-Yo ya conocía a todo el mundo, por lo que relacionarme en el instituto fue tarea fácil. Los de cursos mayores, los de cursos menores, profesores, todos nos conocíamos. Pero las noticias en un pueblo volaban. Ya todos sabían que yo, mi abuela y dos amigos de mi ciudad éramos los únicos que conocíamos al nieto de Lucía, y todos habían venido a preguntarme cosas sobre él. Yo no dije nada, lo único que la gente sabía de mí era que me llamaba Katherina y era la nieta de Jenny. Mi grupo sabía cómo se llamaban mis amigos de la ciudad y algunos detalles más sin mucha importancia. Y..., aunque yo conociera más detalles de la gente que la gente de mí, lo que me faltaba era andar contando asuntos ajenos. En cuanto Jack entro por la puerta se formó un silencio espectacular seguido de un montón de murmullos. Lo único que hizo él fue venir hacia mí y saludarme. Le presenté a mi grupo, algunos amigos que lo componían eran un año mayor así que irían en la clase de Jack. Eso era bueno, la gente no lo agobiaría tanto. Ya había bastantes chicas colado por él sin verlo, ahora que está en el instituto, serán un 99% de las chicas del pueblo; no es un 100% por que el 1% que faltas son mujeres mayores. Seguramente me acababa de ganar algunas enemigas por estar con él, que solo me saludara a mí, pero yo no tengo culpa. En fin, no conocen nuestra historia, excepto que me quedé a dormir en su casa, algunas dicen que ya nos acostamos. ¿De dónde habrán sacado esa información? Malas pécoras chismosas-.
Ese timbre dice que tenemos que ir a clase. -Reí muy divertida-. Cuidadlo bien, no es un bebé pero que no lo acosen las arpías ¿sí?
Claro. -Aseguraron Dean, Sam y Elena.
Vamos chicos, o llegaremos tarde a mates. -Nos advirtió John a Miett, Victoria y a mí.
Las clases pasan muy rápido el primer día. ¿Queréis ir al parque en media hora? -Pregunté.
-Todos dijeron que sí. Tenía 30' para dejar los libros, recoger mi habitación, ayudar a mi abuela, ducharme y cambiarme. No pensé que todos fueran a decir que sí, sino hubiera pues 45'o 1h. Jack me acompañó a casa, ya que estaban pegadas y teníamos el mismo camino para ir. Saliendo del instituto juntos me sentí fatal, la mayoría de las miradas, por no decir todas, estaban puestas en nosotros. Era muy incomodo-.
¡TERMINÉ! -Grité desde la planta de arriba.
¡Ya era hora! Me dijiste que en 25' viniera a buscarte y te estabas duchando. Luego tenías que vestirte... -Iba a decir algo más pero lo interrumpí:
-¡Exagerado! Tarde 4' porque ya bajé hace uno. Y aún no nos hemos ido. Te has enrollado echándome la bronca.
Han sido 4' no se va a acabar el mundo, todavía. -Y lo arrastré fuera de casa.
Teníamos que haber salido hace 5', a y media había que estar allí, no salir de casa. Ahora estarán esperando. -Me hecho la bronca otra vez.
Sí papá. -Dije sonriendo divertida-. Pero creo que te equivocas, somos los segundos. Mira. -Señalé el banco de la entrada del parque en el que habíamos quedado-. Solo están Dean y Elena, y por si te lo preguntas, en el grupo todos son pareja. Por eso siempre que quedemos vendrán de dos en dos.