Capítulo 837: Lo más importante es que le gusta a Shaoting

Muchos actores que deseaban convertirse en un tema candente se sintieron bastante enfadados porque la Diosa Gu frecuentemente ocupaba la atención de la gente. Al mismo tiempo, también quedaron sorprendidos por su extraordinaria habilidad.

Cuando se divirtieron lo suficiente

Gu Ning, Zhang Zikai y Su Anya se fueron juntas.

Al salir

Zhang Zikai y Su Anya se convirtieron en el centro de atención de la gente, porque ambas llevaban una muñeca grande del tamaño de ellas.

-”¡Cariño, yo también quiero una muñeca de ese tamaño!”, le dijo una chica a su novio.

-”¿Por qué quieres una muñeca tan grande?”, preguntó su novio.

-”¡Puedo dormir con ella en mis brazos!”, dijo la niña.

-”¡También puedes quedarte dormida abrazándome”, dijo su novio.

La joven pareja mostró su cariño.

-”¡Aunque estoy soltera, tengo muñecas!” Su Anya dijo con molestia.

-”¡Yo también tengo muñecas!” Zhang Zikai estuvo de acuerdo.

Gu Ning sonrió y luego se dijo a sí misma que tenía a Leng Shaoting. Sin embargo, Leng Shaoitng no la había contactado durante mucho tiempo y ella no sabía cómo iba su tarea ahora. Ella se preocupaba por él, pero sabía que no podía pedirle detalles sobre su tarea porque era confidencial.

Para sorpresa de Gu Ning, Leng Shaoting finalmente la llamó cuando regresó al hotel.

Leng Shaoting le dijo que ya estaba libre y le preguntó dónde estaba.

Gu Ning le dijo que llevaría a sus amigas de regreso al hotel Bluesky y Leng Shaoting dijo que podía ir a recogerla. Gu Ning estuvo de acuerdo.

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Gu Ning no acompañó a Zhang Zikai y Su Anya a sus habitaciones, sino que fue a devolver el coche antes de esperar a Leng Shaoting en el pasillo.

Al ver a Zhang Zikai y Su Anya regresar con una muñeca grande en sus brazos, las chicas a su alrededor sintieron envidia y siguieron mirándolas.

 ̶C̶u̶a̶n̶d̶o̶ ̶Z̶h̶a̶n̶g̶ ̶Z̶i̶k̶a̶i̶ ̶f̶u̶e̶ ̶a̶ ̶v̶e̶r̶ ̶a̶ ̶s̶u̶ ̶p̶r̶o̶f̶e̶s̶o̶r̶ ̶c̶o̶n̶ ̶l̶a̶ ̶m̶u̶ñ̶e̶c̶a̶ ̶g̶r̶a̶n̶d̶e̶

Su profesor le preguntó con insatisfacción: -”¿Por qué compraste una muñeca tan grande? ¿No sabes que no conviene traerlo de vuelta?”.

-”No lo compré yo misma; ¡La Diosa Gu la ganó en los dardos!” Dijo Zhang Zikai.

-”¿Lo ganó en los dardos?”. Su profesor se sorprendió. Conocía las reglas de los dardos. Si uno quería ganar el muñeco, debía acertar el punto rojo con todos los dardos.

¡Gu Ning fue tan increíble!.

El profesor solo sabía que Gu Ning era una exitosa mujer de negocios y no sabía que había salvado la vida de muchas personas, de lo contrario, estaría más que sorprendido.

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Zhang Zikai regresó a su habitación. Se quedó en la misma habitación que Song Siyao. Aunque no se llevaban bien, eran las dos únicas chicas que venían de la capital, por lo que debían permanecer juntas.

Song Siyao estaba haciendo ejercicios de matemáticas en la habitación en ese momento. Era arrogante y egocéntrica, pero también era buena estudiando, especialmente matemáticas. Después de todo, ella era una de las representantes de la capital.

Song Siyao se quedó muda por un segundo en el momento en que Zhang Zikai entró con una muñeca grande. -”¿Por qué todavía te gustan las muñecas a tu edad?”, dijo con despreció. Sin embargo, a ella también le gustaban las muñecas.

Zhang Zikai la ignoró y luego hizo sus propias cosas. Song Siyao también cerró la boca.

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Gu Ning había esperado en el pasillo durante 10 minutos cuando llegó Leng Shaoting.

Al ver a Leng Shaoting llegar solo, Gu Ning preguntó casualmente: -”¿Por qué estás aquí solo? ¿Dónde están los demás?”.

-”Fueron a ocuparse de sus propias cosas”, dijo Leng Shaoting.

Gu Ning entendió que Xin Bei debió haber ido a ver a Cao Wenxin y Leng Shaoting debió haber abandonado a Xu Jinchen.

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Gu Ning sentía simpatía por Xu Jinchen.

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Habiendo sido abandonado por sus hermanos cercanos, Xu Jinchen se sintió bastante triste, pero aún así tuvo que regresar solo al hotel.

No estaba dispuesto a quedarse solo en el hotel. Así que primero fue a cambiarse a su habitación y luego fue a reunirse con sus amigos para tomar una copa. Sin embargo, se topó con un rostro familiar en la puerta de la casa club.

-”¡Hola!” Zi Beiying se sorprendió al ver a Xu Jinchen. Se sorprendió, no porque Xu Jinchen estuviera aquí, sino porque Leng Shaoting debía estar aquí si Xu Jinchen aparecía.

-”¡Hola, señorita Zi!” Xu Jinchen también se sorprendió al ver a Zi Beiying en la ciudad B. Fue pura coincidencia que Zi Beiying visitará la ciudad B.