El sendero de la muerte

El inframundo, un lugar gélido con olor a incienso, o por lo menos así es el sendero que se dirige al inframundo. He seguido un camino que parece no tener fin, he caminado tanto pero no consigo encontrar alguna pista, no es muy distinto del mundo de los vivos, solo que aquí no toca el sol, tal vez por eso no es un lugar muy animado, trato de disimular que no he escuchado esos pequeños pasos, creo que me siguen, volteo la mirada y miro de reojo, es un niño pequeño, unos siete años aproximadamente, viste jeans  y sudadera azul Marino con capucha, me iba siguiendo desde que crucé el sendero del llanto y las lagunas de papel, me acerco hasta donde él se esconde, está detrás de un árbol sin vida pero que deja relucir su codo y un pedazo del zapato blanco, no es un experto en camuflaje eso es obvio.

Me acerco y lo miró fijamente, me responde con una sonrisa pilla.

-A dónde vas?

-Voy al infra mundo, a buscarla a ella, menciono en voz más baja.

-No podrás continuar, añadió, es más no podrás ni llegar.

Me sentí enojado al escuchar sus palabras, más aún se borró la amargura de mi rostro para mostrar una ira muy fuerte, pero antes de tener tiempo en responderle continuo.

-yo no he visto a nadie que cargue con algo como lo que tú arrastras en tu espalda y que alcance a cruzar el inframundo.

El niño me miraba de arriba a abajo, con una expresión de angustia, miedo y asco, pero en ese momento no sabía a lo que se refería, miré a la izquierda, donde al asomarse al abismo te puedes ver reflejado ,para ver por mis propios ojos a lo que el niño se refería, cuanta fue mi sorpresa al ver que había una serpiente de color negro, brillante que recorría enrollada desde mi abdomen hasta mis hombros, la punta de su cola estaba a la par de mis rodillas y su cabeza descansaba en mi hombro, al mirarla pude sentir lo frío de su piel y como llegaba ese frío muy dentro de mí, volvió su cara hacia a mí y con una sonrisa pronunció mi nombre.

-ikal, por fin nos conocemos. Dijo mientras apretaba mi cuerpo.

-Quítamelo!! ¡¡Quítamelo!!

Me fui de espaldas y el dolor del golpe me dejó quieto

-si no pudiste deshacerte de él en la tierra del sol, ahora menos en los caminos de la muerte donde no toca la luz, esa carga no era tan pesada allá, pero aquí no vas a poder avanzar mucho, en el camino de la muerte, la eternidad no te dejará avanzar.

Apenas y pude terminar de oír sus palabras, pero cuando me levanté no había nadie junto a mí. Otra vez solo.

No pude evitar caer de nuevo en la tentación y volví a mirar hacia el abismo, no había nada reflejado esta vez, me senté y di un enorme suspiro, me sentía aliviado. Sentí en ese momento un peso sobre mi brazo y un ligero hormigueo, me costaba moverlo,.

Un ruido extraño se hacía cada vez más fuerte, además había una niebla negra rodeando mi brazo.

-Ikal, por mas que te esfuerces en esconderme saldré de aquí, no puedes contenerme para siempre.

Di una bocanada de aire al mismo tiempo que agarraba fuerzas para contestar.

-si es lo que quieres es salir puedes hacerlo, aléjate de mí.

-Me necesitas mas de lo que crees, no me tengas miedo, que la diferencia entre un don y una maldición es solo la actitud del portador.

Termine de escuchar sus palabras y la niebla desapareció, me siento pesado por alguna razón, como aquella vez… Pero con la diferencia que esto no se siente cálido, es más como un dolor en el estómago y un poco de confusión.

Sigo hacia adelante, avanzó uno, dos, tres pasos, todo se pone borroso, ya no hay figuras nítidas, solo una gran mancha de colores, la pesadez se ha ido y me siento tan ligero, tan ligero, escucho la música a mi alrededor, into the fire, es el tono de llamada de Ixchel.

Comienzo a cantar.

This time, this time

Turning white and senses dying

Pull up, pull up

From one extreme to another

From the summer to the spring

From the mountain to the air

From samaritan to sinner

And it's waiting on the air

¿Como termine así? Probablemente por un apego emocional sin razón aparente, por un vacío que solo ella llena, o quizá porque de cierto modo tengo que encontrarla, pero esta noche daré un gran suspiro y entregare mi corazón sin importar nada. El amor para algunos no sería justificación, porque para ellos el amor no existe y lo creen una ilusión, pero realmente existe, yo lo tuve y cuando me tenga que marchar me lo llevare conmigo.

Me desvanezco, pero tengo que seguir, tengo que volver a verla, quiero soñar con ella.

Caigo al suelo.