Capítulo 3
*Pov Joshua*
¿Cómo me sentiría al matar un animal? ¿Una persona? ¿Qué se siente la locura misma?
Tantas preguntas y mi psicóloga no atendían mis llamadas, así que aquí me encontraba solo en mi habitación hasta que llegará Lilian
-Hola- dijo la cruzar por la puerta-
- ¿Qué tal? - dije incomodo-
- ¿de nuevo con esto? - dijo viéndome fijamente-
-Mira no te diré que me entiendas me importa una mierda si me entiendes o no solo no me fastidies no sé qué haría si llegaras a ese limité- dije-
- ¿Me matarías? - una sonrisa perversa y un brillo en sus ojos adornaban su rostro, me quedé viéndolo fijamente y tragué en seco hasta que el sonido de la puerta me regreso a la realidad dejando ver a Dania entrando en ella-
- ¿desde cuándo todos tienen llave de mi departamento? - dije-
-Desde que pierdes tus llaves- dijo Lilian respondiendo en automático entrando en el baño con una bolsa entre sus manos y Dania se tiró despreocupada directamente sobre su estómago a mi cama-
-No deberían estar aquí- dije en un susurro después de un casi eterno silenció en el que ella estaba en su celular, cuando creí que no me había escuchado me volteo a ver con una mirada… no sabía que decir, ella solía ser demasiado entusiasta, social, amable pero recientemente ha estado muy fastidiosa, durante los últimos 8 años que la conozco sé que hay momentos en los que ella actúa así, debe de tener bipolaridad o algo, no es normal esos cambios de humor y de nuevo un escalofríos paso por mi columna vertebral viendo como Lilian salía del baño viéndome con esos ojos, calculadores, fríos, distantes, perversos, acaso ella… ¿ella es como yo?, un pensamiento con esa pregunta me botó en la cabeza al instante
-Estoy hermosa lo sé- dijo volviendo y volvió a entrar al baño supongo que a probarse otra ropa, no me hubiera importado menos la ropa, para ser sinceros ni la vi, me concentré solo en el hecho de que ella podía ser como yo ¿hay alguna posibilidad de que sepa quiénes son como yo? -
- ¿Por qué no deberíamos estar aquí? - dijo Dania recordándome de la plática que acabamos de tener y de que sigue aquí-
-Dania sabes lo que soy...- dije y ella suspiro cansada-
- ¿y que eres? - dijo queriendo que lo diga de mi boca-
-Soy una psicópata- dije y ella me miro-
-Eso es lo que te dijeron…- la interrumpí-
-Soy un psicópata diagnosticado por dios Dania, deja de ser tan hija de puta Dania, No todo gira en lo que dices tú, No porque digas que no soy psicópata no lo seré-
-Bien, en todo caso de que seas…- dijo pero la interrumpí-
-Soy…- dije y ella me interrumpió-
-En todo caso de que seas…- siguió lo que iba a decir- ¿Qué es lo peor que puede pasar? - dijo y me puse a pensarlo- ¿Matarnos? ¿Tienes razones para ello? - dijo y yo la mire-
-Soy psicópata no ocupo razones- dije-
- ¿eso te lo dijo la psicóloga? - dijo con una ceja levantada-
-Me informe- dije seguro hasta que ella habló-
- ¿Dónde exactamente? - dijo viéndome-
- ¿Google? – Dije sin pensar si era lo correcto y ella enmarco una sonrisa-
-No eres un psicópata y no ocupo 5 años de psicología para saberlo- dijo segura Dania-
-No lo sabes- dije-
-Mira, bien, quieres creer que eres psicópata bien supongo que de niño te crías Thor y nadie decía nada, es igual ahora, seas o no un psicópata estamos para ti- dijo Dania y sonreí al verla volver a ser la amble Dania- ahora si vuelves a llamarme egoísta de una manera indirecta de nuevo yo misma te cortaré la lengua- dijo Dania levantándose del sofá y nos reímos, eran bromas que Dania siempre hace desde siempre y por un largo tiempo me sentía cómodo, me sentía en casa-
-Sería divertido ver eso- dijo Lilian saliendo del baño-
-Por dios Lilian no seas asquerosa, queremos comer tranquilos y en paz, deja de hablar cosas desagradables, me dolerá el estómago- dijo Dania simulando tener arcadas para vomitar-
-Tu empezaste- dijo Lilian contraatacando –
-Lo mío era fi-gu-ra-do- dijo Dania recalcando cada palabra-
-Ya, Ya, coman- dijo Ralf con la boca llena de pollo fritó- tú también chico Psicópata- dijo riendo Ralf y me di cuenta de algo que no había pensado hasta ahora, ellos no reaccionaron con miedo, ni nada por el estilo, ellos me aceptan como soy…
-Voy- dije riendo, sentándome a comer-
Ellos son mi familia