Marzo
Había llegado una de las fechas más importantes para Lorena, había planeado todo, bueno ciertas cosas no serían como el año pasado…
—Cuídate mucho mi niña y da lo mejor de ti. — le decía su nana mientras la abrazaba fuertemente.
—¿Enserio no puedes cancelar tu compromiso y venir conmigo? — preguntó Lorena triste. — Nick me canceló porque tendrá una operación importante y no quiero llegar sin acompañante, bueno… Hanna va conmigo, pero quisiera que tú o Nick fueran. — expuso.
—Lo siento mi niña, pero no puedo, ey… — tomó la barbilla de Lorena con su índice y pulgar y la hizo mirarla. — … sé que lo harás genial, no estaré físicamente ahí, pero si estaré presente aquí, todo el tiempo… — señaló con su dedo índice el centro del pecho de Lorena, robándole una sonrisa.
—Te amo nana, gracias… — la abrazó una última vez. — …nos vemos en unos días.
—Yo más mi niña, buen viaje.
Se subió al coche que la llevaría al aeropuerto y se despidió de su nana con un movimiento de mano y un beso al aire.
Al cabo de unos minutos el auto se detuvo frente al jet que la llevaría hasta Wisconsin para el evento. Bajó del coche, encontrándose con Hanna, el chofer se encargó de su equipaje mientras ella caminaba hacia su asistente.
—Buenos días, Hanna. — saludó con efusividad.
—Buenos días, Lore… — carraspeó, nerviosa, algo que no pasó desapercibido para Lorena.
—¿Te pasa algo? — preguntó preocupada.
—No… — la miró. — ¡Agh! — pasó una mano por su cabello con nerviosismo. — Subamos y en el camino te cuento.
—Eh… está bien. — concedió Lorena.
Ambas subieron las escalerillas del jet, recibiendo una cortés bienvenida del piloto y su equipo, ambas mujeres respondieron con palabras de agradecimiento y tomaron asiento, una frente a la otra.
—¿Les ofrezco algo de beber? — preguntó la azafata con una sonrisa amable.
—Yo una copa de champán, ¿tú quieres lo mismo Hanna? — ofreció a su asistente.
—Si, está muy bien.
—De acuerdo, en un momento las traigo.
—Gracias. — agradeció Lorena sonriendo.
Hanna la veía tan sonriente, que le pesaba tener que contarle lo que sabía, se sentía mal por ella, la apreciaba, porque cuando nadie creyó en ella ahí estuvo Lorena para darle apoyo.
Es por eso por lo que, aunque le pesara, tenía que decirle el por qué Nicholas no iba con ella.
—Bueno… ¿Qué es lo que me tenías que decir? — rompió Lorena el silencio, en cuanto sus bebidas les fueron entregadas.
—Lucas me hizo llegar como siempre la lista de la lista de asistentes del evento, y quiero que…
—Oh lo siento, dame un momento… — Lorena le dijo en cuanto el sonido de su móvil las interrumpió. — … es un mensaje de Nick, deseándome suerte en el evento. — comentó sonriente pero antes de que pudiera abrir la notificación para responder, Hanna la tomó de las manos.
—Necesito que veas la lista. — dijo Hanna con preocupación.
Lorena se preocupó ante el tono de su voz y tomó el folder que le ofrecía Hanna, no era toda la lista de invitados, solo una de ellas y cuando leyó el nombre con resaltador, sintió sus ojos inundándose de lágrimas.
—Esto… ¿estás segura? — la miró con tristeza, y Hanna al ver sus ojos sintió las mismas ganas de llorar.
—Si… — tragó saliva. — muy segura, él figura como acompañante de Olivia Lawrence.
A Lorena le dolía que él no fuera con ella, pero estaba consciente de que Nicholas está enamorado de Olivia y si él hubiera hablado con ella diciéndole que quería ir con Olivia en lugar de ir con ella, lo hubiera entendido y Nicholas sabía que ella lo comprendería… ¿Por qué decidió mentirle? ¿Cuándo perdieron la confianza de hablar?
§
Nicholas miró por décima vez su móvil, esperando la respuesta de Lorena a su mensaje, jamás demoraba tanto, le preocupaba que se haya enterado de que le había mentido y que…
Lore: Muchas gracias, Nick, espero que la operación sea todo un éxito.
Al recibir la respuesta se sintió fatal, era obvio que Lorena no dudaría de él, pero ahí estaba, mintiéndole.
—¿Todo bien? — le preguntó Olivia sacándolo de sus pensamientos.
—Todo perfecto. — sonrío forzadamente y le dio un pequeño beso en los labios.
Ella asintió y esperaron a que su vuelo fuese anunciado.
Otra cosa que no le había contado a Lorena es que, desde hace un mes, había comenzado una relación formal con Olivia.
Suspiró mentalmente, recriminándose el estarle mintiendo a su mejor amiga, esa que siempre le ha dado la confianza de contarle todo, y tratando de ser consiente del momento en que tontamente creyó que ella no comprendería su relación y su deseo de querer acompañar a Olivia al evento.
Solo esperaba no encontrársela en el evento, porque no sabría como mirarla a la cara luego de mentirle y dejarla colgada en su invitación un día antes.