CAPITULO 2 CRUDA REALIDAD

En mi cuento no hay un príncipe, sino un Rey Malvado
que me devolverá a mi cruda realidad.
 

Al ser la hora pico, el tráfico estaba lento e inevitablemente cuando llegaron al edificio Di Polo donde estaba el estudio del afamado fotógrafo, contaba ya con 20 minutos de retraso. Ahora si ardería Troya.

- Suerte amiga con tu neerdental – se despidió de ella Sharon con un beso en la mejilla.

- Nos vemos más tarde, y te cuento.

Al entrar al estudio lo primero que noto era mucho movimiento y caras llenas de estrés y una chica que debía ser modelo le dirigió una mirada despectiva y ella le volteo la cara.

- Eres tu Fiorella Marchetti- le pregunto una diligente mujer de unos 30 años.

- Si soy yo, estoy optando a la plaza de fotógrafa.

La mujer que sostenía una carpeta en su mano, se puso incomoda y Fiorella anticipo que no el tenia muy buenas noticias.

- Siento decirte que el señor Ramsés rechazo tu asignación, debí llamarte pero he estado tan full que lo olvide

- ¿Cómo que me rechazo?- exclamo desconcertada- ¿pero vio mi portafolio? el que le envié.

El que la asistente del fotógrafo se quedara muda y con cara de mortificación fue la respuesta obvia.

- No lo vio ¿cierto?-la increpo muy molesta, porque una cosa era rechazarla porque no le había gustado su trabajo, otra muy diferente hacerlo a ciegas. Ahora pensaba que solo se comprometió por amistad con Alessandro Greco pero igual ella jamás tuvo una oportunidad real y eso si la enojaba sobremanera.

- Mira mi jefe tiene un carácter muy especial, así que amiga creo que sales ganando al irte de aquí.

En ese momento si entro en escena el pintoresco personaje, con cara de pocos amigos, gritando a doquier y la modelo con cara de presunción también se amedrento así como todo el personal se apuró a cumplir las órdenes que su jefe repartía a diestra y siniestra.

Tenía un tono autoritario, sus ademanes también lo eran y era dueño sin duda de unos preciosos ojos grises y penso que seria el modelo perfecto para una exhibición de fotografía y que llevará el.titulo de  "el Rey Malvado" quien se habia ganado ese honor y entiendase el sarcasmo debido sin duda seria debido a su carácter agrio y amargo, pero con un toque de misterio y una oscuridad que atraía.

Fiorella noto que la mujer a su lado palidecía y se apuró a decirle.

- Vete niña, porque si sabe que no te avise correré con las consecuencias.

que era lo peor que pudiera pasarle, ¡matarla! a juzgar por su semblante no lo dudaba.

Sin embargo lo unico que ella tenia claro es que este sujeto la había rechazado sin ni siquiera mirar su trabajo y eso de su parte era una total falta de ética profesional.

- Okey no hay ningún problema, y tienes razón es una suerte no trabajar con un hombre tan déspota, malgeniado, prepotente y malvado.

Fiorella estaba tan enojada que no noto que lo dijo en tono muy alto y como estaba de espaldas al sujeto odioso tampoco noto que él se había acercado, solo ver la cara de poema de la asistente le indico que algo no andaba bien y al giro en su eje se encontró frente a frente con "el Rey malvado"

- Te falto algún otro calificativo.

Si este tipo creía que iba a ser igual a todos los demás, que dejaban de respirar por su presencia, pero ella jamás había tenido filtro en la lengua.

- Muchos- reconoció con valor.

La chica a su lado se quedó literalmente sin color que huyo de inmediato y aunque se sintió mal por ella pero estaba tan furiosa con este déspota hombre que no se quedaría callada.

La modelo odiosa se acercó y no sabía si para congraciarse con su jefe o porque realmente era una odiosa de primera expreso es tono petulante y escandalizado.

- Y este desacierto de la moda quien lo dejo entrar, sáquenla antes que Ramsés le dé un soponcio.- expreso escandalizada la modelo.

El personaje en cuestión guardo silencio pero el que no estuviera apropiadamente vestida no es lo que le importaba, sino notar lo delgada y pálida que se veía aquella chica.

Sin embargo no era su problema.

Ramsés Masseratti no cambio su expresión dura, sus ojos se achicaron y con tono odioso le grito:

- Gina vete a casa, hoy no voy a fotografiarte.

- Pero necesito que terminemos hoy-chillo como niña pequeña y malcriada.

- Cuando aprenderás que aquí no se hace lo que tú quieres-le respondió con su acostumbrada arrogancia y falta de tacto- bájale a tus ínfulas y la próxima vez no te metas en lo que no te incumbe.

La modelo salió despavorida para satisfacción de Fiorella que se atrevió incluso a sacarle la lengua cuando creyó que Ramsés no la veía, pero si lo hizo y su mirada fría, odiosa, y malhumorada la arropo.

Nota mental: El sujeto apodado "Rey Malvado" ciertamente no lo hizo por defenderla, simplemente no la llevaba con nadie

- ¿Quién diablos eres tú?-cuestiono el centrando su atencion en ella y recorriendola con la mirada como el león que estudia a su presa.

Fiorella suspiro profundo tratando de calmar los latidos de su corazón porque aunque aparentara valentía, este hombre sin duda la atemorizaba y también la inquietaba de una manera inesperada.

- Y bien- demando el . no me dirás que te comieron la lengua los ratones.

¡GROSERO!, con letras mayúsculas pensó ella internamente.

Ahora era el turno de ella de recibir toda retahíla del extraño personaje pero asi se estuviera muriendo de temor no se lo demostraría. Primero salvar su dignidad ante todo.

- Fiorella Marchetti y vine por una plaza de fotografía –señalo resaltando las palabras- pero ya sé que me rechazo así que me voy y no crea que lo lamento, quizás es lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo.

Cuando se volteo y camino 2 pasos su voz odiosa la detuvo.