La confusión opacaba cualquier otro sentimiento que podría llegar a sentir y vaya que tenía varios en mente.
Ira.
Tristeza.
Lujuria?
Eliminé ese último pensamiento de mi cabeza antes de que fuera demasiado tarde, y me presentara en su departamento, para hacer Dios sabe que.
En realidad si sabía lo que iba a hacer, pero también sabia que me arrepentiría hasta el día que me muriera.
Fui directo a la cama, no estaba de humor para ponerme a discutir con él sobre mis avances en mi búsqueda amorosa.
La cuál estaba yendo bastante mal y si seguía así podría despedirme de mi nuevo puesto.
Intenté cerrar los ojos y conciliar el sueño. Lo necesitaba realmente. Pero no hubo manera de que pudiera detener mis pensamientos en mi cabeza.
Trate contar ovejas en mi mente hasta caer rendida , pero no sirvió, intenté con música, no tuvo ningún efecto.
Hice un repaso mental sobre lo que había sucedido aquella noche. Tal vez no había sido tan mala como creía, había conseguido el número de un cantante famoso y una posible cita.
Sonreí ante la posibilidad de volver a ver a Peter. Tenía muchas ganas de hacerlo, pero había otra cosa que tenía más ganas de hacer.
Y sabía que no debería seguir ignorando lo que mi cuerpo y corazón querían. Una noche con Jake. Después de una noche con él todos mis pensamientos se centrarían nuevamente en mi meta.
Y podría al fin dejar todo esto atrás.