Renacer

Capítulo XVII

Capítulo XVII

¿Cita?

 

 

 

Bastián

 

Despierto de golpe y asustado, he soñado nuevamente con el accidente, no me pasaba esto desde hace años sé siente extraño, pero nuevamente los recuerdos invadieron mis sueños, no es una sensación agradable y no es una buena manera de empezar el día definitivamente.

 

He aprendido que la vida es un círculo que gira en torno a tus actos, todo lo que haces en algún momento de tu vida se te devolverá, sea bueno o sea malo. Por ello quizás el Karma que aún vivo sea este, los recuerdos que no me dejan en paz. 

 

Si eres alguien bueno el destino te recompensará, pero si cometes errores y lastimas a personas inocentes, así no sea de manera intencional esto dará la vuelta en un momento y el lastimado serás tú porque te lo mereces. En pocas palabras esa es la ley del karma. 

 

Obra bien para que te vaya bien.

 

Me siento en la cama y suspiro las últimas palabras que le dije a Alex rondan en mi cabeza, fui una mala persona que se merece no ser totalmente feliz, pero aunque se que lo merezco no quita que no duela. 

 

Desde antes de todo este caos que se convirtió mi vida, gocé de lo que siempre quise porque al ser hijo único se me consentía enormemente, todo lo que quería lo tenía. 

 

A medida que fui creciendo, fui viendo cómo Alexandra no me era indiferente, supe —creo que desde siempre— que era la chica para mí y que con ella me iba casar, pero fui terco, me empeñe en experimentar; siempre fui un caprichoso. 

 

Quise mirar a los lados cuando frente a mí tenía lo que necesitaba, por ello me encapriche con Amanda que en realidad ni me gustaba, solo quería algo diferente, pero no funcionó como yo desee, es que me era imposible nos compararlas, se que estuvo mal, pero no podía evitarlo. Eran cosas simples como "Alex debe tener labios más suaves" "No sonríe tan bonito como Alex" "Cuando me abraza no se siente tan cálido como cuando lo hace ella" si, fui cruel por un tiempo, porque noté que a mí chiquita le dolía pero quería experimentar ¿Estaba mal querer ver otras cosas? no solo fui malo con ella sino con Amanda y aunque eso haya pasado hace muchos años siento que fue parte de que sea castigado. 

 

Esa fue la primera vez que lastime a mi mejor amiga y aunque puede que haya sido algo tonto, con su perdida todas aquellas cosas que hice que alguna vez que pudieron lastimarlas vienen a mi mente. Esos pequeños actos, palabras dichas en discusiones sin pensar porque me dejaba llevar por el calor del momento.

 

Siempre me torturó recordando cada uno de esos momentos, pero lo que no logró nunca perdonarme fue ese lapso de tiempo en el que me deje absorber por el trabajo, la dejé en segundo plano y la trate muchas veces de manera indiferente por el cansancio, pero como he dicho, el karma puede ser muy cruel y me dió el peor castigo: me la quito. 

 

No sé porque hoy amanecí nuevamente en este enigma, puede que sea por el sueño, pero lo cierto es que a pesar de que el Karma me ha castigado, el destino no ha sido del todo malo, tengo muchas cosas buenas en mi vida, empezando con Abby que también casi la pierdo en ese accidente, pero ella es un milagro, también tengo la casa que siempre soñamos y la empresa que solo me permiti soñar, solo desearía no sentirme tan solo. 

 

La sonrisa en los labios de Samantha el día anterior viene a mis recuerdos, creo que fue la primera vez que veo una mujer tan hermosa en tantos años me hace sentir cosas extrañas que tenía años que no experimentaba y al pensar ahora en mi soledad, ella aparece también en mis recuerdos. 

 

Aunque me equivoqué hace años y mi error trajo consecuencias enormes, tengo miedo de vivir una vida llena de soledad emocional, aunque tenga a Abby que me abraza con amor todo el tiempo, siento que aún me falta algo. 

 

Y ahí entra Samantha por alguna razón siento que puede ser lo que falta en mi vida. Ayer cuando le di la oportunidad de ser parte formalmente en la empresa con el contrato me había regalado tantas sonrisas hermosas que estuve a punto de invitarla a tomar una copa, pero fui cobarde ¿hoy debería intentarlo?

 

Miro el techo de mi habitación sin saber exactamente qué estoy planeando, no sé si es lo correcto, pero siento emoción. El sonido de los pasos de mi hija en el pasillo me hace saber que está despierta, y no tarda en abrir la puerta de mi cuarto y asomarse.

 

—Papí tengo hambre —le sonrió y me estiro un poco.  

 

—¿Y el buenos días dónde está? —le digo y ella ríe de forma pícara. 

 

—Buenos días papí, quiero panqueques ¿se podrá? —rio levantándome de la cama. 

 

—Vamos a ver qué puedo hacer. 

 

 

(...)

 

Soy fiel creyente que las oportunidades deben ganarse, por ello no soy de darlas fácilmente y mis trabajadores lo saben muchos de los llevan años ganándose mi confianza para que yo les de una. 

 

Tengo a varios que llevan años tratando de ascender y no lo han logrado, pero Samantha en solo unos meses logró hacerlo, ahora forma parte de la empresa, el día de ayer había firmado el contrato con una sonrisa hermosa en los labios. 

 

Esta niña es la única que me ha dejado pensando desde hace años, en la última década he tenido uno que entró desliz pero nunca consideré más haya que atractivas a esas mujeres, pero a Samantha la encuentro hermosa y no solo físicamente. 

 

La puerta de la oficina es tocada haciendo que salga de mis pensamientos, me siento extraño, como un maldito adolescente que le parece guapa la chica nueva. 

 

—Adelante —hablo fuerte para que la persona detrás de la puerta me escuche. 

 

La puerta se abre y entra la causante de mis pensamientos últimamente, la señorita Durán. Camina de esa manera confiada que me causa escalofríos, no entiendo cómo pasa de corderito asustado a leona hambrienta en solo segundos. 



#43941 en Novela romántica

En el texto hay: intriga, drama

Editado: 06.01.2022

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