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después de la conversación seria que tuvieron con Danila, los dos confesaron su amor por el otro aceptando así parte del destino que se había escrito para ellos.

dentro de algunos días Sara y Adonai se veían en alguna calle no muy conocida o en el castillo, siempre sonreían y estaban felices, los días, las horas se hacían cortas cuando los dos estaban juntos, solo se podía respirar el amor que se sentían los dos.

Luego de platicar mucho sobre sus vidas, por fin Adonai armado de valor, bueno en realidad solo un poco, decidió confesar sus sentimientos por Sara, así que decidió escribir unas bellas lineas como flechas que fuesen directo al corazón de su amada y endulzaran su alma:

si tus ojos amor fueran estrellas
me desvelaría solo por verlas
si tus labios amor fuesen rubíes
los robaría sin dudarlo.
Si tu cabello amor fuera la noche
Me adrentaría sin miedo alguno
Si tu voz amor fuera canción 
No dudaría en disfrutarla
Si tu cuerpo amor fuera el cielo 
Moriría solo para llegar a el
Si tu mi amor eres mía
Yo te amare por Siempre
Y si yo amor soy tuyo
Jamas me alejare de ti.

la carta fue entregada con éxito, Sara leyó una y otra vez las hermosas palabras que se plasmaban con tinta en una simple hoja de papel, y decidió contestar a su amado esas palabras, dejando que su corazón hablara por ella; la respuesta llego de inmediato a la puerta de Adonai quien salto de felicidad ante aquello.

los días y la horas pasaban como estrellas fugases en medio de la noche, rápidas, efímeras y hermosas, tantas cosas de que hablar y tantas cosas que decir, tanto que expresar, nunca se sabe que va a suceder.

el mal en el mundo siempre ha existido y nunca le a gustado ver tanta felicidad entre dos seres, esta vez, aquel mal tomo apariencia de mujer para poder separar a Sara de Adonai, así que actuó lo mas rápido posible, tendió una trampa, mil mentiras y mil razones para que aquel lazo de amor quedara en el olvido.

- ¿que tienes?.- pregunto Sara preocupada.

-no es nada.- respondió Adonai sin alguna emocion.

Sara suspiro, dio un fugaz beso en los labios del chico y se fue, una lagrima rodo por su mejilla.
Danila quien observaba detenidamente la escena desde el cielo, rápidamente se acercó a Sara, la envolvio en sus brazos mientras acariciaba su cabello.
Danila pensaba en lo que le pasaba a su amiga y por supuesto No fallaba ella estaba en lo cierto Sara había tenido un día difícil y ella se encargaría de averiguar Qué era lo que sucedía decidió primero ir a ver Aquel joven.
Toma la forma de La Paloma blanca y se alzó sobre los aires buscando con la mirada al joven que hizo pasar un mal rato a Sara y que por supuesto ella enfrentaría y le sacaría toda la información posible para poder así resolver aquel Enigma que ahora tenía en la cabeza y que no se resolvería hasta saber la verdad y la única verdad era el testimonio de alguien que vivió ese momento.

Danila se acercó a Adonai con el típico saludo que la distinguía entre todas las personas que le conocían, el joven se dio la vuelta y quedó frente a frente con esos ojos.
La mirada de Danila expresaba furia, decepción frustración y tristeza al principio tenía un concepto muy claro de Adonai pero ahora su concepto había cambiado tal vez se equivocaba pero muy pronto saldría de dudas entonces ella suspiro y lanzó la primera palabra la primera flecha directo a la mente y el corazón de Adonai para que él mismo se delatará o delatará aquel ser o entidad que estaba echando a perder todo lo que con meses de esfuerzo danila había logrado.

-¿Qué le has hecho a ella?.-preguntó danila con furia en su voz.

-Yo no le he hecho nada.- respondió Adonai.

-Entonces dime porque está asi, vamos sé que tú sabes algo dímelo por favor.- respondió Daniela y al momento una mujer de cabellos negros se acercó.

Danila alzó una Ceja ella era alguien nueva nunca la había visto por las calles y sospechaba ella tenía que ser la causante de todo este embrollo en el que se habían metido.
La joven saludo muy amablemente a Danila sin embargo ella respondió agresivamente golpeando la mano que la mujer Estaba dispuesta a estrechar.

-¿Quién eres?- pregunto Danila.

- soy Alice, mucho gusto..

-Danila.- termino la frase.
La piel de Alice se erizo por el comportamiento de Danila, nunca había visto una joven que ejerciera tanto temor con sólo una mirada, ahora Alice tenía que lidiar con dos problemas 1era deshacerse de Sara y el otro deshacerse de Danila.

Danila nunca dejaría que su amiga fuese lastimada por una cualquiera como Alice.

- ¿qué haces aqui?.- preguntó Alice con Tono cínico.

- nada de tu incumbencia.- respondió y lanzó una vez más una mirada llena de Furia y de desagrado hacia Alice.

Alice comprendió lo que pasaba y se retiró de inmediato dejándolo solos a los dos.