—¿Crees que Nicolás esté bien? —le pregunto a mi ahora esposo.
—Jade estamos en nuestra luna de miel ¿Y solo piensas en él?
—Lo sé, perdón, pero soy mama ahora y estoy preocupada, ahora se que siente mi mamá.
—Y yo soy padre —besa mis labios.
—Un padre maravilloso.
—El mejor —vuelve a besarme— El día en que inscribimos a Nicolás con mi apellido fue... Fantástico, sentía una gran felicidad en mi pecho, solo deseaba gritarlo a los cuatro vientos, jamás lo llegue a imaginar, pero estoy seguro de que ha sido la mejor decisión.
—Que poético —me burlo— Ese día llore como una niña pequeña, esta muy emocionada y conmovida.
—Estabas feliz.
—Demasiado, aunque más lloraron nuestras madres —beso su mejilla y la acaricio.
—¿Las viste hoy? —ríe al preguntar.
—Si, eran como dos magdalenas —reímos a carcajadas.
Me acuesto sobre él y apoyo mi cabeza en mis manos para poder verlo.
—Lamento que no haya venido —digo refiriéndome a Jenny.
—Lo se amor —acaricia mi espalda descubierta.
—Quiero verte feliz Klein.
—Lo soy.
—Tal vez, pero falta ella. Cuando regresemos, arreglare las cosas y volverán a tener una buena relación ya verás —beso sus labios.
—¿Cuándo maduraste tanto?
—Cuando te conocí —dejo un beso en su cuello.
—¿Sabes que fuimos la excepción?
—¿Sobre qué?
—Dice la leyenda, que cuando la chica tímida se enamora del popular y el de ella, la ex novia de él que es capitana de las porristas, se queda frustrada para toda la existencia y aquel chico que es el mejor amigo de la tímida, logra encontrar el amor en otra chica que si se enamoró de él y vivieron los cuatro felices para siempre.
—Pero en nuestra versión, la exnovia y capitana se queda con el mejor amigo de su enemiga.
—Exacto.
—Pasa cuando no somos el típico cliché.
Me acomodo mejor para comenzar una guerra de besos.
—Seamos un cliché —suelta de la nada.
—¿Qué?
—Sí, ya que somos distintos a esas historias, hagamos nuestros propios clichés.
—Estás loco, es ridículo.
—Anda, será divertido, seamos un cliché.
Río y niego con la cabeza ¿Pero por qué no? Amo hacer locuras con el.
—Seamos un cliché.