✓Cap3

En un despacho cerca de la sala del trono se encontraba un rey bastante serio mirando a su hija menor lo que significaba que se avecinaba un castigo, seguramente, en cambio el vigía solo miraba la escena con un poco de diversión y Samary solo pudo mostrar una pequeña sonrisa tímida mientras disimuladamente le pedí a su vigía ayuda aunque claramente eso no sucedería.

Y aún el rey con la mirada seria  sobre Samary hablo- se puede saber en dónde estabas- Samary iba a empezar a hablar o más bien a poner una pequeña excusa pero inmediatamente fue interrumpida- como sea eso lo averiguare después, pero ahora lo mejor será que empieces a ocuparte del papeleo que hay ahí despues de todo es tu castigo por no presentarte- dijo señalando el bonche de papeles que había en su escritorio- y te sugiero que empieces de inmediato.

Dicho esto su padre salió de su despacho sonriente; mientras tanto Samary solo pudo dar un pequeño resoplido, y Sebastian solo pudo seguir riéndose de la situación aunque después de un rato se apiado de ella y le ayudó.

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En una colina se encontraba un chico  sentado mirando el paisaje que tenía enfrente, una vista que realmente era hermosa sin duda pero su paz duró poco- deberías empezar a empacar no lo crees.- el chico solo asintió- no me vas a hablar, bien, pero solo te dire que vas a asistir a una de las mejores escuelas que todo éteris quisiera ir y tu pones esa carota, ademas solo iras unos días o meses yo que sé sabes que depende de ti hasta que tiempo te vallas a quedar.

El chico solo dio un suspiro de frustración  y solo negó dando una pequeña sonrisa  que más bien parecía ser una mueca- Lo sé Ivon pero no me agrada la idea de que yo valla a ese lugar solo yo .

-Y quien dice que vas a ir solo tu, te recuerdo que yo también voy después de todo, no puedo dejar que vayas tú solito, que tal si te pierdes -empezó a negar con un pequeño gesto de horror- no puedo dejar que eso suceda.

El solamente dio una pequeña sonrisa - Solo espero que encontremos a la elegida lo antes posible, después de todo solo así podremos tener nuestras vidas más tranquilas.

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En los pasillos de la escuela Arcanum se encontraban alumnos yendo y viniendo de un lado a otro con cajas en mano pues el inicio de clases ya había empezado aunque solo una persona se encontraba tranquila en su dormitorio asignado, pues unos días antes ya había venido a acomodar sus cosas, por lo cual no se preocupaba mucho si le había faltado algo o estar yendo y viniendo.

-Pero mira no más, la princesita bien despreocupada y yo todavía tengo que lidiar con tres cajas más.- dijo la chica que estaba recargada en el marco de la puerta.

Samary se levantó de su cama pues se encontraba acostada y se acercó rápidamente a la chica a darle un abrazo  pues realmente la había extrañado mucho; después de un pequeño rato ambas se separaron del abrazo.

-Y bien cuéntame cómo te fue en tus vacaciones.