Relatos de Muerte con Sabor a Vida

FLOR DEL TIEMPO (CUARTA PARTE)

4

 

Después de aquella agria tarde las palabras fluyeron hasta desorbitarse. La biblioteca se volvió un lugar concurrido, siendo Ermendio Quispe el principal artífice ofreciéndose voluntariamente a dar clases y leerles cuentos a los niños. Ana Calfaccio se encargaba de ordenar los libros y dar sugerencias a los lectores.

La única vez que el padre alemán sonrió fue al ver su biblioteca atiborrada de personas.

“— quizá así los indios despierten y se den cuenta que no son menos que los españoles”

Les dijo una tarde antes de cerrar, esa misma tarde cayo una fuerte lluvia obligando a Ermendio Quispe a quedarse en la iglesia. Ana Calfaccio le preparo un cuarto y un poco de café caliente.

“— ahora entiendo tu rebeldía— le dijo con una sonrisa sujetando su café”

“— ¿has cambiado tu manera de pensar?— pregunto alegremente”

“— por completo, los libros son un arma poderosa. He llegado a comprender que los hombres no somos más que las mujeres; que los indios no son menos que los españoles; que poseemos el libre albedrio y podemos hacer con él lo que queramos, sin importar equivocarnos. Nuestra vida y libertad nos pertenecen”

— “si mi padre te escuchara ya estarías colgado del ciprés del jardín. Últimamente esas ideas se tornan peligrosas para los intereses del feudo, escóndelas en lo más profundo de tu corazón pero jamás las olvide”

Ana Calfaccio tropezó con una madera podrida y cayó en los brazos de Ermendio Quispe. Se miraron por un momento, aturdidos por la situación, lentamente Ermendio bajo la cabeza hasta depositar sus labios sobre los de Ana. Esta le correspondió.

El padre alemán noto rápidamente los sentimientos de sus dos ayudantes, sin embargo los dejo estar, el también había amado mucho tiempo atrás, no tenía ninguna autoridad para oponerse. El pueblo gozaba de una paz y abundancia de envidia, pero los ideales de igualdad que quería transmitir el padre alemán ya se coaccionaban en otros lugares siendo la guerra su método para conseguirla.

Como una mota de fuego en un pajal la revolución se extendió a todos los pueblos. Era de madrugada cuando la familia Vela decidió quemar la biblioteca, escapando de milagro el padre alemán con Ana Calfaccio sobre sus hombros. Ermendio Quispe llego a los pocos minutos con baldes de agua pero el fuego ya lo había consumido todo.

El padre alemán saco una bolsa llena de monedas de oro entregándosela a Ermendio. “— usa este dinero para protegerla y llevarla lejos”

“— no nos iremos sin usted— dijo Ana Calfaccio tosiendo y recuperando la conciencia”

“— todo está bien hija mía, no serán capaces de matar a un padre. Ahora márchense antes de que sea demasiado tarde”

Ana Calfaccio abrazo con fuerza al padre alemán, intuía en lo profundo de su ser que sería el último contacto, y no se equivocó, unos días después sería fusilado dando así su última oración.

“— hasta pronto Alexander, gracias por todo— susurro Ana internándose entre los cerros y la penumbra”

Avanzaron durante horas por las quebradas en busca de un refugio temporal, no obstante el ejército español vigilaba las rutas de escape del pueblo. Unos hombres los avistaron desde otra quebrada persiguiéndolos a balazos.

Ermendio no podía acelerar el paso ya que dejaría atrás a su acompañante, las opciones eran pocas y entre ellas figuraba lanzarse al rio, pero desde una altura tan alta la probabilidad de sobrevivir era escasa. Fue cuando a lo lejos vio un brillo peculiar, sin pensarlo cambio de rumbo.

Unas flores amarillas brillaban tan fuerte que convertían esa ladera en un pedazo de día. Atravesaron el campo deteniéndose al ver de reojo como sus perseguidores caían muertos sobre las flores. Extrañados por el silencio de la muerte regresaron sobre sus pasos hasta los cadáveres. Parecían dormir sobre un colchón de flores brillantes, pero sus corazones ya no latían

Como una sombra una anciana se irguió detrás de ellos.

“— los he estado esperando por un largo… tiempo, al fin estas caprichosas flores han encontrado a sus nuevos cuidadores”

 



#3943 en Detective
#2066 en Novela negra
#30607 en Otros
#9682 en Relatos cortos

En el texto hay: desamor, amor, esperanza y conflictos

Editado: 11.12.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.