Advertencia
Contenido sexual y explicitó
Violencia sexual
Violencia verbal
No apto para personas sensibles
Alice.
Mi madre estaba tan feliz que cada semana viajaba.
Su gran escusa era: “Tengo asuntos pendientes”. Hija de la chingada. Lo siento por decirle así… Aunque ella no se merece llamarle madre.
En otros puntos. Los mensajes misteriosos cesaron. Diría “Por fin me dejaron tranquilo y voy a follar como nunca”. Ja. Ja. Ja. Mi único objetivo es encontrarlo hasta tortúralo. Paso un mes sin divertirme con algunas de mis presas que estaban en las peceras. Lo último que dije de follar como nunca. Lo hice, cada noche tenía placeres al estilo Christian Grey bueno a mi estilo de: “No aguanto”. “Mete tu polla Alejandro”. “Mueve esos dedos como lo haces”. “Muérdeme, soy tu carne humana excitada”. Okay el último lo dijo una nerda que estaba bien buena con un cuerpo esbelto e infartante sin duda esos trapos de buena marca lo escondían.
Así continuaron mis días, actuar como un chico normal, se iba a fiestas, beber hasta perder el conocimiento, coquetear con algunas amigas. Mi vista se fijó en una rockstar. Esta para comérsela entera, estaba duro por simple hecho que tenía unas hermosas piernas, glúteos redondos y grande igual al durazno, los pechos como las cerezas exquisitas. Me mordí el labio con fuerza
─ Sin duda conseguirás buen sexo
─ Claro que si Marco, quiero meter mi berenjena a ese durazno hasta el fondo.
Solo sonrió.
Caminaba directamente hacia a ella. Sabía con unas lindas preguntas me llevara al segundo piso chikipum chikipum ella gritara mi nombre.
─ Una linda rockstar, me pregunto ¿Por qué estarás muy solita? ¿A caso te dejaron sola?, o ¿Estás esperando alguien para follar?
─ Alejandro, Alejandro ¿A caso lees la mente de otros? ─ sonrió de lado
─ No, pero me lo imaginaba
Agarro mi mano, empujamos a las personas que bailaban unos que otros nos insultaban. No me importaba por qué ella me estaba llevando a la habitación.
Mi erección gritaba: Sexo, sexo, sexo, sexoooooo
Abrí la puerta. Sin esperar me empujo directo a la cama. Sin ordenarle como me gusta, ella se subió encima de mí, sus movimientos me prendieron como el fuego, una risa por parte de ella escuche. Solo segundos fue darme cuenta de que sentía su humedad en mi pantalón, la maldita no estaba usando bragas. Sin duda me sorprendió. Ella es la única chica que vino a una fiesta con la falda tan corta, es una niña muy atrevida.
Desabroche mi pantalón, rápidamente saque el pantalón junto con el bóxer. El pene estaba húmedo, quería penetrarle rápido, aunque ella agarró mi pene y se lo llevo directo a la boca. Joder. Era una sensación muy rica, sentía su lengua de cómo estaba estimulando la cabeza, cinco veces lo hizo hasta sentir que sus labios succionaban la cabeza.
─ Mierda.
La vista era espléndida, su boca bajaba y subía, estuvo así por un buen rato sin esperar sentí húmedo en mis testículos, la maldita perra los estaba chupándolos. Ella me mostró una sonrisa pervertida. Extraordinaria.
─ Ahora me toca.
De una sola vuelta, yo estaba encima de ella. Mordía su piel en lo cual escuchaba sus gemidos por un momento sentí la sensación de matarla, jugar con su sangre … Debía aguantar y no romper mi buena actuación. En mi mente repetía varias “Debo follar, debo follar”
Ella se dio cuenta por mi extraña actitud. Sonreí. Con el primer dedo entre a su húmeda vagina e hice momentos circulares ella reprimía sus gemidos.
─ Es el principio de muchos orgasmos
Introduje el segundo dedo de igual manera lo hice. Con el dedo mayor estaba haciendo estimulando su clítoris. Ya era el tiempo de que mi amigo juega dentro suyo.
Sin decirle nada me puse entre sus piernas, la penetré tan brusco que ella soltó un gemido desgarrador, sin contemplaciones me moví rápidamente, sus paredes vaginales estaban apretadas, quería más esa sensación. Tres estocadas que sentí un líquido caliente. Me encanto. En cambio, yo estaba más prendido, sentí ese mismo líquido varias veces. Sin duda ella había tenido varios orgasmos.
─ Alejandro quiero tener sexo anal.
Me quedé quieto instintivamente abrí mis ojos de sorpresa, ninguna de las que estaba me lo propuso en el cual yo les convencía con mi carita angelical.
Asentí.
La besé con deseo. Muchas marcas dejaban alrededor de su cuerpo: el cuello, sus pechos y a la vez mis dos dedos estaban estimulando al chiquito. El chiquito se encontraba bien húmedo. Enarque las cejas
─ ¿Te has puesto lubricante?
─ Quería tener sexo anal, por eso me lo prepare… solo para ti
─ ¿Cómo sabías de que tendríamos sexo? ─ volví a preguntar
─ Simple… usando ropas pequeñas te llame la atención
─ De muchos también ─ respondí rápidamente
─ Ellos no se acercaron, ya que les dije que venía contigo
─ Rockstar inteligente, me encanta.
La mire a los ojos y la penetre en una. Sus gemidos me mostraban su dolor, aguanto el grito, tan solo segundos ella me dio la señal que me moviera. En toda mi vida sexual, esta es la mejor. Las paredes anales eran tan húmedas que se sentía como el paraíso. Agarre su pecho fuerte lo lleve hacia mi boca e hice como un bebe succionaba despacio para luego succionar bruscamente. Sus uñas de ella se clavaban en mi espalda, sentí el líquido como bajada. Sin duda era sangre. El orgasmo llegó. Lo llené a su chiquito de semen.
─ Sin duda es el mejor sexo que tuve ─ dijimos al unísono