Ashley:
Dando las 5 de la madrugada una alarma resuena en aquél cuarto violeta buscando levantar a una tímida figura entre las sábanas, una cama de caoba con detalles en violeta pastel junto a mesita de noche a juego sobre la cual se encuentra una lámpara con de estrellas con tenue luz blanca que permanece encendida cuidando fervientemente el sueño de la pequeña del Castillo de la oscuridad, un puff negro con morado en la otra esquina proseguido por un closet blanco con un espejo de cuerpo completo, y un Castillo de juguete lleno de muñecas con blonda cabellera y esbelta figura; a los pies de la cama descansan un par de pantuflas de conejito blancas. Acurrucada, en un estado de medio sueño y el cabello revuelto con saliva en su mejilla se levanta una pequeña con pijama de unicornios, calza el par de conejos, toma un uniforme marino con amarillo y avanza a una puerta de su cuarto ante la insistencia de aquel hombre que le apresura para el colegio. Pasado un rato con el uniforme medio torcido una toalla en el cabello sale la niña saca del enorme closet unas medias blancas que cubren las rodillas y zapatos negros con Correa y decorado de mariposas en los bordes; el hombre toma un peine de madera y una crema en un frasco verde para cepillar los rizos dorados tomando un par de ligas para atar su cabello en dos coletas que le cuelgan bajo los hombros. -Está listo tu desayuno, baja linda, te alcanzo en un minuto. Prosiguió a colocar dos aretes sencillos de oro en los oídos de la pequeña y besar su frente Huevos revueltos y un poco de fruta además de un jugo de naranja recién echo y un pequeño chocolate como premio sorpresa, para pasar a subir al convertible azul con la mochila decorada con una princesa.
Allen:
-ya es tarde, levántate o te bañare dormido
A regañadientes y con bostezos se levanta tambaleante el pequeño de cabello rubio rojizo, aun lleva escurriendo una línea de baba y camina sin abrir por completo los ojos trae la pijama de cohetes torcida , el cuarto del pequeño es color añil con decoración de autos, su cama en forma de Mustang tiene al costado una mesita, esta tiene encima una lámpara de noche en forma de cohete para alejar la oscuridad, aunque él decía que nunca la usaba pues el miedo era para niñas, algo de ropa tirada, al fondo un espejo grande ovalado en un armario marino, un cofre de juguetes; se escuchan sus quejidos pues no quería ir a la escuela
―me vale señor, yo no te mande a dormirte tarde ¿o sí? ―dijo el hombre de rizos rubio rojizo mientras le buscaba la ropa.
Después de un regaño leve y varios golpes a ,la puerta, salió Allen vistiendo el uniforme de pantalones azules, suéter amarillo con camiseta blanca, zapatos estilo Boston en lustroso negro; con cera para el cabello y un cepillo de metal circular, el hombre le hacía un copete alto.
―baja ya o no habrá desa...— No terminó la frase el adulto cuando el pelirrojo ya había corrido feroz al comedor devorando unos hotcakes con miel y chocolate, un pastelillo y una taza de leche chocolatada, recibiendo un regaño por sólo comer dulces y no un alimento real, corre presuroso al vehículo con la mochila de carrito a rastras siendo juzgado por su retraso.
Nath: Una cama perfectamente acomodada, cuarto en blanco con tono y muebles negros, unos dinosaurios de juguete acomodados con singular delicadeza en una pequeña repisa con el patrón de decoración, aquella cama pulcra con decorados a estilo de T-Rex, con la lámpara de noche de brontosaurio, un armario con espejo sencillo, con El patrón de colores verduzco.
Aquel niño ya se había levantado y preparado, incluso había bajado antes de que le llamaran, el era diferente, siempre fue responsable pero su mirada era triste, un desayuno delicioso se enfría en la mesa pues prefirió sólo leche con cereal, saliendo con su impecable uniforme, cabello dorado y lacio, va a buscar a los perros antes de irse, los lentes que enmarcan su rostro se ven un poco empañados, quizá una lagrima fugada, es el primero en llegar al auto, todos le preguntan dónde estaba y solo responde que fue con bobbie (uno de los perros) porque cree que se siente solo.
toma el asiento y mira Allen correr con una pieza de pan tostado en la boca y la mochila arrastrada hasta que lo ayudan a entrar. Todo el camino va mirando las pavimentadas calles.
Miss Laura: Aquella profesora de gruesos lentes y cabello atado mira durante la hora del receso los trabajos previos al día del padre, el proyecto fue hacer un dibujito de su papá, coloridos “fulanitos” con tres cabellos son la media dominante, nada extravagante o reflejo de violencia, solo detenida curiosamente en tres, rascando su cabeza y suspirando en el pupitre del aula vacía, bebe un sorbo de café buscando la interpretación pues la pequeña Ashley dibujó a un hombre barbado de mediana estatura, ojos verde con bordes cafés, cabello lacio color rubio cenizo; Allen por su parte, un hombre de cabello rizado rojizo, gran estatura, y ojos color café; mientras Nath entregó el dibujo en blanco. No era rara la diversidad de los dibujos, sino que los tres niños tenían el mismo apellido.