Capítulo 95: Vender una empresa, comprar una empresa

An Yi no levantó la cabeza hasta que escuchó el grito, e inmediatamente se quedó mudo.

Primero miró a los chicos en el suelo y luego sorprendentemente descubrió que Gu Ning estaba parada frente a él.

An Yi sintió que era muy vergonzoso dejar que su diosa lo viera siendo tan patético, pero como Gu Ning lo había rescatado y tenía que agradecerle sin importar que tan avergonzado se sintiera.

Por lo tanto, An Yi se giró hacia Gu NIng y le agradeció con sinceridad: -”Muchas gracias, Gu Ning”.

-”De nada”, dijo Gu Ning. Miró a Hao Ran y a los otros: -”Ven y ayúdalo a ir a la enfermería”.

Al escuchar la voz de Gu Ning, Hao Ran y los otros se recuperaron, Zhang Tianping y Qin Zixun corrieron para ayudar a An Yi a ponerse de pie sin demora y luego caminaron hacia la enfermería.

Tenía moretones en todo el cuerpo y en la cara de An Yi, afortunadamente las heridas solo estaban en la piel y sin lesiones en los huesos. Estaría bien después de unos días de descanso.

An Yi ahora no podía irse a casa solo y por lo que Gu Ning propuso llevar a An Yi a casa con Hao Ran y Qin Zixun.

Hao Ran había conducido a la escuela hoy y su coche estaba aparcado en el estacionamiento fuera de la escuela.

An Yi se sintió avergonzado al principio, pero no podía irse a casa solo y además, su familia estaba en un lío en este momento y por lo que no era buena idea dejar que su familia lo recogiera.

En el camino, Gu Ning le preguntó a An Yi sobre lo que había sucedido y An Yi le contó todo después.

Al igual que lo que había dicho el niño, la madrastra de An Yi junto con el mejor amigo de su padre que era el contador de Shenghua Real Estate. Se habían fugado con más de 100 millones de yuanes en liquidez y 300 millones de yuanes en fondos que acaban de pedir un préstamo a los bancos.

Ahora Shenghua Real Estate estaba en una posición difícil y si no hubiera dinero para mantener a flote la empresa esta semana, Shenghua iría a la quiebra por completo.

Además, con la situación actual de Shenghua Real Estate y era imposible pedir dinero un préstamo a los bancos y el padre de An Yi ahora estaba tratando de conseguir dinero prestado a sus amigos, pero nadie le prestaría nada.

Nadie se atrevió a prestarle más de varios cientos de millones de yuanes.

En consecuencia, el padre de An Yi solo podía vender la empresa para pagar las deudas.

Habían varios compradores compitiendo entre sí y todos estaban tratando de comprar la empresa a un precio más bajo, por lo que el trato aún no se había cerrado y aunque la policía estaba rastreando a la madrastra de An Yi y al hombre nada había cambiado recientemente.

Al escuchar eso, Hao Ran y Qin Zixun sintieron pena por él, pero tampoco tenían intenciones de ayudarlo.

La cantidad de fondos necesarios era enorme y no podían permitírselo.

Sin embargo, Gu Ning decidió comprar Shenghua Real Estate.

Shenghua Real Estate era una de las 3 empresas inmobiliarias más grandes de City F con una poderosa red y aunque ahora podía mantenerse a flote, se recuperaría rápidamente siempre que los fondos estuvieran disponibles.

Fue mucho mejor que si Gu Ning comenzará desde el principio.

La casa de An Yi no estaba lejos de la escuela,llegaron a una zona de alta gama a los 20 minutos y aunque esta área estaba clasificada por debajo de la mansión de lujo Fenghua, se había construido hace 7 años y en los viejos tiempos, había sido la zona residencial más popular.

La familia de An Yi vivía en una villa y la villa era enorme, pero parecía vacía y habían despedido a la criada porque la empresa estaba en problemas, porque no podían pagar una sirvienta.

En el estudió del segundo piso el padre de An Yi. An Guangyao se hundió en la silla y no había nadie más en esta casa, así que estaba muy tranquilo.

Cuando escuchó el sonido de una puerta que se abría en la planta baja, inmediatamente se sentó con la espalda recta.

¿Quién?.

Nadie más, excepto él y An Yi tenían la llave de esta casa pero, ¿no estaba An Yi en la escuela?.

¿O estaba volviendo esa mujer?.

Pensó que era imposible y esa mujer no se atrevería a volver.

Con ese pensamiento, An Guangyao se puso de pie y caminó hacia afuera.

Cuando apareció al borde de las escaleras, vio a An Yi apoyado por sus dos compañeros de escuela con moretones en la cara y en los brazos. Estaba muy sorprendido e inmediatamente corrió escaleras abajo, antes de saludar a los demás y le preguntó preocupado a su hijo: -”Yi, ¿qué te pasó?”.

An Guangyao no sabía qué hacer ahora y quería revisar las heridas de su hijo, pero tenía miedo de hacerle daño.

An Yi sabía que no podía ocultarlo, así que le contó todo a su padre y An Guangyao naturalmente estaba furioso después de eso, pero no le importaba lo enfadado que estuviera y ocultó su ira por ahora. Tenía que agradecer a esos compañeros de escuela que habían salvado a su hijo primero.