Capítulo 939: Detención Penal

Aunque fue muy doloroso, Fan Sixuan se negó a mostrar sus verdaderos sentimientos frente a su familia, por lo que fingió estar bien. -”¿Cómo te atreves a abofetearme en la comisaría? ¿No tienes miedo que te detengan?”.

-”Tú…”

ᴀʟ ᴇsᴄᴜᴄʜᴀʀ ᴇsᴏ

El padre de Fan Sixuan entró en pánico y se arrepintió. Solo se atrevió a desahogar su ira contra Fan Sixuan, pero le tenía miedo a la policía.

Después de mirar a su alrededor y asegurarse de que no hubiera policías a su lado, el padre de Fan Sixuan se sintió aliviado.

-”¡No asustes a papá!” Fan Siping dijo.

-”¡Eres demasiado tonot para saber el resultado de violar la ley! Es ilegal golpear a otros, especialmente en la comisaría”, dijo Fan Sixuan.

-”Tú…” Fan Siping estaba enfadado, pero aún así respondió. -”¿Y qué? Los policías no pueden vernos”.

-”¿De verdad? ¿No sabes que existe algo llamado cámaras de seguridad?” Fan Sixuan señaló una esquina del techo. -”Hay una cámara justo encima de tu cabeza”.

ᴀʟ ᴇsᴄᴜᴄʜᴀʀ ᴇsᴏ

Fan Siping se asustó y cerró la boca.

-”No quiero perder el tiempo discutiendo contigo. Simplemente danos tu dinero y la llave de tu casa”, dijo el padre de Fan Sixuan en tono dominante.

-”¡Olvídalo! No te daré nada”, dijo Fan Sixuan con determinación.

-”Tú…” El padre de Fan Sixuan volvió a levantar la mano con ira. Quería abofetear una vez más, pero pensó en la cámara de seguridad y tuvo que dejarla.

נυѕтσ єη єѕє мσмєηтσ

Un policía se acercó, lo que asustó a los padres de Fan Sixuan y a Fan Siping. Pensaron que el policía vino porque vio que habían abofeteado a Fan Sixuan.

En un instante, los tres bajaron la cabeza.

-”El tiempo se acabó y deberían irse ahora”, dijo el policía.

Gracias a la cámara de seguridad de la habitación, los policías de fuera pudieron oír y ver la situación en el interior.

Aunque sabían que Fan Sixuan era odiosa, todavía sentían simpatía por ella después de presenciar lo que sus padres le habían hecho. Por lo tanto, un policía se acercó en el momento en que el padre de Fan Sixuan la abofeteó.

-”¿Podemos quedarnos un rato más? Todavía necesitamos…”, suplicó el padre de Fan Sixuan, tratando de complacer al policía con una sonrisa en su rostro.

-”No, son las reglas”. El policía lo interrumpió.

Los padres de Fan Sixuan y Fan Siping estaban decepcionados por no haber recibido el dinero y la casa, pero tuvieron que irse bajo la mirada del policía.

-”¿Qué debemos hacer ahora”¿?” Dijo la madre de Fan Sixuan cuando salieron de la comisaría.

-”No esperaba que la pequeña zorra se atreviera a negarse a darnos su dinero y su casa”. El padre de Fan Sixuan estaba enfadado, pero tampoco sabía qué hacer. A sus ojos, él era el padre de Fan Sixuan. Él le dio la vida y la crió, por eso debería escucharlo. Incluso si él le ordenaba que se matara, ella debería matarse sin ninguna queja.

Fan Siping, por otro lado, era el niño de sus ojos y lo habían mimado muchísimo. Todo lo que sabía era jugar y vivió una vida desordenada.

Aunque era un inútil sus padres nunca lo criticaron. Siendo ese el caso, nunca creció y no tuvo sentido de responsabilidad.

Sólo iba a casarse porque su novia estaba embarazada. Su familia no se atrevió a molestar a la familia de su novia porque tenían un poco de poder, por lo que tenían que ser responsables de ello.

-”Papá, mamá debéis solucionar este problema. Fan Sixuan tiene mucho dinero y su casa vale más de 10 millones de yuanes”, dijo Fan Siping. También pensó que el dinero y la casa de Fan Sixuan deberían ser suyos.

-”No te preocupes, encontraré una manera”, dijo el padre de Fan Sixuan para consolar a su hijo.

…

Leng Shaoting se fue después de permanecer en la Ciudad B durante dos días. Regresaría para la boda de Gu Man,que solo faltaban cuatro días.

 ̶D̶e̶s̶p̶u̶é̶s̶ ̶d̶e̶ ̶q̶u̶e̶ ̶L̶e̶n̶g̶ ̶S̶h̶a̶o̶t̶i̶n̶g̶ ̶s̶e̶ ̶f̶u̶e̶

Gu Ning fue a visitar a Tang Xiaoxiao.

Tang Xiaoxiao ya se recuperó mucho y le resultó fácil cubrir las quemaduras con maquillaje en este momento.

Gu Ning le dijo que se reuniera con Lu Xiao en la capital y le dijo que le había informado a Lu Xiao de antemano.

ᏝᏬᏋᎶᎧ

Gu Ning fue a encontrarse con Yu Zi para conocer la última situación en Charm. Aunque ella era la gran jefa, aún debía estar pendiente del desarrollo de sus negocios.

Charm fue muy rentable y popular como siempre. Mucha gente había reservado vestidos hechos a medida de Charm por lo que Yu Zi estaba muy ocupada estos días. Ni siquiera tuvo mucho tiempo para una cita.

Yang Ziqian no estaba contento de ver a Yu Zi tan ocupada, pero no pudo detenerla porque era su trabajo y ella lo disfrutaba.