Capítulo 2: Rosa azul

Rosa azul: Febrero.

—¿Cómo entraste a mi oficina? —Mas que enojado, KyungSoo estaba asombrado.

—¿Te gustó mi regalo? —Do miró la rosa azul sobre su escritorio. —Significa confianza y afecto, transmite sentimientos relajantes, tranquilizadores y, debido a tu importantísima junta fue la primera rosa que pasó por mi cabeza.

KyungSoo, un sobresaliente en su campo, ahora tenía la flor en sus manos, exactamente como JongIn lo tenía a él. —Entonces, ¿intentas decirme que no me estrese?

—Ves que las flores hablan por mí. —La risa de JongIn sobrepasaba las mejores melodías. Bueno, en realidad, para KyungSoo, JongIn sobrepasaba cualquier límite. Quizá Soo haya puesto en un pedestal de oro a Jong. ¿Qué pasaría si hubiera un remezón? ¿La estatuilla caería o seguiría intacta?

—¡KyungSoo! —La puerta de la oficina se abrió abruptamente. —Ya llegaron. —BaekHyun lucía tenso y eso a KyungSoo le creó desconfianza. Apretó con sus dedos el tallo de la flor deseando que toda esa tranquilidad se la transmitiera en un segundo.

—Mi reunión empezará, gracias y adiós. —Fueron las palabras que salieron amontonadas del de los labios de corazón.

JongIn al otro lado de la línea sonrió esperanzado. Para Kim, cualquier persona que pudiera expresarse libremente delante de un público era un héroe. Él era incapaz y amaba la valentía de esas personas, una de ellas era su más reciente amigo; Do KyungSoo.

Tecleó rápidamente: "Festejemos esa gestión de liquidez de la empresa en mi departamento, tengo pizza congelada y cerveza".

A pesar que JongIn no entendiera mucho del trabajo de KyungSoo, quería mostrarle que sí le prestaba atención a cada cosita que le contara. Aunque, ahora que lo recapacita cree que la reunión se debe a una búsqueda de financiación.

A las horas, KyungSoo le respondió con un corto mensaje de voz: "Estoy en camino".

Detrás de esas tres palabras se escondía un maremoto de sentimientos. Pero KyungSoo solo era elocuente en cosas que no tuvieran que ver con su vida privada y JongIn había traspasado sus límites, haciéndose un lugar en su vida privada.

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Cuando JongIn abrió la puerta, le sorprendió el hecho de ver la flor que eligió para KyungSoo dentro de un elegante florero, el cual, era más caro que su departamento, su ropa, y su riñón.

—Veo que te gustó mucho mi regalo.

KyungSoo rió bajando la mirada. —En realidad, cada flor que me has dado las he cuidado.

—Apuesto a que no recuerdas cinco nombres distintos y sus significados. —Kim lo retó mientras se dirigían a la pequeña sala.

—Acacia blanca es elegancia, —Soo se sentó en el mullido sillón. —adelfa es belleza, amapola amarilla es éxito, —Vio como JongIn en la cocina sacaba la pizza para calentarla. —bromelia es resistencia y brezo blanco es protección.

—Hay algo muy curioso —comentó el experto en flores mientras se dirigía a la sala con dos latas de cerveza en mano. —No has mencionado ninguna rosa.

La vista antes pérdida de KyungSoo corrió a fijarse en JongIn. —¡Me has dado dos! —exclamó. —La amarilla y ésta. —Balanceó con delicadeza el florero.

—Las rosas suelen ser las flores que las personas más recuerdan. —Le ofreció a KyungSoo una lata.

—¿Por qué? —preguntó al tiempo que abría la bebida.

—Se fijan en lo superficial. —JongIn tomó asiento a su lado. —Todos aman la belleza superficial, las rosas son encantadoras, pero en el prado hay más para ver y elegir. Es una pena.

—Si las rosas son superficiales, ¿por qué me las das? —increpó.

—Cada flor que te he entregado, ha tenido un motivo y siempre te lo he explicado. Pero, independientemente de eso, hago mi propio camino con las rosas. —KyungSoo parecía no entender y JongIn quería morderse la lengua, ¡por nada del mundo revelaría su plan! —Es un proceso..., este camino de rosas llegará a su final y solo ahí entenderás.

—¿Cuándo me las darás?

JongIn bebió. —Todo a su tiempo, Sweetie pie. 

JongIn siempre fue una persona apasionada. Y su pasión lo condenó, pero en la condena él era condenadamente feliz. Kim tenía una estrategia y sus bellas flores lo apoyaban. Y como le dijo a KyungSoo en febrero, todo a su debido tiempo. Porque, ¿qué ganas adelanto las cosas? ¿qué ganas haciendo todo apresurado? En la vida como en la cocina siempre hay que ir a fuego lento.

Holi