Señor L.

Para ti, querido lector.

Para ti, que estás a punto de sumergirte en ese hermoso mundo de dolor y felicidad, quiero decirte que muchas gracias.

Gracias a todas las personas que creyeron en mí al momento de escribir este hermoso y tan sanador libro.

Este libro fue mi escape en un tiempo donde la vida para mí no tenía sentido, pensar en la persona en la que me inspiré para escribir todo esto, me sigue llenando de regocijo y siento felicidad de saber que gracias a él cumplí uno de mis sueños: Escribir un libro.

La recuperación de todo este proceso no ha sido fácil, hay días en los que la oscuridad me sigue invadiendo y quiero desmayar, pero luego recuerdo que, gracias a personas y momentos, por fin me pude encontrar. Me falta mucho camino que recorrer, pero voy aprendiendo, cometo errores, a veces con las personas que no se lo merecen, aunque voy aprendiendo día a día.

A veces, todavía soy la niña perdida llena de miedos, otras veces me como al mundo de un mordisco, pero reconozco que sin importar qué, quiero seguir viviendo y seguiré en busca del camino de la felicidad por el tiempo que la vida decida tenerme respirando.

Sin duda alguna, el contar con el apoyo de quienes leyeron y leerán esto, es uno de mis motores principales, deseo con todo mi corazón que les vaya bien en la vida.

Si en algún momento fui la causante de sus disgustos, espero puedan perdonarme, a veces voy creciendo en pasos pequeños y otras veces retrocedo, nunca quise dañar a nadie con mis palabras, pero si logré ese efecto, me disculpo con todo mi corazón.

Con amor, alguien que te quiere mucho.




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