El campo de Girasoles

Estaba medio en Shock pues Tener a Chloe increíblemente bien arreglada y hermosa a las 4 de la tarde un sábado no era tan normal como creería.

-Vengo a llevarte de viaje nuevamente señorita Regan- me tomó de la mano y me sacó del apartamento vendándome los ojos.

Supuse que este era el por qué Bianca me había pedido que me arreglara y no por que quería salir conmigo a comer esa noche.

No veía absolutamente nada pero era obvio que me llevaban en un auto.

Nadie dijo ni media palabra pero una serie de canciones que reconocía a la perfección sonaba en los parlantes del vehículo.

Era una lista de reproducción que tenia Chloe en su celular con canciones que ella me dedicaba.

Negué sonriendo ante las ocurrencias de la pelinegra.

-No tienes igual White- dije riendo y apoyando mi cabeza en el respaldar de mi asiento.

Chloe tenia nuestras manos entrelazadas por lo que supuse que alguien más iba manejando.

El viaje no duró más de cuarenta y cinco minutos. Y cuando llegamos fui llevada a una clase de salón repleto de velas.

"Only you" mi canción favorita y la primera que Chloe me había dedicado sonaba por todo el salón.

En las paredes habían fotos de nosotras dos de gran tamaño y las velas mostraban el camino por un pasillo hacia una puerta cerrada.

Chloe aún tenía mi mano entrelazada con la de ella pero se había quedado unos pasos atrás de mi.

Escuché el disparo de un flash y me volví con cuidado. De la cámara instantánea de Chloe estaba saliendo una fotografía, de sorpresa, como hacía cuando estábamos juntas.

En ese momento cualquier palabra sobraba. De todos modos siempre tuvimos una gran comunicación con la mirada.

Me señaló el camino con las velas y yo lo seguí. Abrí la puerta con cuidado dejando ver un hermoso campo de girasoles.

Mis ojos se empañaron completamente. Esta era sin duda una de las expresiones de amor más verdaderas que me habían hecho.

-Hace tiempo en un campo como este te prometí quedarte a mi lado todo el tiempo que me necesitaras, y aquí hoy quiero renovar esa promesa- me dijo Chloe abrazándome por la espalda.

[Flashback]

Después de haber salido durante unos meses con Chloe hoy por fin le pediría que fuera mi novia.

La emoción inundaba todo mi ser, esperando que llegara por fin la hora de pedírselo.

Le dije que saldríamos a comer un poco lejos así no se extrañaría con el viaje.

-¿Está todo listo Regan?- me preguntó Bianca viéndome llena de emoción.

-Eso creo y eso espero Coleman- le dije viéndome una vez más al espejo - ¿de verdad me veo bien?- le pregunté a mi mejor amiga volteando hacia ella, mordiendo mi labio inferior con nerviosismo.

-Entre Renné y yo escogimos ese outfit y yo te maquillé, no te puedes ver mejor Lena, hablo en serio- me dijo mi mejor amiga, acercándose a mi para darme un abrazo.

-¿Qué sería de mi vida sin ustedes?- le dijo bromeando a Bianca con un todo dramático.

-Evidentemente una completa desgracia- me dijo con un tono egocéntrico en broma -ahora vete que se te hace tarde- me dio un beso en la mejilla y me "empujó" fuera de mi habitación.

-¡Deséame suerte B!- le grité apunto de salir de mi apartamento.

-¡Suerte! ¡Te amo!- me dijo esta muy feliz.

Le lancé un beso desde la puerta y salí de ahí.

Recogí a una increíblemente hermosa Chloe en su apartamento, la cual con solo verla me dejó boquiabierta.

-Te ves increíblemente hermosa- le dije dándole un suave abrazo a Chloe.

-Y tu no tienes comparación- Me dijo esta dándome un beso corto en los labios.

Empecé a manejar bastante nerviosa, sabía de sobra que Chloe lo notaba pero decidí actuar como si nada sucediera.

Llegamos a nuestro destino en cuestión de una hora, pero este no se veía para nada como un restaurante a las afueras de la ciudad, donde le había dicho a Chloe que nos dirigíamos.

-¿Que tanto planeas hacer Regan?- me preguntó Chloe con una sonrisa nerviosa, esa sonrisa que tanto me gustaba, esa sonrisa que me daba alegría.

Le vendé los ojos y la ayudé a bajar del auto, la guié de la mano por la entrada del capo de girasoles al cual la estaba llevando llena de emoción.  

El sol empezaba a caer, haciendo ver el campo completamente hermoso. La brisa fresca y tenue hacia el cabello de Chloe verse completamente hermoso de espaldas, y hacía que su aroma bañara mi rostro.

Una vez la llevé al centro del campo le quité la venda, dejándola ver la hermosa imagen que se generaba.  La abracé por la espalda, poniendo mi barbilla sobre su hombro.

-Eres increíble Helena- las palabras salían con dificultad de la boca de Chloe, la emoción había llenado hasta la última fibra de su cuerpo, lo sabía con solo verla.

Los ojos de Chloe brillaban con el sol, su sonrisa era el mejor de los regalos que me pudieron haber dado. Sabía que quería pasar mi vida con ella.  Podremos estar jóvenes pero no hace falta estar viejas para reconocer el amor, o por lo menos no en mi caso.