Dios les dijo a Moisés y a Aarón que los israelitas dedicaran a todos los primeros hijos varones y animales a Él. Celebrarían la salida de Egipto sin comer levadura por siete días, recordando su liberación. Deberían explicar a sus hijos el significado de esta festividad. Dios los guió por un camino más largo para evitar conflictos, y Moisés llevó los restos de José con ellos. Dios los guiaba con una columna de nube de día y una de fuego de noche.