Llegué hasta una casa rodante siguiendo al tipo, se podía ver al lado de ese vehículo algunas cajas, que lo más probable sean los explosivos. Miré el largo camino que recorrí persiguiendo a aquél hombre, los vagones se podían ver, pero a una larga distancia de todos modos, así que pensé hacerlo estallar, saqué mi pistola y apunte, pero antes me aleje un poco para que no me afecte la reacción, además si iban a matar a un sin números de mujeres ¿por qué no evitarlo deshaciéndose de ellos y de los explosivos?
El mundo está lleno de personas de todo tipo: egoístas, ladrones, abusadores, violadores… y lo más interesante de eso es que están en los puestos más importantes del mundo; empresas, política, milicia y demás. Mientras que los humildes, sencillos, pobres, honestos, son maltratados por estos grandes puestos, y a ellos quién los mata, ¡Nadie!
Bueno, cuando logré una distancia racionable, volví a apuntar, aunque no quería hacerlo por el tal hecho de que ellos morirían y a pesar de que son malas personas tienen derecho a la vida. A lo que pensaba, un disparo roza mi hombro, en seguida me escondo detrás de unas barras de concreto que habían detrás, para prevenir que me dieran, el disparo causó que todos se alarmaran, ahora sí que se me puso difícil la situación, pero no sé por qué, esto no paso en mi sueño, ¿qué hago? fue lo que me pregunté. Sin darme cuenta habían delante de mí dos tipos que sin pensarlo apuntaron y dispararon, pude moverme rápidamente esquivando las balas. De un momento a otro he salido volando de la explosión.
Editado: 21.02.2020