Me desperté como todos los días y recibí una llamada de mi única amiga en el mundo Jenny, todos los días me llamara para tener más ganas de salir y disfrutar el día, escuché a mis padres discutiendo otra vez.
Rodé mis ojos, al escucharlos.
La semana anterior escuché una discusión muy fuerte, me preocupe bastante.
Ellos contaban sobre abandonar la ciudad y trasladarse a otra. Pero mi madre no estaba de acuerdo con la idea y menos lo estaba yo, supuse que todo era obviamente idea de papá y su tonto trabajo.
Resulta que esa mañana discutían de lo mismo. Me levanté, me fui a duchar y me maquille, busque un outfit para la ocasión y salí de casa poniendo de excusa un encuentro con Jenny en el parque.
Llamé a Jenny y no contestó, en ese momento necesitaba su presencia más que nada en el mundo.
Mi plan era llevar el portátil de papá y averiguar todo, aprovechando que estaba libre y buscaba la información en un café cercano, no iba a dejar que papá me separara de todo lo que pude obtener hasta ahora, todos mis amigos, toda mi vida, iba a destruirse.
Y he ahí lo que jamás me imaginaría mi madre estafando a mi padre, si, era cierto que mi padre se iba a Denver Colorado y ganaría más dinero pero no como había escuchado en su conversación de esta mañana ...
Sabía que lo más probable era, que mi mamá había cambiado la cantidad de salario que realmente ganaría mi padre, pero no sabía para que ella quería el dinero que sobrara.
Recibió un correo de ¨la empresa¨ Donde decía que iba a ganar 1000$ más si se mudaba a Denver Colorado, había borrado el correo original por uno falso pero el verdadero seguía en la papelera de reciclaje, no era astuta...
Tenía que asegurarme quien era, así que le pregunté a mamá quien había usado la computadora de papá, aparte de ella y ella me dijo que nadie.
Había sido ella. No tenía ganas de decirle a mi padre que mamá lo había traicionado.
Pero ya mi padre nos avisó que los tiquetes de avión ya se habían comprado y mamá había cambiado de opinión muy rápidamente, supongo que si se ponía feliz, apenas escuchara la noticia, podría verse sospechoso, por lo tanto la discusión de hoy por la mañana.
Supe que no había forma de no ir a Denver, lo único que quedaba era despedirme de Jenny.
Me quedé todo el mes con Jenny, fueron los días más felices de mi vida pero también tristes, porque ya iba a llegar el momento de despedirnos.
Jenny para mí, es mi única amiga, la que me cuenta todo lo que le sucede, la que me pide consejos aunque yo no tenga experiencia, la que me molesta por no tener experiencia, somos amigas desde muy, muy pequeñas, su madre me conoce tan bien que hasta me ve como parte de su familia, pero lastimosamente no nos veremos en mucho, mucho tiempo...Y eso me pone demasiado triste.
Jenny se quedó toda la mañana ayudando a empacar lo que me faltaba, le entregué una carta, una carta con sinceras palabras de amistad.
-No puedo creerlo, te voy a extrañar tanto mi pequeña Chiara-dijo con sus ojos llorosos
-Te voy a extrañar tanto pero tanto, te quiero mucho-dije abrazándola, apunto de soltar en llanto
El abrazo más doloroso, y más triste que podría existir
-Tal vez nuestra amistad ya no sea lo mismo a distancia pero vas a tener unos bellos recuerdos-dijo entregando una caja en mis manos
-¿Qué es?
-Solo mírala cuando llegues a Denver.
-Hija ya llego el taxi-dijo mi padre
-Salgamos...
-Sigue tus sueños-dijo Jenny
-Te lo prometo-dije convincente
Le di un beso en la mejilla y corrí hacia el auto con mi mochila púrpura, mire a Jeny a través de la ventana y le hice seña de despedida, vi su lágrima caer por sus ojos color miel casi gelatinosos de aguantar sus lágrimas, aceleró el auto, hacia el aeropuerto para un cambia totalmente radical en mi vida.
No sabía lo que se venía...