—Danielle— maldita voz, esta susurra y susurra, ¡no ves que quiero dormir!
—Danielle— otra vez, amigo que me esta hablando, te invito a ir a chingar a otro lado
—¡Danielle, despierta carajo!— ¡alto, llamen a la ambulancia, tráiganme un paramédico, no respiro un moco se apoderó de mi nariz!, abro los ojos de golpe —por fin— suspira Ashton
—¿¡qué te pasa idiota!?, ¿¡querías matarme!?
—Tal vez, sería muy fácil, ve a cambiarte papá nos espera abajo— dice con una sonrisa, le doy un codazo en el estómago y salgo en dirección a mi habitación, opté por unos vaqueros negros ajustados, una camiseta holgada grande y mis converse negras, medio cepille mi cabello y bajé, ahí estaban Ashton y Alex, discutiendo quién sabe qué cosa
—Buenos días— saludé
—Buen día princesa— saludó Alex y se acercó a abrazarme —vayan a desayunar o almorzar…
—¿Qué hora es?— pregunté
—Casi las dos de la tarde hija, sea lo que sea que hicieron anoche no vuelvan a dormir tan tarde— sentencia Alex, lo miro avergonzada y él me dedica una cálida sonrisa —vayan a comer algo par de raros, Ashton ya sabes que hacer luego— nos dice y camina en dirección a la salida de la mansión, me rugen las tripas y voy directo a la cocina con Ashton tras mío, nos sirven la comida y una mujer mayor de unos ¿80?, si, tiene 80, se acerca a nosotros
—así que ella es ¿Danáe?— pregunta mirándome tragar como peppa, ella sonríe y mira a Ashton que asiente, comiendo con toda la clase posible, definitivamente doy asco a su lado
—si nana, es Danáe, mi hermana
—idénticos, bueno casi, pero de seguro ella es más inteligente— le sonreí con algo de comida en la boca
—¡gracias!, ves Ashton a pesar de ser gemelos soy mejor— me empoderé, siempre es bueno burlarse de un hermano, pero no demasiado
—bien como digas table clon, termina rápido se supone que te llevaré a que te tomen las medidas del uniforme— informa, lo miro
—¿qué?, ¿uniforme?...creí que en esta maravillosa vida no había escuela o había profesores particulares, he vivido engañada toda mi vida— exageré
—Cansas por ratos, no sé cómo voy a convivir contigo un año, y si, a pesar de todo voy a una escuela, ya mueve tu culo y vámonos— dijo tomando mi brazo.
Abrí tanto la boca, ya había entrado a una boutique antes, pero no a una como esta, es increíble, Ashton me mira con burla en su rostro, él llama a una mujer, con un uniforme, es linda seguro que a Ash le gustaría, ella es bisexual, carajo como la extraño, debería hacer una video llamada con ella para presumirle esto como buena amiga que soy, ella y Ashton cruzan algunas palabras y caminan, me quedo quieta repasando todo una vez más, vitrinas con cosas de oro en almohadillas, ropa hermosa en los maniquíes, bolsos bellísimos, maquillaje caro, zapatos de todo tipo muy lindos y las paredes de un negro brillante que contrasta con los espejos y el dorado que combina
—Muévete Danáe— llama Ashton, camino en su dirección con cuidado de no romper nada, entramos en un salón con un circulito en el medio, aquí es donde me van a tomar las medidas para el dichoso uniforme.
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Tras varias risas y burlas de Ashton porque según el no tengo nada, y que nos correteáramos picándonos con agujas,…
nos echaron, si le dicen algo a Alex le diré que todo fue culpa de Ashton, además intento ligar con la mujer que nos atendía, el calienta bragas le llaman, no lo culpo, si fuera más social y menos torpe también sería una fuckgirl, pero aquí es dónde me pregunto, si hago todo eso, ¿cuándo voy a idealizar una vida con los chicos de los libros?, así que mejor lo olvido, estamos comiendo en un Mcdonald´s, muchos y muchas nos miran comiéndonos con la mirada, envídiennos somos hermosos
—deberías ser una fuckgirl Danáe
—soy Danielle, y ¿por qué?
—papá dijo que debías llamarte Danáe y así te voy a llamar, y lo otro, deberías serlo porque, si ya de por si somos atractivos—…Me miro escaneándome…—bueno uno más que el otro, tendríamos a todo él y la que quisiéramos, solo piénsalo hermana, tú, yo, un montón de placer, odiados y envidiados por muchos en la escuela dominaríamos por fin ese puto lugar— dijo idealizando todo
—solo piénsalo hermano, somos igual de atractivos porque somos gemelos, y después de todo el placer, tener sida, herpes, un embarazo no deseado, te imaginas todo eso— hice una mueca de asco al final
—le quitas lo divertido a la vida Danáe, además, para qué se hizo el condón
—y si esa mierda se rompe o se queda dentro de mí, enserio quieres un miniyo corriendo por ahí— ponderé
—Ya te veo a ti cambiando un pañal y vomitando a medio camino— ambos reímos, su celular sonó y sonrío al ver la pantalla —¿quieres ir a una fiesta?—
—depende, ¿habrá chicos lindos?
—no tanto como yo
—Si tú eres el lindo no quiero imaginar a los feos— me sacó la lengua. »Que maduro hermano, que maduro«
—¿vas o no?
—claro que voy, debo presentarme como la versión femenina de ti y arruinar tu reputación— le guiñé un ojo, el blanqueó los ojos, dejó algo de dinero sobre la mesa y salimos de ahí, afuera, Libardo, el chófer ya nos estaba esperando en el coche, la gente del primer mundo se da sus lujos la verdad, pero eso no quita que no extrañe el auto blanco corsa de mi padre, aunque era viejito era el mejor lugar para viajar, ayer mi mamá me llamó, le conté todo lo que había pasado, menos lo que escuché de Alex y Ashton, por alguna extraña razón aún quiero seguir aquí con ellos, sería divertido.
—Vamos— dijo Ashton, baje por su lado del auto y vi la casa, obviamente era otro ricachón amigo de Ashton, eran como las 11 de la noche y ya había borrach@s en el patio de la casa, me pegué como garrapata a Ashton, él saludaba a todos los chicos y chicas de por ahí, mientras que a mí me miraban raro, al entrar en la casa había incluso más personas, sudando y bailando, hacía un calor infernal, en el centro de casa había un par de sofás y ahí estaban algunos chicos miraban en nuestra dirección así que por ley son los amigos de Ashton, llegamos a su lugar, cada uno saluda a Ashton con un movimiento de cabeza