El despertar de Casandra Lorens 1

La " chica cliché", su definición corta sería: la chica buenaza hasta el punto de ser muy tonta, virginal e inocente.

Buenaza porque sería la típica chica que no ha hecho nada malo en su vida, ni cruzar un semáforo en rojo, si no venia coches.

Tonta, la cual se deja manejar por cualquiera. no tiene decisión propia, como si fuera una muñeca.

Virginal hasta tal punto que quitaría el puesto a la madre de Jesús. Ese tema suele ser, el tema tabú para las chicas cliché.

por último, inocente, porque no saldría de su burbuja por temor a toparse con la realidad.

Esta definición encajaba muy bien en mí porque así era yo, antes del coma. Aunque todavía sigo siendo virgen. Pero de eso ya me ocuparé.

un títere para mis padres, divorciados porque no se aguantaban. dos exitosos empresarios que tienen una misma obsesión: el trabajo. Lo único por lo que viven es para demostrarse el uno con el otro, quién gana mas dinero y para echarse mutuamente las culpa, de quién fallo en la relación. Para ver quien tiene la razón, me utilizan, comprándome cosas caras o a ultima moda. En esos momentos es cuando se acuerdan de que tienen una hija. 

En el instituto, las cosas no iba a mejor. Era el objeto preferido de burla para los populares, esos del grupo de fútbol y animadoras. Bromas pesadas, alguna que otra paliza. No hacia nada, para evitarlo, lo único que hacia era llorar y rezar para que algún día cambiaran su actitud hacia mí.  Aunque todas esas bromas y palizas no fueron nada ha comparación de lo que iban a hacerme

Me invitaron a una fiesta, mi primera fiesta. Estaba ilusiona y nerviosa. En ese día creí que cambiarían las cosas, que ellos cambiarían al conocerme. Fui una ingenua total ya que el propósito que tenían era invitarme a la fiesta para drogarme y que uno de ellos pudiera tener relaciones conmigo, grabarlo y colgarlo en las redes. Todo para humillarme, pisotearme. Menos mal que lo descubrí a tiempo. Así que destrozada y hundida, llorando desconsolada, me fue a casa.

En lo que pensaba en esos momentos era que mi existencia era una ruina, así que para acabar con mi sufrimiento, cogí un bote de pastillas y me las trague todas. Fuera muerto sino fuera por la empleada de limpieza, que viene tres día a la semana. ese día le tocaba y me encontró casi yendo para la otra vida. 

En el hospital estuve un mes en coma, hasta el día de de hoy porque hace unos minutos que he despertado. Aunque mi despertar ha sido diferente porque me siento distinta, siento que algo en mi, ha cambiado. Siento que soy una nueva Casandra, una que no fuera imaginado que sería. Lo sabía porque lo único que tenia en mi cabeza era machacar a los que me habían hecho daño y no solo ha esos sino a los que vendrían en el futuro. Ser una hija de la gran puta con todos y con todo.