Capitulo 2

2 de Marzo de 2051.

-Maldito Gaido y su poca explicación sobre estos chips ¿Que se supone que debo hacer con esto?- me dije mientras miraba los chips tirados en la cama, di vueltas en mi habitación esperando que se me genera una idea de para qué sirven esas cosas -EUREKA-agarre mi morral, guarde dentro de el una linterna, una brujula, una libreta, una lapicera, me puse una campera, una gorra y unos binoculares; fui hasta la cocina por agua, agarre una cuchilla del bajomesada y luego al baño, abrí el botiquín y ahí estaban las pastillas de dormir de mi papa, agarre 2, y volví corriendo a mi habitación, puse los chips en el bolso, mire las pastillas de dormir entre mis dedos, son color verde oscuro brillante, me las pase por los labios, luego a la boca, un sorbo largo de agua y las trage; me colgué el morral en el hombro, me recoste en la cama -3, 2, 1- cerré mis ojos y al abrirlos ya no estaba en mi cuarto.

Me encontré tendido en el suelo sobre un pasto muy verde, a lo lejos se escuchaba una especie de oleaje mezclarse con los cantos de pájaros marinos, mire hacia mis alrededores, era todo verde claro, amarillo, un cielo turquesa expectacular y al respirar se sentia un olor a sal muy particular de las playas; me puse de pie, hacia mucho calor -¿Donde estoy ahora?- agarre los binoculares que estaban dentro del morral, mire hacia el oeste primero, solamente se veía el final de lo que sería una isla, arena amarillenta, el hermoso cielo turquesa lleno de nubes grises y un inmenso mar verde agua, el sol quemaba fuerte así que me corri hasta un conjunto de plantas de tronco ancho y hojas pequeñas; mire hacia el este tampoco se veía alguna ciudad o algo

-Voy a tener que caminar para donde se oculte el sol, primero voy a marcar este tronco con una X para saber que ya estuve acá- Mire la posición del sol varias veces en un corto tiempo para saber en donde se oculta, tome mi brújula entre los dedos y algo andaba mal, él sol se ocultaba en él noroeste, cuando en realidad debería hacerlo en sureste, era extraño.

Camine por una costa llena de una especie de caracoles gigantes, eran negros y ovalados con ojos brillantes, a lo lejos en el mar, vi a un ser gigante salir del agua y empezar a volar hacia la tierra más cercana como si nada hubiese pasado, era una especie de ballena con pico, patas y alas de pato, era algo que solamente un cientifico loco pudo haber creado, mientras más caminaba por la costa más criaturas impresionantes habia, hasta que me tope con un precipicio en el medio de la arena, era muy largo para poder saltarlo, el agua del mar entraba en el formando una catarata, tuve que buscar la forma de cruzarlo, ya se estaba haciendo de noche y no tenía comida, ni agua, y tampoco cerillas o algun encendedor para hacer fuego.

Había caminado aproximadamente 10Km intentado rodear el peñasco pero cada vez se hacía más largo y más profundo, la arena se había disipado y se notaba la tierra marrón oscura adornada de manchas verdes de musgo, a lo lejos solo se veia oscuridad con destellos de luz y 2 lunas, una pequeñas con anillos a su alrededor que giraba en torno a la otra más grande; las nubes grises se hacían notar hacia el otro lado acompañas de viento con olor a lluvia terrestre -¿En que lío te metiste, Orbis?- me dije a mi mismo, camine un poco más hasta llegar a una cueva, el viento cada vez se hacía más fuerte, dentro de las nubes se podía ver relámpagos violetas, me senté en la tierra, me puse mi campera y me acosté en el suelo, mirando a la oscuridad.

La noche de este lugar es muy calma, pensé en mis adentros, luego recordé que tenía la linterna en el morral, la busque al tacto y la encendí apuntando la luz hacia adentro de la cueva, había dibujos pintados en los laterales -En este mundo también hay arte rupestre, interesante- toda la cueva estaba pintada desde el suelo hasta su techo, manos, animales, creo que hacían la representación de alguna cultura antigua o un dios supremos pero luego en una pintura algo era raro, los "hombres" pintados tenían palos y le pegaban a otros "hombres", la representación de un rayo cayendo en la isla y luego un pedazo de vidrio incrustado en la roca -Que habra pasado?- la unica explicación logica que tuve en ese momento era que hubo una guerra y una bomba mató a todos los seres que habitaban esta tierra, eso podría explicar el acantilado espontáneo en la playa, decidí que ya era tiempo de dormir cuando escuche la lluvia caer en la entrada de la caverna, tenía hambre pero el cansancio me estaba matando.

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Cuartel de Seguridad de Volitare, Caelumaqua.

-Srita. Maverick, una persona desconocida estuvo recorriendo las costas de Volitare esta tarde, no sabemos cómo llegó a esa zona sin un guía- dijo un hombre vestido con uniforme azul y lentes oscuros, mirando a una pantalla donde aparece una grabación de Orbis caminando por la arena

-Busquenlo mañana, después de que la tormenta pase, Activen el código C nivel 4- contestó una mujer adulta de pelo canoso y algo rechoncha, de vestido color azul marino y un collar blanco perla.

-Si, mi señora- contestó otro hombre mirando otras pantallas

-¿Están seguros de que esta persona vino sola?- preguntó la mujer con una voz muy serena

-Si, mi señora, creemos que es un varón adolescente pero no podríamos decir certeramente que rasgo físico tiene, las cámaras de fauna y flora lo vieron caminar por toda la parte oeste de la isla, observó como una Ceteabio salía del mar, luego inspeccionó algunos ejemplares de Nigromarums desde lejos y a su comienzo marcó unos de los árboles Palma con una especie de cruz-

-Esa persona no es de aquí ¿Donde está ahora?-

-Está en está zona, cerca de las pinturas de Veteris- dijo otro hombre mirando un holograma del mapa de la isla

-Está cerca de la fosa. Es muy peligroso que esa persona ande sola por esos lados, y que no tengamos registro de quién es, mañana a primera hora quiero que lo traigan hasta acá y lo pongan bajo reclusión hasta nuevas órdenes, podría poner en peligro a todo Caelumaqua- dijo la mujer con voz firme