que Yuuri quisiera volver a sentarse esa posición lo había dejado como tortuga volteada, no había manera y Víktor parecía que no pensaba detenerse ya que las caricias se comenzaron a hacer mas intensas. Cuando lo toco tenia una leve erección la cual fue creciendo a medida que seguía frotando la zona, el también iba a terminar mal sin embargo quería darle su lección a Yuuri, vio al menor retorcerse mientras se cubría la boca tratando de reprimir los gemidos, ya había alcanzado su punto limite y podía sentir las prendas tirantes apresando aquello que no había visto pero que adivinaba no era tan grande como lo suyo.

- ¡Víktor por favor!- chillo al borde del extasis.

- ¿Qué pasa cariño?- pregunto divertido.

- Ya no puedo mas, siento que me voy a orinar o algo así.- gruño entre dientes mientras se podía escuchar su respiración dificultosa.

- Adelante... no pasa nada si lo haces.- dijo burlón.

Un gemido agudo perturbo por completo su mente racional y la humedad llego a la palma de su mano, Víktor estaba incrédulo a lo acababa de pasar, Yuuri había alcanzado el orgasmo con un simple roce sobre la ropa, lo vio y estaba rojo como un tomate mientras sus ojos se cristalizaban, rápidamente se dio la vuelta preocupado.

- ¡Yuuri no llores!- se escucho un tanto agresivo ya que su voz estaba ronca por la excitación.

- ¡No voy a llorar, te dije que me iba a orinar!- grito molesto.

El peliplata se quedo quieto y viendo hacia abajo levanto las prendas viendo con curiosidad lo que se ocultaba ahí dentro, Yuuri de inmediato cerro las piernas mientras lo veía con el ceño fruncido.

- No creo que sea lo que dices...- sonrió formando un corazón con sus labios- Eres un pervertido que se ha corrido solo con un ligero roce, quien diría que fueras tan sensible...- le abrió las piernas y se acomodo entre ellas- ¿Qué pasaría si toco bajo tu ropa? estoy seguro que te vendrías de inmediato.- sonrió malicioso.

- Estoy seguro que yo podría hacer que tu te corras mas rápido que yo...- reto decidido.

Víktor estaba dispuesto a aceptar el reto, sin embargo escucho el portón abrirse y sonó la alarma de que eran conocidos.

- Ve a ponerte el pijama...- dijo levantándose y aparentando que nada pasaba.

Yuuri subió corriendo y un par de minutos después entraron Mila y Chris bromeando entre si, el peliplata trato de aparentar normalidad, sin embargo algunas cosas no pasaron desapercibidas para un par de ojos verdes muy atentos y entrometidos.

- ¿Qué estuvieron haciendo?- pregunto Chris sentándose a su lado.

- Yuuri tenia problemas para entender un tema de matemáticas y yo le estuve ayudando.- respondió el mayor como si nada.

- ¿Qué mas?- insistió viendo a la pelirroja quien no entendía porque tanta risa.

- Nada mas, ahorita esta poniéndose la pijama para dormir.- Víktor estaba tranquilo.

- Sabia que estabas trastornado pero no me imagine cuanto... ponerte duro solo con estar practicando ejercicios de matemática, eso si es perverso.- se cruzo de brazos mientras reía con burla.

De forma involuntaria los ojos azules de Mila se fueron directo a la entrepierna del peliplata quien se cubrió con el cojín sumamente avergonzado y a la vez molesto con su amigo por ser tan indiscreto.

- El circo ruso ya alzo su carpa.- comento cubriéndose la boca, reprimiendo una carcajada.

- Que divertido, yo quiero verlo...- Chris salto en el sillón y se inclino hacia Víktor- Eres un rabo verde, fijándote en niños menores de edad, que pervertido.- negó con la cabeza.

- Chris, deja de molestar si no quieres pasar de activo a pasivo esta misma noche.- dijo molesto el peliplata.