Capítulo 184: ¿Puedes llevarme al aeropuerto?

Después de todo, Gu Ning era una estudiante de último año que iba a tener sus exámenes finales una semana después y asistirá al Examen Nacional de Ingreso a la Universidad después de varios meses.

-”Está bien ¡Soy tan excelente estudiando ahora!” Gu Ning bromeó, pero era la verdad y estaba segura de que obtendría buenas calificaciones incluso si faltara a todas las clases si sus profesores le permitieran hacerlo.

-”¡Jajajajaja, muy bien! Te recogeré en la mañana pasado mañana”, se rió Zhou Zhenghong y por supuesto, creía en Gu Ning y ella era una gran persona con una habilidad todopoderosa en su opinión.

Gu Ning sabía que Leng Shaoting escuchó la conversación entre ella y Zhou Zhenghong, pero no le importó y en cambió, ella le dijo: -”Pasado mañana me ocuparé de algo en la Ciudad G”.

-”Bueno, te iba a decir que también estaré fuera el fin de semana”, respondió Leng Shaoting.

-”¿Cuándo?” Preguntó Gu Ning y ella no quería que él la dejara.

-”Está programado para el sábado, pero como te vas el viernes, yo también me iré el viernes”, dijo Leng Shaoting y deliberadamente dejó en claro que no quería quedarse aquí sin Gu Ning.

Gu Ning no sabía qué decir, pero se sentía feliz en su corazón.

-”¿Podemos cenar juntos mañana por la tarde?” Preguntó Leng Shaoting.

-”La tienda de materiales de construcción de mi tío abrirá mañana y me temo que no seré libre mañana”, dijo Gu Ning.

Leng Shaoting asintió y parecía un poco decepcionado, lo que hizo que Gu Ning se sintiera mal y después de pensarlo un segundo, agregó: -”Mi avión despegará a las 8:30 am. ¿Me puedes llevar al aeropuerto?”.

Al escuchar eso, los ojos de Leng Shaoting se iluminaron de inmediato. -”¡Seguro!”.

Después de la comida, regresaron lentamente a Fenghua Luxury Mansion y Leng Shaoting acompañó a Gu Ning hasta la puerta de la zona G. No se fue hasta que Gu Ning desapareció de su vista.

Jiang Xu estaba en casa no antes que Gu Ning. Le dijo a Gu Ning que la tienda abriría mañana y todavía no conocía a muchas figuras importantes, por lo que no tenía la intención de llamar mucho la atención.

Gu Ning en cambio, no quería que la ceremonia de inauguración fuera aburrida. Más tarde llamó a An Guangyao y le dijo que enviará dos cestas de flores en nombre de Shenghua Real Estate para felicitar a Jiang Xu.

También le dijo a Hao Ran y a los demás en su grupo de WeChat y ellos también estarían allí mañana, An Qian también recibió una invitación y estuvo de acuerdo con rapidez.

En cuanto a Qin Yifan, Gu Ning pensó que era mejor que no lo invitara, porque sería vergonzoso.

Sin embargo, en ese momento, la familia de Qin Zixun estaba en la casa de la familia Qin y estaban hablando en el pasillo después de la comida.

Qin Zixun no sabía que había pasado entre Qin Yifan y Gu Ning por lo que preguntó directamente: -”Oye, la tienda de materiales de construcción de la familia de nuestra jefa abrirá mañana. ¿Asistirás a la ceremonia?”.

Al escuchar eso, Qin Yifan se sorprendió y no tenía idea de que la familia de Gu Ning iba a administrar una tienda de materiales de construcción.

-”¿Jefa? Suena como la palabra de un matón. ¿Te uniste a una pandilla en tu escuela?” El padre de Qin Zixun, Qin Haozhi preguntó seriamente y como trabajador gubernamental honesto, odiaba a las pandillas.

Qin Zixun entendió el temperamento de su padre y por lo que inmediatamente le explicó: -”¡Por supuesto que no! Somos un grupo de buenos amigos y hay una chica que es extremadamente buena peleando, así que la llamamos nuestra jefa”:

Al escuchar eso, la familia Qin volvió a estar disgustada y la madre de Qin Zixun, Lu Hanlan lo regaño: -”Zixun, el examen de ingreso a la universidad nacional está a la vuelta de la esquina. ¡Deja de jugar todo el día y céntrate en estudiar! Si no logras ingresar a una universidad prestigiosa, nuestra familia se avergonzará”.

Lu Hanlan valoraba más la reputación de su familia. Muchos de los hijos de sus amigas habían asistido al examen el año pasado y todos habían sido admitidos en una prestigiosa universidad. Y si Qin Zixun no pudiera hacer lo mismo, ¡sería una vergüenza para la familia Qin!.

Hablando de estudiar, Qin Zixun estaba enfadado.

Qin Yifan se alejó por un tiempo y luego regresó con una caja de madera en sus manos. Era tan grande como la mitad de una caja de zapatos y se lo entregó a Qin Zixun: -”Estoy ocupado mañana. ¡Ayúdame a enviarle estas valientes tropas de oro”.

Quería ir, pero no fue invitado y además, tampoco sabía cómo enfrentarse a ella.

-”¿Qué? ¿Las valientes tropas de oro? ¡Estaba hecho completamente de oro puro y valía más de un millón de yuanes!” Qin Yiqing se sorprendió y el resto también estaban sorprendidos

Normalmente, los obsequios para la ceremonia de inauguración estaban al precio de 12 mil yuanes como máximo y el regalo de Qin Yifan era demasiado caro.

Qin Yifan lucía una sonrisa irónica: -”No creo que sea demasiado y la invité a divertirse en la fiesta de cumpleaños de papá el otro día, pero ella envió una antigüedad por valor de varios millones de yuanes y un millón de yuanes no es nada para ella”.