Capítulo 114: ¿Descortés?

-”¿Qué?” Zhou Zhenghong se sorprendió y se sintió nervioso, hizo todo lo posible por calmarse, luego condujo más rápido y se concentró en la carretera.

Había tres hombres que tenían alrededor de 30 años en el coche detrás de Gu NIng y al ver que el coche de Gu Ning aceleraba de repente, pensaron que debían haber sido descubiertos.

-”Jefe, ¿nos descubrieron?” preguntó el hombre sentado en el asiento del conductor.

-”Probablemente”, respondió un hombre que estaba sentado en la parte de atrás con una voz profunda y desagradable.

-”¿Seguimos persiguiéndolos?” preguntó un hombre que estaba sentado en el asiento del pasajero.

-”¿Por supuesto, por qué no? No podemos dejar que se vaya con tanto dinero”, dijo el hombre con firmeza y codicia en sus ojos. Por lo tanto, continuaron siguiendo el coche de Gu Ning y el conductor era evidentemente hábil, los seguía de cerca y parecía muy difícil para Zhou Zhenghong deshacerse de él.

Gu Ning frunció el ceño con disgusto.

Cuando abandonaron el área densamente poblada y se encontraban en una parte relativamente remota de la carretera, Gu Ning le dijo a Zhou Zhenghong que detuviera el coche. -”Creo que probablemente no podamos deshacernos de ellos y estacionar el coche junto a la carretera. No podemos permitir que nos sigan hasta el final y tenemos que lidiar con eso ahora”.

-”Jefa…” Zhou Zhenghong estaba un poco preocupado y aunque sabía que Gu Ning era poderosa y fuerte, no tenía la capacidad de esos hombres. ¿Y si fueran más poderosos que Gu Ning?.

-”Relájate, estará bien”, Gu Ning entendió que Zhou Zhenghong se preocupaba por ella, por lo que no lo culpó por dudar de su decisión. Zhou Zhenghong también sabía que nadie podía cambiar la decisión de Gu Ning una vez que ella había tomado una decisión y por lo que sólo podía obedecer su orden.

Zhou Zhenghong detuvo el coche y quienes los habían estado persiguiendo se sintieron desconcertados y sin importar lo que hubiera sucedido, esa era una oportunidad para ellos, inmediatamente estacionaron su coche frente al de Gu Ning en caso de que intentarán huir.

-”Tío Zhou, puedes quedarte en el coche”, ordenó Gu Ning con determinación y ella salió del coche, ya se había cambiado sus tacones altos por un par de zapatillas deportivas para mayor comodidad.

Zhou Zhenghong estaba preocupado por Gu Ning, pero no se atrevió a desobedecer su orden y además, sabía que solo sería una carga si salía y solo podía rezar para que Gu Ning estuviera a salvo.

En el momento en que Gu Ning salió del coche, tres hombres altos y voluminosos caminaron hacia ella. Gu Ning usó inmediatamente sus Ojos de Jade para ver si llevaban armas.

Afortunadamente, no tenían armas y Gu Ning ahora estaba completamente segura de que ella ganaría.

Esos hombres no esperaban que una mujer saliera del coche, caminara hacia ellos y pareciera tan tranquila. Estaban muy sorprendidos y aun así creían que sería muy fácil para ellos lidiar con una mujer soltera y el hombre estaba escondido en el coche. Pensaron que debía estar demasiado asustado para salir.

-”Danos todo tu dinero y materias primas o de lo contrario, aprenderás la lección”, un hombre la amenazó y aunque no estaban seguros de su había más jade en el resto de las materias primas, habían sido testigos de que Gu Ning había cortado un jade tras otro y creía que era muy posible que el resto de las materias primas también tuvieran jade en su interior. Por supuesto que no se lo perderían.

-”¿Oh, cómo?” Gu Ning tiró de la comisura de los labios, levantó la ceja con despreció y ella no los tomó en serio.

Esos hombres estaban enfadados por la actitud de Gu Ning y un hombre alzó la voz: -”¿Nos lo vas dar o no?”.

-”Si, lo deseas vengan y consígalo ustedes mismos, pero déjeme advertirle primero. ¡Si no quieres morir, vete ahora mismo!”. Dijo Gu Ning.

-”Wow, entonces veamos que tienes”, diciendo eso, los tres hombres caminaron hacia Gu Ning y sin embargo, antes de que pudieran ir más lejos, de repente se detuvieron e incluso dieron un paso atrás rápidamente y miraron a Gu Ning con miedo en sus rostros.

Gu Ning no quería perder su tiempo y energía peleando, por lo que sacó directamente un arma.

Les apuntó cuando se acercaban.

Esos hombres estaban asustados y aún dudaban de que el arma fuera real, Zhou Zhenghong también estaba aterrorizado y tampoco podía creer que el arma fuera real. No fue fácil conseguir una real.

-”No, no intentes atemorizarnos con una pistola falsa”, dijo un hombre y no se atrevió a dar un paso al frente.

-”Pruébalo, si quieres saber si es real o no”, dijo Gu Ning con una cara amenazadora, el arma estaba cargada y los tres hombres retrocedieron horrorizados.

¿El arma era real?.

-”¿Qué, qué debemos hacer ahora?”preguntó un hombre con nerviosismo y si el arma fuera real, podrían terminar muertos.

-”¿Qué más podemos hacer? Aunque queremos dinero, no queremos morir por él. ¡ve,vuelve ahora!”, dijo otro hombre resignado y querían el dinero, pero no estaban dispuestos a morir por él, en consecuencia regresaron a su coche y escaparon de inmediato.