DIECISIETE

Había pasado una semana desde que Douglas y Nicole habían tenido relaciones. Las cosas marchaban bien; sin embargo ninguno de los dos había mencionado la palabra amor.

Era mediodía del domingo, Nicole se encontraba arreglando las habitaciones. Habían arreglado la calefacción el día de ayer, aunque Douglas le había dicho que lo mejor sería que compartieran habitación, ella había estado durmiendo con él, pero aun no se atrevía a cambiar sus cosas de habitación.

Tenía una pequeña espina de duda, no se sentía segura sobre si realmente funcionarian como matrimonio. El timbre sonó por casi toda la casa, tres veces seguidas... Nicole sabía quién era, solo una persona hacia eso.

Cualquiera que fuera el motivo debía ser malo, ya que Nicole sabía que no era la persona favorita de quien se encontraba en esos momentos tocando el timbre.

Manteniendo la calma, bajo las escaleras y fue a abrir la puerta, en ese instante Douglas entraba con Tommy en brazos por la puerta que daba al jardín, le dio una leve sonrisa a Nicole, ella se lo devolvió y se dispuso a abrir.

Enfrente de ella se encontraba la madre de Douglas. La señora Blake, tenía un carácter imponente. Nicole sabía que no era la persona favorita de su suegra ¿a qué había venido realmente la madre de su marido?

- Espero no interrumpirlos, lamento no haberles avisado de mi visista. - dijo la madre de Douglas entrando, Nicole sabía que realmente no lo lamentaba.

Cerrando la puerta vio como su suegra, Rebecca, caminaba por la sala con total libertad. Dándole dos besos en la mejilla saludo a su hijo para después arrebatarle a Tommy de los brazos, el pequeño protesto un poco, y con la mayor elegancia se sentó en el sofá.

- Hace mucho tiempo que no has ido a visitarnos Douglas. -le reprochó su madre.

Él solo ladeo la cabeza y le dijo que había estado ocupado. Nicole hizo una pequeña intervención en la platica de ambos para ofrecerle algo de tomar a su suegra.

Ésta cortantemente le dijo que quería una copa de vino. Resignada por el trato de Rebecca, Nicole fue a la cocina por esa copa de vino.

-Maritza dijo que venía en camino. - dijo su madre apenas Nicole salió de la sala.

Douglas sólo pudo pensar en cómo Nicole manejaría la presencia de su madre y ex suegra. Tomo asiento en el sofá frente a su madre.

- Me alegra que hayan venido a ver a Tommy.

- No tenía opción, como tu querida esposa no lo lleva no me quedo de otra más que venir. - dijo con total reproche Rebecca. - Además el pequeño casi cumple un año.

- Si, la madre de Nicole está planeando hacerle una pequeña fiesta. - le informó.

- Creo que tu suegra se toma muchas libertades con mi nieto. - dijo con recelo Rebecca.

Douglas tuvo que morderse la mejilla para no decir un comentario de mal gusto a su madre.

- La madre de Nicole tiene los mismos derechos como abuela que tú.

Antes de que dijera algo más Nicole regreso con una bandeja, él rápidamente se coloco de pie para ayudarla, cuando sonó por segunda vez el timbre. Nicole rápidamente fue a abrir mientras su marido le daba su copa de vino a Rebecca.

Apenas abrió la puerta deseo no haberlo hecho, enfrente se encontraba Maritza Walt, la madre de Melissa, y por la cara que traía no venía en una actitud muy amigable. Nicole se hizo a un lado para dejarla entrar.

Al igual que Rebecca saludo a Douglas, para después hacer lo mismo con Rebecca. Solomente esperaba que la madre de su marido y la madre de su difunta amiga no planearan quedarse por mucho tiempo.

Le ofreció a Maritza algo de beber la cual sin siquiera dirigirle la mirada a Nicole pidió una copa de vino.

Entrando de nuevo a la cocina soltó un profundo suspiro. Tras tranquilizarse fue por dos copas y sirvió vino en una para luego tomarlo de un solo trago.

Douglas al ver que Maritza y su madre hablaban entre ellas fue hacia donde estaba Nicole, la encontro llenando una copa y observó que ora estaba vacía.

- Estabas tardando. - dijo Douglas cuando ella volteo a verlo.

- Lo siento, ya voy. - respondió.

Se acerco y colocando una mano en la cintura de Nicole y con otra acariciando le la mejilla, la beso. Fue un beso corto, pero que hizo tambalear a Nicole, con una sonrisa de lado Douglas tomó la copa de vino y con su mano libre entrelaza sus dedos con los de Nicole para ir a la sala donde se encontraban su hijo, su madre y ex suegra.

Le dio la copa a Maritza y ambos se sentaron.

- Con respecto a Tommy, nos gustaría involucrarnos más en la vida del pequeño. - habló su madre refiriéndose a Maritza y a ella - Me he enterado que tu "suegra" - la forma en que su madre dijo esa palabra fue tan llena de sarcasmo que Douglas noto como Nicole se tensaba a su lado. - a cuidado en varias ocasiones a nuestro nieto.

Con la mayor calma posible Douglas le explicó a su madre la razón por la que Tommy pasaba tiempo con la madre de Nicole

- Marine ha demostrado que a pesar de como han sido las circunstancias, quiere a Tommy como si fuera su nieto.

Maritza soltó un bufido ante las palabras de Douglas.

- Lo que no puedo creer es en como pudieron haber engañado a mi hija. - Maritza, quien se había mantenido un poco al margen, hablo llena de resentimiento y viendo a Nicole agregó. - Le advertí a mi hija que no confiara en una persona como tú, eres una...

Antes de que dijera algo más Douglas se levantó apresuradamente y con voz fuerte le ordenó que parara.

- Basta, si esta insinuando que engañe a Melissa con Nicole mientras ella aún estaba viva, estas más que equivocada, no te permito que ofendas de esa forma a Nicole.

Ante eso Maritza igual se coloco de pie.

- Entonces porque te casaste con ella al poco tiempo que mi hija murió.

Tommy escogió ese momento para soltar un pequeño grito, todos voltearon a verlo, él se encontraba apunto de llorar y viendo fijamente a Nicole. Rebecca al ver esto se puso de pie al mismo tiempo que Nicole y le entregó al pequeño.