Cap. 7

Pov. Eros

Estaba frente de mi con esa sonrisa de niña buena, si tan solo supiera el error que cometió al llevarse bien con Álvaro.
– regresaste – repito sus palabras – ¿me vas a decir que el te soltó así por así?
– el y yo hablamos – me dice tranquila.
– ¿hablaron? Desde cuándo uno habla con su secuestrador que por cierto te golpe como si no hubiera mañana – le señalo diciendo lo último.
– está enfermo – susurra, yo río a carcajadas por su inocencia – me contó lo de Elizabeth.
Los recuerdos de mi hermana llegan a mi mente haciéndome sentir una punzada de dolor en el pecho y ya me puedo imaginar todo lo que le dijo.
– me imagino que te dijo que la amaba y que jamás le hubiera hecho daño ¿no? – le digo.
– si...
– y le creíste – la interrumpo.
– el...
– ¡es mentirá! – la vuelvo a interrumpir – nada de lo que te dijo es verdad ¿enserio crees que el está enfermo?
–si...
– ¡No! – la interrumpo – ¡el es un psicópata! 
–¿Que te hace creer eso?
– no hablaré de eso contigo.
– se lo que pasó pero el no podía controlarse, no pido que lo perdones solo que lo olvides.
– ¡mato a mi madre y hermana enfrente de mi! ¡no solo eso, las violó a ambas! ¡y no pude hacer absolutamente nada! – en su rostro se notaba que estaba asustada y sorprendida por mis palabras – ¿ahora entiendes por que mi sed de venganza? – ella no decía ni una sola palabra – si, creo que ahora sabes, solo quiero que te alejes de el.
– el está arrepentido – dice en un susurro.
– eres tan ingenua, el tiene un trastorno de obsesión, se obsesiona con las personas, primero fue con mi hermana y mira como término y ahora es contigo.
– yo...
– ¿sorprendida?
– no se que creer.
–bien, no me creas a mi, vete con y que le haga lo mismo que le hizo a mi hermana.
Ella no dice nada solo se gira para irse, gira el plomo de la puerta y antes de irse habla;
– me alejare de el – me dice.
Yo solo asiento y me dispongo a tomar un vaso de whisky.

Pov. Rosie

Me siento estúpida, ¿como pude creerle a el? A mi secuestrador, a la persona que mató a dos mujeres inocentes.
Me dejó caer en mi cama boca abajo pensando en como pude ser tan ingenua.
Alguien toca mi puerta y después de un "pase" un Noah y Stephen felices entran a mi habitación.
– ¡enana! – dice Noah para luego abrazarme.
– Se que no nos hemos conocido bien pero  me caes bien pero ahora mismo vine a regañarte por tu inocencia – dice Stephen.
– ¿Que pasa? – le pregunto.
– Eros me dijo que te hiciste "amiga" de Álvaro – dice enfatizando amiga entre comillas. – el es muy peligroso, es un psicópata sin sentimientos, te puede hacer creer que los tiene pero en realidad no es así.
– Eros me explico bien como fueron las cosas y creo que lo mejor sería alejarme de el – digo en un susurro.
– bien. Ahora dame un abrazo.
Sonrió por su bipolaridad y me levanto de la cama para abrazarlo.
– saben, llegue a creer un momento que los narcotraficantes eran personas muy temidas pero eres tan tierno. – le digo a Stephen.
– en realidad los narcotraficantes se muestran así delante de las personas que deben para ocasionarles miedo, pero con su familia y amigos son agradables, algunos – dice Noah.
– ¿Que tal si les cocino? – les pro-pongo.
– sería tierno de tu parte pero debes descansar – dice Stephen.
Yo solo asiento, escucho un pequeño ladrido y al mirar abajo me encuentro con Rocco.
– ¡Rocco! – lo tomo entre mis manos y comenzó a darle vueltas y besos en su pequeño cuerpo.
– estuvo muy triste cuando no estabas – dice Noah.
— yo también lo extrañe, ahora dime ¿como estas con Erika?
— esta vamos a ir a una feria ¿Quieres acompañarnos?
— eso va hacer algo de dos y yo no quiero estar de mal tercio.
— Mike puede acompañarnos.
— no tengo ningún problema en ir  con ustedes— dice Mike entrando a la habitación.
Mike me ayudo mucho esta mañana cuando llegue, estaba que me estallaba la cabeza y el me dio un calmante.
— pues ya saben, Hoy a las seis y treinta tienen que estar listos. — dice Noah.
Mi celular comienza a sonar y es número desconocido, ¿Quien será?

Llamada telefónica

– Hola – digo
– mi pequeña Rosie, soy yo, Álvaro – dice.
– h-hola – tartamudeo.
– te llamaba para que supieras que el hermano de Eros está aquí, dale ese mensaje.

Fin de llamada telefónica

Antes de poder decir algo Álvaro cuelga la llamada dejándome confundida.
– ¿Quien era? Pregunta Noah.
– Álvaro – susurro.
– ¿que te dijo? – pregunta Stephen.
– dijo que el hermano de Eros está aquí.
– tenemos que informarle eso a eros.
Stephen toma mi mano y me lleva hasta la oficina de Eros donde se encuentra el con unos documentos.
–¿cuando van a entender  que antes de entrar a un lugar de toca la puerta? – pregunta Eros.
– esto es importante – dice Stephen.
– ¿Que pasa? – pregunta.
Stephen me hecha una mirada dándome a entender que soy yo quien le dirá a Eros.
– Álvaro me llamo –le digo
–¿Que quería? – pregunta.
– me dijo que tú hermano estaba cerca – al terminar de decir esas palabras su rostro se descompone.
– joder – susurra – esto tiene que ser una broma – su mirada caen en Stephen –  no quiero que sepa donde vivo, mucho menos sobre Rosie.
– sobre Rosie sabes que si va a saber – le dice Stephen.
– pues quiero que aparte de Noah haya otra persona cuidándole la espalda.
– ¿tan malo es? – pregunto.
– demasiado – dice Stephen.

Pasamos la tarde pensando que hacer para que Erick no supiera de mi existencia, me asignaron otro hombre que acompañará a Noah a cuidarme.
Ya en la noche me fui a dormir temprano, habían pasado muchas cosas hoy y mi cuerpo exigía descanso inmediatamente.