LA FLOR DE DIAMANTE

LA FLOR DE DIAMANTE

Doce días después, 15:27 horas, en los laboratorios de física cuántica de la universidad…

ELVIS: Gracias por ayudarme a encontrar la fluctuación correcta en los campos electromagnéticos. Ahora solo hace falta fusionarlo, con el trasladador de espacio tiempo que diseñe y todo estará completo. Serás la primera persona aparte de mí, que podrá observar lo que es capaz de hacer, un compactador de ondas electromagnéticas. (VEINTE MINUTOS DESPUÉS ELVIS ENCIENDE SU MÁQUINA. SIETE ASPAS DE MÁS O MENOS UN METRO DE LARGO PUNTIAGUDAS Y DE UN GROSOR EN LA BASE DE CINCO CENTÍMETROS, COMIENZAN A MOVERSE  EN SENTIDO CONTRARIO UNA A LA OTRA, A UNA VELOCIDAD DE QUINIENTOS VEINTE REV/MIN. DE ESTA MANERA EMPIEZAN A GENERARSE DESCARGAS ELÉCTRICAS, DE UN COLOR AZUL ALREDEDOR DE LAS ASPAS QUE SE ENTREMEZCLAN CON LAS ONDAS ELECTROMAGNÉTICAS, LAS QUE EMPIEZAN A MOSTRAR IMÁGENES SUCEDIDAS MINUTOS ANTES Y AUMENTANDO AÚN MÁS SU VELOCIDAD MUESTRAN IMÁGENES DE SUCESOS OCURRIDOS HORAS ANTES)

DANA: ¡Guau… es increíble! ¡¿Cuándo se te ocurrió diseñar algo así?!

ELVIS: Te lo diré luego. (EN SU MENTE EMPIEZA A RESPONDER A LA PREGUNTA DE DANA. EL DÍA QUE OÍ QUE UNA MADRE Y UN PADRE ABANDONARON A SUS HIJOS, CUANDO OÍ QUE UN GRUPO DE SUJETOS ABUSARON SEXUALMENTE DE UNAS ADOLESCENTES, EL MOMENTO EN QUE OÍ QUE MÁS DE UNA MUJER HABÍA ABORTADO TANTO POR DECISIÓN PROPIA Y OTRAS QUE HABÍAN SIDO OBLIGADAS A HACERLO, COMO EL DÍA QUE OÍ DE LOS TRAFICANTES DE PERSONAS Y DE LOS TRAFICANTES DE ÓRGANOS)

DANA: ¿Y qué harás ahora?

ELVIS: Tendré que salir de viaje nuevamente, ya que preciso de ciertos materiales, para construirlo de un tamaño más apropiado.

DANA: ¿Volverás a abandonarme?

ELVIS: No lo veas así, es algo que tengo que hacer y será por corto tiempo.

DANA: ¿Y cuándo te vas?

ELVIS: Con estos resultados, lo más pronto posible. ¿Qué te parece si a manera de celebración, salimos a cenar esta noche y de ahí a pasear?

DANA: De acuerdo ¡vamos a divertirnos!

Van a cenar a un restaurante lujoso. El salón posee un color dorado y perla entremezclado. Sus enormes lámparas de cristal cuelgan del cielo raso, cual si fuesen diamantes acomodados. Dana y Elvis se encuentran sentados alrededor de una mesa redonda, cuyos manteles y sobre manteles, poseen colores similares a los muros. En la parte central de la mesa, se encuentra un florero de cristal, que contiene rosas blancas y rojas.

Los garzones llevan puesto una camisa blanca, sobre este un chaleco negro, una corbata y pantalón también de color negro. Al compás de la dulce melodía interpretada por un  dúo de hermosas mujeres, una rubia y la otra morena, ambas llevan vestidos de coctel azul, quienes son acompañadas por un pianista, trigueño de cabello crespo, vestido con una camisa blanca y smoking negro, algunas parejas bailan y otras conversan amenamente, degustando de los platillos y bebidas que son ofrecidos en el menú.

ELVIS: ¿Espero  que te guste el ambiente?

DANA: Es muy hermoso ¿pero no es muy costoso?

ELVIS: El precio es lo de menos, es una noche muy especial ya que es nuestra cena de despedida.

DANA: Pero no lo digas así, ya que suenas como si nunca fueras a volver.

ELVIS: Tienes razón. ¡Estamos aquí para celebrar y eso es lo que vamos a hacer! Toma la carta y pide lo que desees.

DANA: Mira, aquí tienen platos de todo tipo, nacionales e internacionales.

ELVIS: Como gustes, ya que mi deseo es que esta noche la disfrutes. (SUS ROSTROS EMPIEZAN A DIBUJAR SONRISAS TIERNAS, SUS OJOS MUESTRAN UN BRILLO QUE NINGUNO DE ELLOS HABÍA SIDO CAPAZ DE EXPRESAR ANTES, PERO QUE AHORA SALÍA A RELUCIR. TERMINAN DE CENAR Y EMPIEZAN A RECORDAR EL CÓMO ES QUE SE CONOCIERON. ALGUNAS DE LAS REMEMORANZAS LOS HACEN REÍR Y OTRAS LOS PONEN UN POCO TRISTES PERO AUN ASÍ SE SIENTEN FELICES POR TODO LO QUE PASARON) Dana hace mucho que quiero obsequiarte algo. (ELVIS SACA DE UN PEQUEÑO JOYERO, UNA FLOR DE DIAMANTE Y LO COLOCA SUAVEMENTE EN EL CABELLO DE DANA) Lo recogí el día que tú y yo nos vimos por primera vez.

DANA: ¡Es muy hermosa, muchas gracias!

ELVIS: Me hace feliz el hecho de que te guste. Preciosa, se ve muy bien en ti ¿te parece si bailamos un poco?

DANA: Creí  que nunca me lo pedirías